capitulo 13

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CAPITULO 13

25-02-1970

Después de lo que sucedió el 19 de febrero, en la escuela se esparció como pólvora la historia de mi desmayo, mis compañeros de salón e incluso compañeros de otros grupos, se me acercaban preguntando por mi salud, hubo claro burlas y chiste de muy gusto, acerca de que tenia no se cuenta enfermedad o cosas ridículas, también hubo quienes se alejaron por temor a que los enfermase, y obviamente no podían faltar los maestros, quienes cada vez que me veía me preguntaban como me sentía y si me encontraba bien para tomar la clase, la cosa escalo tanto que me vi obligado a ignorar a todos a mi alrededor, era mejor estar solo al hostigamiento que ya recibía a diario.

Entre todas las historias y rumores que se crearon a partir de mi desmayó, hubo una en particular que llamó mi atención, esta hablaba de que un niño al mirar como me había paralizado, pudo notar que levitaba apenas unos centímetros separado del suelo, claro que solo quedó como un rumor más, al no saber quién era aquel supuesto niño, y al parecer ser el único que había notado aquello, pues ningun compañero o maestro lo había visto.

Papá también pareció cambiar su actitud hacia mi, si antes era distante y frío, ahora se habia vuelto un hijo de puta en todo el significado de la palabra.

Aunque también se encuentra más al pendiente de mi, de lo que alguna vez lo estuvo, aunque su carácter y comportamiento se han vuelto de echo muy molestos.

En cambio Alicia parece ser más dependiente de mi, siempre buscar estar a mi alrededor y al igual que padre se encuentra muy al pendiente de mi, procurando que coma y duerma lo suficiente, tal vez por mi malestar reciente, no lo se, hoy en día todo resulta complicado.

Como siempre, papá nos lleva al colegio, y apenas bajamos del coche, lo arranca de nuevo y se va, típico de el.

Alicia y yo entramos juntos al colegio y ella me despide besando mi mejilla y corriendo hacia su grupo de amigas, quienes la saludaban y abrazaban, yo retomo mi camino y me dirijo hacia mi salón, deteniendome a medio pasillo al observar al niño de antes, cerrando el pasillo y mirándome con molestia.

- Mira nada más, la persona que justamente estaba buscando, la otra vez no pudimos continuar con nuestra charla -. Me dice y sus amigos me acorralan.

No tengo tiempo para escuchar de nuevo tu ego inflado, así que dejame pasar?? —. Le respondo y se acerca a zancadas hacia donde me encontraba, con ojos centellando de furia y puños cerrados fuertemente.

- Parece que no entendiste lo anterior, TU no eras más que un raro niño estúpido, tu hermana es lo mismo y tu padre es peor, apenas llegaron al pueblo, y tu padre cree que son mejores solo por que su familia fueron fundadores de este lugar, pero aquí ya no son nadie, aquí ya nadie los recuerdas -. Me dice, su rostro se había vuelto rojo y parecía a punto de golpearme.

Con anterioridad ya había escuchando la historia de la fundación de este pueblo, de igual manera había escuchado acerca de mis antepasados en este pueblo, así que no era nada nuevo escuchar esto, pero era el trato hacia Alicia lo que me molestaba, desde que era un poco pequeño, mamá solía decir que yo era muy sobreprotector con Alicia, que siempre buscaba su bienestar y no se equivoco.

Las luces a nuestro alrededor parpadean pero no puedo dejar de mirarlo, y al parecer el tampoco, el esta por lanzarme un golpe cuando su rostro se vuelve morado, se lleva ambas manos hacia su garganta y se encorva un poco intentando recuperar algo de aire, cuando notó que esta por desmayarse, me alejo y lo observó confundido, el logra volver a respirar y cae al suelo de rodillas y su rostro poco a poco vuelve a su color pálido.

- ¡Emilio! - Gritan a mis espaldas y voltea con rapidez, hacia nosotros se acercaba una maestra,era la maestra Selina, una mujer alta y de cabello blanco, ella llegó hacia nosotros y se arrodilló hasta estar a la altura de Emilio.

Que sucedió?? - Dice ella, colando su mano derecha sobre la espalda de Emilio y la izquierda sobre el hombro de este.

- No lo se, estamos hablando cuando de pronto se sintió mal, parecía que no podía respirar.. Le digo a la mujer y ella asiente.

- Váyanse a su salón -. Nos dice y no espero que lo vuelva a decir antes de irme de ir y caminar derecho a mi salón.

Cuando llego a este, me encuentro a la maestra Elena de español dando clase, toco la puerta con suavidad, ella deja su explicación y me observa con un rostro serio.

Donde estabas, que la clase ha comenzado desde hace diez minutos. -. Me dice mientras me señala con su dedo índice su reloj de correa de cuero.

La maestra de español era una mujer que tenía fama de ser una maestra estricta, su cabello era corto y castaño, siempre estaba chino, llevaba pantalón y rara veces vestido, era de piel blanca y tenía unos ojos color cafés oscuros.

- Lo siento maestra, ayude a un compañero de otro grupo que pareció tener un ataque de asma.. Le digo y ella asiente.

- Tienes manera de comprobarlo?? Por que si no lo siento pero no entraras a mi clase, creo que deje claro al inicio de curso que yo no iba a permitir esta falta de disciplina. -. Me dijo y yo asenti.

- Lo entiendo profesora, la Maestra Selina me vio, fue la misma que se llevó a mi compañero a la enfermería. -. Respondí, ella sintió de nuevo y me hizo un ademán para que entrará.

Le agradecí y entre al salón, me senté en mi butaca y saque mi cuaderno y libro de español.

Bueno como decía... hace muchos años, cuando se terminó de construir Darskey, en 1837, los fundadores y co-fundadores decidieron realizar un evento que se realizará en Marzo 1 de cada año, como aniversario del día que Darskey se fundó, es ese, el origen de la feria de Darskey. Y como cada año, mis grupos van a crear una atracción para la feria, a este grupo le tocó traer los premios que se le darán a los ganadores del juego... - Dijo la maestra.

Lo que dijo después no lo escuche, por mi mente muchas cosas pasaron, muchos pensamientos que a mi parecer eran más importantes que una feria tonta, o eso creía, ya ni siquiera sabía lo que pensaba, esta situación era demasiada estresante, demasiada angustiosa.

Como desearía volver a Inglaterra, despertar en mi cama y que nada de esto esté pasando, que solo sea una horrible pesadilla.

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