🐑LA OVEJA RESCATADA🐏 21/8/14

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Había una vez una oveja que se llamaba curiosa, siempre estaba con las demás ovejas, pero hacían lo mismo siempre y eso le cansaba, el seguir los pasos del pastor de las ovejas también le cansaba, pues no era cosa fácil, la oveja curiosa sabía desde un principio que ese camino no era fácil, muchas veces tenía que andar sobre espinas que la lastimaban, sobre piedras afiladas y muchas veces encontraba rocas al frente y no podía pasar. Había un grupo de ovejas que se llamaban las ovejas rescatistas, pues eran las que se dedicaban a rescatar las demás ovejas que se perdían por los caminos y ese grupo de ovejas las llevaban sanas y salvas al redil, pero otras se alejaban tanto que no tenían manera de buscarlas y si las buscaban no las encontraban y si las encontraban nada podían hacer, porque ya no podían volver al redil. Curiosa se empezó a mezclar con otras ovejas que no eran de ese redil, ovejas que andaban por el mundo haciendo lo que querían hacer, no tenían ningún pastor, no seguían ninguna regla, vivían su vida al máximo sin importarles nada y sin darles cuenta a alguien, la oveja curiosa se fue alejando cada día del redil, cada día de su pastor, hasta que completamente se alejo, el grupo rescatista le hablaba, le aconsejaba pero curiosa estaba rebelde y no quería hacer caso, también el pastor le advertía pero ya era tarde, ya curiosa se había contaminado con las cosas que hacían las otras ovejas rebeldes.

Un día curiosa fue a caminar con sus amigos rebeldes, era un camino distinto, no había piedras afiladas, ni habían espinas, ni rocas en el medio, ese camino era hermoso, tenía rosas a cada lado del camino, limpio, ancho, un camino perfecto, empezó a hacer cosas que antes no hacia, y a veces se preguntaba porque las hacía pero no le daba importancia, a veces pensaba en su pastor y se entristecía pero esa vida que tenía ahora era mucho mejor sin dolor, sin nada malo que pudiera pasarle pensaba ella, sin dolor. Las ovejas rescatistas habían planeado salir a buscar a curiosa y estaban dispuesta a dar con ella, andaron y andaron y andaron, caminos largos y peligrosos, y se entristecian a ver más ovejas tiradas en los caminos sin poderse levantar, ovejas que ya no podían volver al redil y no era que no pudieran, pero muchas ya tenían un dueño que era cruel en gran manera y las amarraba con cadenas, con grilletes y ya no podían soltarse, y si se soltaban el dueño cruel las volvía a amarrar porque a la vez que se amarraban les era bien difícil soltarse y volver al redil, pues el dueño cruel siempre estaba pendiente a ellas, y mucho más a las del redil, pero las rescatistas dieron con curiosa, estaba tirada en el camino más oscuro que podía haber en todo ese lugar, estaba golpeada, amarrada, lloraba, y ya no tenía amigos, pues se habían ido, porque eran enviados del dueño, siervos del dueño cruel, eran ovejas que estaban tan encadenadas, tan sometidas al dueño cruel que no tenían remedio de llegar al redil, pues el dueño cruel las usaba como marionetas, y solo a el le daban cuenta pero eran tan astutas, tan listas y con tanta labia de convencer que andaban por ahí como les daba la gana haciendo gran daño, ya habían logrado lo que querían, pero curiosa se aguantaba, anhelaba volver al redil, se arrepentía tanto de haberse alejado, dormía apenas, pues decía que tal vez era un sueño pero cuando despertaba, estaba en el mismo lugar encadenada, los rescatistas la habían encontrado, y no tan solo la habían encontrado pues ellas tenían el poder de parte de su pastor de soltar las ovejas y de llevarlas al redil, de arrebatárselas al dueño cruel, tomaron a curiosa con cariño y suavidad, con palabras suaves les hablaban, curiosa se pudo levantar y salir del camino ancho de oscuridad, pudo volver al redil, de hay en adelante no le importaba si hacían lo mismo o si el camino era difícil para caminar, si se cortaba los pies o no, solo estaba segura que no volvería a irse del redil, ni dejaría jamás a su pastor, la oveja curiosa creció en gran manera, fuerte y valiente, se unió al equipo de rescatistas, se había convertido en un oveja guerrera del pastor, y salia todos los días a rescatar esas ovejas que pensaban que estaban sin salvación, a esas ovejas que estaban perdidas, se dedicó toda su vida a arrebatarle las ovejas al dueño cruel porque no le pertenecían a él, porque el pastor de las ovejas las había comprado todas, pero no todas aceptaron y se fueron y otras les eran agradecía por tal acto que él había hecho.

QUE OVEJA ERES TU?

LA DEL PASTOR O LA DEL DUEÑO CRUEL?

LA DEL REDIL O LA QUE ESTA AMARRADA?

CUENTOS CRISTIANOSOù les histoires vivent. Découvrez maintenant