El Amo Min es el dueño de gran parte de las tierras productoras de arroz y ganadero, tiene a su disposición un montón de esclavos que le sirven en casa, ninguno es mujer, el amo Min aborrece a las mujeres.
Un día en una de sus compras, un muchacho...
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En un principio la tierra tenia a sus hijos cobijados en su vientre, donde se alimentaban de la verdad, de honestidad, amor y otros sentimientos.
A cada hijo le dio un nombre y cada uno de ellos formo su reino.
La Diosa agua construyo sus cimientos en medio oriente.
El Dios de lo natural lo hizo en occidente.
El Dios de la muerte al costado de oriente y nada en sus tierras crecía, pero la gente vivía bien.
La Diosa luna tenia sus tierras en el oriente conviviendo con el Dios Sol.
Y eso marchaba bien.
Pero al sol se le olvidaron los alimentos de la tierra mientras su pequeño pueblo creo, y la avaricia les domino, y todos sus hijos se llenaron del pecado.
Entonces la luna al ver que sus hijos eran contaminados recurrió al sol para pedir una tregua y este cedió.
Y entonces cuando el sol estaba en lo mas alto y la luna en el punto mas bajo, el sol la tomo por la fuerza.
Y la luna se vio furiosa al ser manchada por el Sol, y aquella noche se pinto de rojo y otra mas se ocultaba llena de pena.
Entonces viendo que el Sol no iba a retroceder jamás, dividió su reino con el del sol, y jamás se volvieron a tocar.
El reino de la luna prospero, sus hijos crecieron y todo era bueno.
Hasta que un día el rey quien amaba a su hijo único vino a ella de rodillas llorando por su salud, las mujeres del sol le habían abusado haciendo que el pequeño no quisiera salir más de su habitación condenando al reino.
Y la Diosa que comprendía su dolor le envió a su hijo mas pequeño, el mas bueno y hermoso, y viendo que ambos se amaban, le dio un don, y sobre el don la capacidad de dar a luz para que el reino fuera atacado jamás de nuevo.
Y los años pasaron, que se volvieron décadas donde el sol vino a retarla de nuevo, donde vino a provocarla, donde vino a tocarla, siendo la luna ahora grande, siendo ahora orgullosa, miro a su reino y vio por que el sol se tomó esa libertad.
Porque la sembró una semilla, una que al crecer destruiría lo que ella había cuidado con amor.
"Cuando tus ojos se habrán, mi hermoso hijo amado, en tu vientre llevaras la vida del nuevo renacer, y entonces romperás lo que es molesto"
El pequeño consorte segundo esposo de su majestad el rey despertó en un mar de llanto completamente lleno de la paz divina
