20. El viaje

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Obi Wan retomó el entrenamiento tras la última misión. La investigación derivada de los descubrimientos que hicieron en el Inframundo seguía su curso mientras él y su padawan regresaban a las rutinas. Y aquellas rutinas, desgraciadamente, incluían la aparente falta de interés del maestro por repetir lo que había ocurrido la noche en que visitaron los Bajos Fondos. No volvió a enviarle a meditar a sus dependencias, lo hacían en las salas destinadas a ello y, aunque su afecto seguía presente, Anakin habría jurado que había suprimido cualquier deseo por tocarle más allá de los besos robados cuando nadie miraba o las sutiles caricias que a veces compartían. De no reconocer los patrones de su maestro, le habría resultado tan frustrante como la primera vez que dejó pasar los meses hasta volver a tocarle.

Cuatro días después de esa intensa noche, Obi Wan se encontraba reunido con el Consejo. Habían interrumpido su entrenamiento al hacerle llamar, parecía un asunto urgente y el maestro pidió a Anakin que esperara en la sala donde practicaban con el sable, sin muchas esperanzas de que el muchacho obedeciera su orden.

Fue una reunión de apenas media hora, pero a Anakin se le hizo eterna hasta que la puerta del Consejo se abrió y apareció Obi Wan con las manos enlazadas bajo las mangas de su túnica. Sereno como siempre. Le miró sin mostrar un ápice de sorpresa al encontrarle en el pasillo donde solía esperarle tras las reuniones.

—Enhorabuena, jovencísimo aprendiz —dijo Obi Wan cuando Anakin fue a su encuentro—. Prepara tus cosas, vamos a salir de viaje.

El maestro le dedicó una media sonrisa, sabiendo lo mucho que esperaba su padawan una ocasión así. Anakin abrió la boca para soltar el torrente de preguntas que se apelotonaban en su garganta, pero volvió a cerrarla cuando los otros jedi salieron de la Cámara del Consejo, saludándolo con un leve movimiento de cabeza.

—Confío en que nuestra partida no esté motivada por nada grave, maestro —respondió solemne, prodigando reverencias a los hombres y mujeres que pasaban a su lado. Cuando ellos mismos avanzaron y estuvieron solos cambió de actitud, dejando ver la emoción que le embargaba—. ¿Cuándo nos vamos? ¿A dónde? ¿Qué hay que hacer? ¿Yo llevaré la nave, verdad? ¿Viene alguien más? ¿Es por el asunto de la venta de armas? No, es por las tensiones. Es por eso, ¿verdad?

—Calma, Anakin —respondió Obi Wan con una suave risa, poniéndole una mano en el hombro y caminando a su lado. Ya tenía que elevar un poco la mirada para hablar con el padawan—. Veamos... Te responderé en orden: vamos a Lah'mu. Es un planeta prácticamente deshabitado en el Borde Exterior. Hay una pequeña comunidad de colonos humanos donde se ha registrado un ataque. No nos enviarían si no fuera porque el atacante portaba un sable láser. Uno rojo, para más señas. —Obi Wan hizo una pausa dramática, llevándose las manos a la espalda mientras se dirigían hacia los dormitorios—. No se ven muchos últimamente, así que conviene investigar el incidente. Localizaremos al portador y le detendremos. Averiguaremos sus intenciones y si tienen que ver o no con las tensiones. Soy escéptico con el azar cuando se trata de sables rojos. Iremos solos. En cuanto a la nave... Tenemos una lanzadera esperando en el hangar. La pilotarás tú, si te comprometes a ser prudente —le miró de reojo, receloso.

—No sufras, maestro. Iré tan despacio como permita el código de circulación. Tan lento como te gusta todo. Nos adelantarán los satélites y la basura espacial. Te quedarás dormido.

—Me conformo con que lleguemos vivos —replicó el maestro—. Y con la nave entera. Pero si tienes esa deferencia, aprovecharé para echarme una siesta.

Anakin no podía ocultar la emoción en su rostro ni en su tono de voz.

—Un sith... Es todavía mejor de lo que esperaba. ¿Qué puede querer de un planeta como ese? En principio los aldeanos no tendrían nada que pueda ser de valor, pero en esos sitios siempre hay antros de mala muerte para viajeros y se cierran tratos importantes. Es uno de esos planetas perfectos para pasar desapercibido. Aunque si quisiera eso, no habría sacado el sable. Va a arrepentirse de eso...

Tentado por la oscuridad [Star Wars] (OCs/Obikin)Where stories live. Discover now