El rosal marchito

Capítulo 20

Tras el recibimiento de la Reina, los padres de Marie fueron acomodados en sus lugares, los señores no dejaban de asombrarse con tantas atenciones, todos en la mesa nos sentamos, estábamos acomodados por parejas y según nuestra clase social, la Reina comenzó a hablar - Como les dijeron mis mensajeros, tengo el honor de darles dos importantes noticias, la primera es que su hija Marie se ha comprometido con Lucas Bellerose, ya estamos organizando todo para la celebración- los padres de Marie la vieron con amor -Me alegra que estés prometida a un hombre de noble cuna hija mía- dijo su padre, lucia orgulloso de saber que su hija y yo estábamos comprometidos, su madre me vio - Por favor cuida mucho a mi hija, se que será una excelente esposa, yo misma la crie para que lo fuera- me dijo - Cuidare a su hija como a mi vida, no tiene nada de que preocuparse, amo a su hija con toda mi alma, daría mi vida por ella si fuera necesario, estará a salvo conmigo- dije, mis palabras eran honestas, realmente amaba a Marie y de verdad daría mi vida por ella, mi prometida me vio con ojos llenos de amor, respondí con la misma mirada - Gracias su Alteza por permitir que mi hija siendo de una cuna tan pobre se case con alguien de la alta sociedad, estamos endeudados con usted por el resto de nuestras vidas- dijo su madre viendo en dirección a la Reina pero sin verla, la Reina habló - No tiene que agradecerme nada y no me debe nada, para darles la segunda noticia debemos esperar a unos invitados muy especiales- dijo, nadie habló después de eso, pero los padres de Marie se veían confundidos, Marie me vio preocupada, intente calmarla con una mirada, tomé su mano y la acaricié suavemente,  ahora debíamos esperar a los Condes Corday, la nueva familia de Marie, quienes no tardaron mucho en llegar, la pareja vestía elegantemente, la condesa tría su sombrilla abierta, se cubría del sol, cuando llegaron todos en la mesa, excepto los reyes se levantaron, saludamos a los condes, la condesa al ver a su hija se acercó amorosamente - Hija mía, que hermosa luces hoy- dijo acariciando la mejillla de Marie - Gracias madre, usted luce tan elegante como siempre- La condesa se veía complacida, los condes saludaron a los reyes y después fueron conducidos a sus lugares, la madre de Marie veía al suelo, pero se podía percibir la tensión de su cuerpo, había escuchado la conversación de la condesa y Marie, la Reina habló -Ya que nuestros invitados han llegado, podemos continuar, Condes Corday, ellos son los padres biológicos de Marie- La condesa sonrió cálidamente a la pareja, pero ninguno alzó la mirada, solo se levantaron para hacer una reverencia, la Reina continuo hablando - Para poder efectuar el matrimonio de Marie y Lucas, Marie debe pertenecer a una familia noble y la casa Corday accedió a adoptarla como su hija y presentarla en sociedad como tal, pero antes querían conocer a sus padres biológicos y hablar con ellos- la madre de Marie fue quien habló esta vez - Gracias Condesa por adoptar a nuestra hija y darle la oportunidad de salir de la pobreza- la condesa habló - Deje que sea yo quien le agradezca, Marie es una jovencita de lo mejor, realmente parece mi hija, es para mi un honor poder ser su nueva madre- y de esta forma, los diálogos sobre los padres de Marie terminaron, ella ya era una Corday, una noble, no la hija de sirvientes. La comida procedió sin nada relevante, cuando terminó, un sirviente anunció que el carruaje de los padres de Marie había llegado, la pareja se levantó seguida de su hija, quien tras ofrecer disculpas fue tras sus padres, no me correspondía estar ahí, vi como a la distancia ambas mujeres se abrazaban, Marie limpiaba las lágrimas de su madre, sabían que no se volverían a ver, ya no pertenecían a la misma clase social, además el destino de Marie había dado un giro de 180 grados, también abrazo a su papá, quien le acomodo el cabello detrás de la oreja y después le besó la frente, podía sentir el dolor en el corazón de mi prometida, no era nada fácil dejar atrás a tu familia, lo sabía perfectamente bien, no importa cuanto tiempo pase, siempre dolerá la ausencia de Maddie y del resto de mi familia, unos minutos después de que se marcharan los padres de Marie ella regresó a la mesa, los condes estaban de pie ya, todo parecía que ya se iban, lo que significaba que ahora yo debía despedirme de ella, los criados de los Corday tenían los cofres con las cosas de Marie ya listas, Marie se acerco a mi - Es hora de ir a casa querida- dijo la condesa viéndola -Sí madre- respondió ella, se despidieron de los Reyes y la condesa agradeció por tanto que la Reina había hecho por su hija, después la Reina y yo acompañamos a los Corday a la salida del castillo, me despedí de Marie antes de que subiera al carruaje - Voy a extrañar nuestras caminatas nocturnas- me dijo, la ayude a subir al carruaje - No va a ser igual el castillo sin ti- respondí, la condesa habló - Después tendrás mucho tiempo para estar con tu esposo hija, es hora de irnos- Marie se sentó en el carruaje, se quitó el listón que tenía en el cabello y me lo dio por la ventana, lo tomé y unos segundos después los caballos comenzaron a andar, me despedí con la mano de ella, la Reina coloco su mano en mi hombro - Vamos Lucas, debemos seguir con nuestros deberes en el castillo- me gire a ver a la Reina -Sí Alteza- caminamos de vuelta al castillo y a medio camino llegó un soldado corriendo -¡Alteza! ¡Han vuelto a atacar el castillo! Uno de los soldados esta muerto y otros dos heridos de gravedad- sentí que la sangre se me helaba -¡Llévame de inmediato!- dije -¡Sí capitán!- respondió el soldado antes de correr por donde había llegado, volteé a ver a la Reina -¡Ve Lucas, es tu trabajo! Yo hablaré con su Alteza el Rey- me dijo la Reina haciendo un movimiento con la mano indicando que me fuera, asentí con la cabeza antes de correr tras el soldado...