Capítulo 17

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La Reina camino rápidamente hacia la habitación de Edna, no corría pero sí avanzaba rápidamente, claro, sin perder la elegancia que la caracterizaba, avanzaba detrás de ella, la criada iba detrás de nosotros, mientras caminábamos, la Reina no dejaba de dar indicaciones a la criada, la última fue que llamara al médico de urgencia, con esto, la delgada doncella nos dejó, cuando llegamos a la habitación, la Reina abrió la puerta sin tocar, del interior salió un aroma desagradable, fruncí la nariz, la habitación entera olía a vomito, dentro, postrada en su cama estaba Edna, desaliñada como nunca, tenía el cabello revuelto y enredado, había una criada que tenía en sus manos un gran recipiente de cerámica, el cual Edna jalo hacía sí para vomitar una vez más, otra criada hacía aire para ella con un abanico, otra más limpiaba el desorden del cuarto, Edna portaba solo su bajo vestido blanco, no traía faja y las cobijas la tapaban hasta la cintura - Edna, ¿qué sucede contigo?- mi hermana aún vomitaba, unos segundos después, dejo de hacerlo y la criada que sostenía el recipiente le acercó un pañuelo de seda blanca, con el que Edna se limpió la boca y nariz, luego lo aventó al suelo -Majestad, llevó días sintiéndome así, tengo mucha hambre de cosas extrañas, nauseas, y hoy, vómito, desde hace semanas no soporto la faja del vestido y he tenido que usarla más holgada, no tolero la presión en mi abdomen- terminó de hablar y dejó caer la cabeza hacia atrás, la expresión de la Reina pasó a ser una llena de duda, se acercó más a Edna, y me indicó con un movimiento de mano que no avanzara, bajo la voz cuando estuvo frente a ella, pero aún así logre escuchar lo que dijo -¿Hace cuánto que no haz tenido... tu periodo?- lo último lo dijo en voz aún más baja, sentí que me ruborizaba, retrocedí unos pasos, era muy incómodo tener que escuchar estas cosas, pero no podía estar muy lejos de la Reina, por lo que me aleje lo más que pude sin salir de la habitación, pero Edna no tuvo cuidado en moderar el volumen de su voz, así que escuche su respuesta - No sé... perdí la cuenta dos o tres meses creo yo- la Reina recupero la postura y retrocedió unos pasos -No estas enferma Edna, estás embarazada, pero esperemos a que el médico lo confirme- la mirada de Edna estaba llena de sorpresa, llevo ambas manos a su abdomen - ¿Estoy embarazada?- la Reina contestó tranquilamente -Eso creo, pero esperemos a que el médico te revise- la Reina dio la media vuelta y avanzó hacía donde estaba yo, giro la cabeza hacía una de las criadas -Traigan tres sillones a la brevedad, esperaremos al médico aquí, también traigan aceites aromáticos para quitar la pestilencia y limpien todo- las criadas respondieron al unísono y dos abandonaron la habitación inmediatamente, solo la que sostenía el recipiente se quedó en la habitación, llevándose consigo el apestoso traste, se dirigió al baño de la habitación a limpiarlo, Edna continuaba maravillada viendo y acariciando su abdomen, nos quedamos en silencio, a los pocos minutos entraron las criadas acompañadas de tres criados que cargaban los sillones individuales, los acomodaron en la habitación y mientras realizaban esta acción, la Reina dio más indicaciones - Vayan a ver al sastre real y pídanle que venga mañana para que tome las medidas de Edna, no den más información, vayan con el sastre de la familia Corday, ofrezcan mis sinceras disculpas y díganle que no podré continuar con él y Madeimoselle Marie, pero en mi lugar estará Madame Jade, también vayan con Madame Jade, debe estar tomando el té en el jardín y digan que yo le pido que por favor acompañe a Madeimoselle Marie con su  prueba de vestido- cuando la Reina terminó de dar ordenes, todos los criados respondieron al unísono, hicieron una reverencia y se retiraron de la sala, esta vez solo se fueron los criados, las dos doncellas regresaron a sus labores dentro de la habitación de Edna, ya traían con ellas los aceites, y poco a poco, mientras limpiaban y aromatizaban la habitación, el desagradable aroma se disipo lentamente, poco después llegó el médico, quien tras saludar a la Reina, se acercó a la enferma, saco de su bolso distintos instrumentos y con ellos fue revisando a Edna, le realizo varias preguntas, y tras unos 30 minutos, guardo todo en la bolsa otra vez, volteó a ver a la Reina y habló - Felicidades Alteza, la princesa esta embarazada- Edna soltó un chillido de la emoción, la Reina agradeció al médico - Por favor vaya con su Majestad el Rey, él le pagara los honorarios por la consulta y gracias por venir- el médico inclino la cabeza - Es un honor Alteza- después ser retiro de la habitación -¡Lo logré! ¡Tengo en mi vientre al futuro heredero de Francia!- Edna no dejaba de acariciar su abdomen, pero al fin todo tenía sentido, su repentino aumento de peso, el repentino apetito que había presentado, todo encajaba, Edna estaba embarazada, me preguntaba como lo tomarían el Rey y Alexander, y su reacción no tardó demasiado en llegar, a la hora de la cena estábamos todos en el comedor, las pruebas de Marie habían terminado, mientras comíamos Edna dio la noticia -¡Estoy embarazada!- la emoción llenaba su voz,  ambos hombres y Marie la vieron sorprendidos, el Rey aplaudió emocionado -Al fin me darás un nieto, nuestro reinado continuara- Alexander por su parte hizo una mueca - Hasta que cumples con tu función y me das un heredero- Marie se quedó callada, en ese momento la familia Real estaba feliz, el bebé que tanto deseaban, había llegado.    

El rosal marchitoWhere stories live. Discover now