Traicionada Por Mi Mate - Teresa Lilly

CAPÍTULO 43 - La lucha

EMMA

Me desperté sintiéndome fatal. Me dolía todo el cuerpo y mi cerebro parecía haber pasado por una
batidora.

Me acordaba de todo. Recordaba haberme despertado, estar segura de que estaba muerta, y a Andrew y Logan convenciéndome de que estaba viva.

Ahora les creía porque era imposible que estuviera muerto y sufriera tanto, ¿verdad?

Gemí y abrí los ojos.

— Emma — Oí a alguien decir. — ¿Cómo te sientes? —

Giré la cabeza y vi a la doctora Wren de pie junto a mi cama, comprobando las máquinas que me rodeaban.

— Como si me hubiera atropellado un tren — Murmuré.

—Comprensible — El Doctor Wren dijo. — Voy a darte algo para ayudarte con el dolor —

Asentí y miré alrededor de la habitación. ¿Dónde estaba mi hermano? ¿Dónde estaba Logan? Mi respiración se aceleró y sentí que el miedo me subía por la espalda.

—¿Emma? — me llamó la doctora Wren. —¿Qué pasa, cariño? —

—¿Dónde está mi hermano? — pregunté con voz temblorosa.

— Se fue a casa a ducharse v cambiarse de ropa-dijo, cogiendo mi mano entre las suyas. — Le diré que te has despertado. Estará aquí en unos minutos —

Asentí y traté de calmar mi respiración. No tardaría en llegar. ¿Quizá Logan también vendría? ¿Quizá estaría dispuesto a abrazarme? Me ayudaba con el dolor. Nada me dolía cuando estaba en sus brazos.

De repente, una punzada de culpabilidad me golpeó tan fuerte que casi jadeo. ¿Cómo podía esperar ayuda de él cuando fui yo quien le dijo que me diera algo de tiempo? Probablemente ni siquiera vendría. Estaba siendo increíblemente egoísta. Ya me encargaría yo del dolor.

—¿Te parece bien hablar cuando venga tu hermano,
Emma?— La voz de la doctora Wren me sacó de mis pensamientos.

—¿Sobre qué pasó? — pregunte, muy nerviosa.

El médico asintió. - Me gustaría ponerle al día sobre su estado de salud, contarle lo que ha estado pasando mientras dormía, y me gustaría hacerle algunas preguntas-

— De acuerdo —. Asenti, jugueteando con los dedos.

— ¿Quieres hablar conmigo a solas? — me preguntó la doctora Wren. - Tu hermano no tiene por qué estar aquí. Lo sugerí porque pensé que sería más fácil para ti con el aquí —

Me tomé un momento para pensar en lo que había dicho la doctora Wren. ¿Quería a mi hermano aquí? Sabía que sería más fácil para mí si él estaba conmigo. Me hacía sentir segura. Pero esa palabra que dijo Sienna sequía resonando en el fondo de mi mente.

Carga.

No quería ser una carga. Quizá no queria oir lo que la doctora Wren tenía que decir sobre mi salud. Tal vez ni siquiera quería venir. Probablemente tenía asuntos pendientes. Dios mío, no debí decirle a la doctora Wren que lo llamara.

— Emma... — la doctora Wren pronunció mi nombre
justo cuando se abrió la puerta de la habitación.

Andrew entró corriendo. Sus ojos se abrieron de par en par al ver mi cara de pánico. Corrió hacia mí y me abrazo.

— ¿Qué pasa, Em? — preguntó, asustado. — Estoy aqui, amor. Siento mucho no haber estado aquí cuando te despertaste. Fui a casa a cambiarme de ropa. Pensé que volvería antes de que te despertaras. Lo siento mucho —