El juego de quererte en secreto [Chiara OT 2023]

¿Beso?

El domingo pasó bastante rápido, dejándoles así en la noche anterior a la gala cuatro. Las cámaras llevaban media hora apagadas, y muchos habían decidido irse a dormir para descansar la voz, tan solo quedaban Violeta, Denna, Chiara y Elizabeth en la terraza, hablando entre las cuatro, con un brazo de Chiara por los hombros de la francesa.

— Estoy super nerviosa por la gala de mañana.— Susurró Denna, llevándose la atención de todas. Tenía los ojos llorosos y se abrazaba a sí misma.— No quiero irme, siento que aún no he podido demostrar lo que valgo realmente.

Elizabeth miró preocupada hacia Violeta y esta les hizo un gesto para que las dejasen solas. La menor asintió suavemente y se levantó para dejar un beso a Denna en la cabeza, y después acercarse a Chiara, poniéndose de pie en frente suyo.

— ¿Vamos a un box? — Preguntó viendo como Chiara fruncía el ceño, algo confundida.

— ¿No deberíamos quedarnos para ver que Denna esté bien?— Elizabeth rodó suavemente los ojos y tomó a su novia de las manos, tirando de ella.

— Estará bien, tira.— Dijo tirando de ella fuera de la terraza, y, una vez fuera, volvió a hablar.— Anda que no te enteras de nada, ¿eh? — Chiara la miró frunciendo el ceño, entrelazando sus dedos con los de ella.

— ¿De que estás hablando?— La rubia suspiró suavemente y ambas se metieron a un box, cerrando la puerta de este.

— A Denna le gusta Violeta y viceversa, pero Violeta tiene novia y no sabe lo que hacer.— Chiara abrió su boca, sorprendida, era lo último que se esperaba que le confesase su novia.— Así que Violeta me dijo que las dejásemos solas, supongo que para poder hablar las cosas. 

— Oh my god...  — Susurró Chiara, aún procesando la información que había recibido.— Pensé que Denna era hetero.

— Yo también pensé que yo era hetero y aquí estamos.— Chiara rió suavemente mirando hacia Elizabeth y se acercó a ella, para así juntar sus labios.

— Nadie se creía que tú fueses hetero, sweetie. — Aparó un mechón de pelo del rostro de su novia, viendo como una sonrisa aparecía en el rostro de esta.— Finges bastante mal, se notaba que yo te volvía loca.— Elizabeth abrió su boca y rió suavemente.

— Se notaba a leguas que yo te volvía loca a ti.— Enfatizó, señalando a Chiara y dándole un golpecito con el dedo en el pecho.

— En realidad solo soy tu novia porque tus padres me pagan.

Elizabeth tragó suavemente en seco, siempre se le olvidaba que aún no le había dicho a Chiara el pequeño problemita que había con sus padres. Decidió que ese no era el momento, ya tendría tiempo para contarle eso, en otro momento. Otro momento muy lejano. Cuanto más lejano, mejor.

— Sabes que iba en broma, ¿no? — Susurró Chiara, algo preocupada al ver el cambio de expresión en el rostro de su novia. Elizabeth la miró y sonrió suavemente, asintiendo, tratando de aparentar que todo estaba bien. 

— Lo sé, tranquila.— Respondió en el mismo tono, viendo como Chiara se acercaba a ella.

— ¿Está todo bien? Has puesto una cara rara.— La rubia sonrió, asintiendo de nuevo, poniendo su mano sobre la cintura de Chiara, no quería preocuparla, ya tendría tiempo de hablar de ese tema con ella más adelante. 

— Solo me preocupa que Denna se vaya mañana, eso es todo.— Chiara asintió suavemente, entendiendo el punto y la preocupación de la francesa, sabía que Denna y ella se llevaban muy bien.

Chiara sonrió y se acercó a ella, para dejarle un beso en sus labios, acción que fue recibida por una gustosa Elizabeth, haciéndola sonreír en mitad del beso, acariciando la cintura de Chiara. Cuando se separaron, la mayor se quedó mirándola y, sin poder evitarlo, sonrió.