TERCERA PARTE
LAS SOMBRAS
Revisando mi vida, hoy puedo entender el por qué de muchos de mis actos. Hoy, pero no pude entenderlo entonces.
Creo que siempre viví con la sensación del abandono, con el miedo al abandono.
Me fue muy difícil llegar a entender que no me abandonaban. Que los actos que cometía el resto de la gente no estaban destinados a mí o que algunas veces, las consecuencias que sufría no eran por las acciones de otros, sino por mis decisiones.
Por lo tanto, descubrí que vivía esperando el abandono. Es cierto que varios hechos se habían sucedido para que aquella fuera mi manera de pensar...
Mi madre había muerto siendo yo bastante pequeña y un gran agujero, un gran dolor había dejado en mi vida. Luego mi padre, que poco a poco se iba alejando de mí... y por último Mariano. Yo había idealizado nuestra relación, y de pronto, todo se había desmoronado, dejándome nuevamente sola y llena de dolor.
Y entonces había podido formar una pareja con Francisco, que me hacía feliz, me llenaba, me apasionaba.
Por eso, hoy, luego de echarle un largo vistazo a mi vida, concluyo que me anticipé, a lo que supuse, sería inevitable.
YOU ARE READING
Tal Vez, la historia de mi vida
RomanceEsta historia no es sólo una historia de amor. Es una historia de vida. Poty, su protagonista, inicia su relato a los diecisiete años. Es hija única. Su madre murió hace algunos años a causa de una terrible enfermedad y su padre se refugió desde ent...