Traicionada Por Mi Mate - Teresa Lilly

CAPÍTULO 50 - Herido

EMMA

Sentí que iba a vomitar.

Estaba enfadado. Estaba herido. Estaba aterrorizada.

No sabía cuándo ni cómo, pero me encontré de rodillas en el suelo del cuarto de baño, intentando vaciar el estómago en el retrete.

Me temblaba todo el cuerpo, y no estaba segura de si era por la rabia o por lo asustada que estaba.

Me perseguía. Me quería. Iba a tomarme.

Nadie podía ayudarme. Nadie podía salvarme.

De repente, deseé estar de vuelta en esa cueva con Rolf. Al menos él planeaba matarme. Al menos mi sufrimiento habría sido corto.

El Rey Canalla quería marcarme. Quería hacerme suya. Quería que diera a luz a sus hijos. Quería usarme.

Pero, ¿por qué yo? Yo no tenía nada de especial. Yo no era poderoso. No había nada especial en mí.

Un sollozo de pánico escapó de mis labios.

Oh, Diosa, ¿Qué hago?

No podía dejar que me llevara. Tenía que hacer algo.
Tenía que huir. Tenía que esconderme.

Mi corazón latía tan rápido que pensé que iba a romperme la caja torácica y saltar fuera de mi cuerpo.

No podía dejar de temblar.

Andrew y Logan nunca dejarán que nos haga daño. Gimió Eliza, haciendo que el dolor de mi corazón se multiplicara por diez.

¿Me tomas el pelo?, le gruñí. Logan sólo cambió de opinión cuando se enteró de que yo era poderosa. No me quería antes de eso, Eliza. No quiero su ayuda. No necesito su ayuda

¡El te quería! León me lo contó todo, gritó. Siempre lo hizo, Emma. Por favor, habla con él. Deja que te lo explique.

No hay nada que explicar. Dije con rabia. Nunca volverá a tocarme. Nunca seré suya.

Eliza gimoteó fuerte y la bloqueé. No podía soportar su dolor. El mío era más que suficiente.

Me senté en el frío suelo con la cabeza entre las rodillas.

No sabía qué hacer. No sabía qué pensar. Sólo podía sollozar y sentir el dolor en mi corazón.

Debería haber sabido que algo había pasado. Logan amaba a su manada más que a nada. Nunca cambiaría de opinión sin una buena razón. Supuse que el hecho de que yo fuera una Luna poderosa era una buena razón. Bueno, por supuesto que lo era. Lo ayudaría con su manada.

Yo no era para él más que un medio para un fin.

Sólo quería ser amada por lo que era. Quería ser amada por ser Emma, no por ser la Verdadera Luna.

Y el único que me ha querido sólo porque era Emma ha sido Jake.

Nunca le importó si yo era pequeño o débil. Me entrenó, no para hacerme más fuerte en su beneficio, sino para ayudarme a defenderme mejor. Lo hizo por mí, y no esperaba nada a cambio. Me amó incluso cuando descubrió que no era su pareja.

Sólo deseaba poder amarlo de la misma manera. Deseaba que fuera mi compañero.

Tal vez podría serlo.

Tal vez yo no era la Verdadera Luna. Quizá ni siquiera era blanca pura. Probablemente tenia otros colores en mi pelaje, pero estaban bien escondidos y no los notamos.

Si podía probar que no era un lobo blanco puro, Logan seguramente me rechazaría de nuevo. Sería libre de aceptar a Jake como mi compañero elegido.

Sería libre. Viviría una vida pacífica y feliz con una pareja que me amara.