•32 | Necesitaba... Dejarlo ir.

137K 9.3K 25.8K
                                    


Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


-YeonJun quiere verte.

Entonces, aquel oxígeno que pretendía ser tan perfecto en este cálido lugar que parecía una parte más de aquel hogar que ambos formarían, comienza a faltar dentro de él al distinguir en la mirada de Jungkook la contrariedad de lo pronunciado. Miedo y entendimiento; miedo por volver a colocar a su novio junto con su hijo en una misma habitación después de lo sucedido. Y entendimiento, porque es lo suficientemente maduro en comprender que se deben aquella conversación después de todo el tormento que tuvieron que vivir.

Auténticamente todo fue una larga pesadilla de meses, un mal sueño que no quiere revivir de nuevo de ser posible. Pero es su deber hacerlo aunque no quiera, deben concluir de una manera sana las cosas, sigue siendo el hijo del que es su novio, y mucho más por ello, debe superar esa parte de su vida que ahora conforma su pasado. Aunque una gran fracción de temor lo azote, debe tomar la valentía entre sus manos.

-¿Quieres que lo vea?—pregunta suave, con evidente ansiedad respecto al tema. Pese a que ha pasado ya un tiempo prudente desde aquella noche, todavía recuerda vivamente todo lo sucedido; lo aterrorizado que estaba, el sabor de su sangre, los gritos de NamJoon y Jimin, la pelea con Jungkook, las verdades crudas que salieron. Él de verdad creyó que todo acabaría allí. Todavía se siente susceptible respecto a ello—¿No crees que es pronto?

-No se trata de mí, Tae. Es de ti... ¿Tú quieres verlo? No deseo presionar. No obstante, opino que ambos deberían hablar, aclarar, cerrar ciclos de manera correcta. Ambos se merecen un final, uno de verdad, uno donde sean palabras las expresadas y no maltratos, agresión—eso último lo dice en un susurro. Revivir esa experiencia en particular le hace sentir avergonzado, ya que apenas recuerda que no actuó como se supone debía frente el magullado rostro de su pequeño. Carraspea—más todo depende de tu disposición, si no es ahora... Seguro será después. Pero ten por seguro que ocurrirá algún día.

-¿Él estará bien? Al verme, quiero decir—quita con cuidado la toalla húmeda de su cabeza, dejándola sobre sus muslos que también están un poco mojados. Su pierna derecha comienza un movimiento ansioso—¿Crees que podrá controlarse? No quiero que haya más problemas ligados con nosotros. No quiero que sea imposible mantenernos en una misma habitación... Por el bien de esta relación, eso es lo menos que necesito.

-Pequeño—tranquiliza con una mirada cálida, arrastrando sus manos por sobre el vidrio de su escritorio para conseguir las contrarias con rapidez. Taehyung mira fijamente sus ojos oscuros que parecen poseer estrellas, percibiendo el sosiego recorrerlo con tan simple acción. Todavía le resulta desconcertante que algo así suceda consigo—estaremos bien, sé que podremos superar cada una de las dificultades. ¿Acaso no lo hemos hecho hasta ahora? Cada día crecemos más como personas, aprendemos, aceptamos. Sé que esto será complicado de hacer, las heridas seguirán ahí si no nos preocupamos lo suficiente por sanarlas; pero confío en ti. En tu capacidad para manejar esto y muchas otras situaciones más difíciles. ¿No eres tú quien llegó a tener tres trabajos y nunca bajar su nota en la universidad?—pregunta con evidente orgullo en su voz—Ánimo, aquí estoy yo para alentarte en todo lo que sea necesario. No temas apoyarte en mí.

Sr. Jeon | KookvWhere stories live. Discover now