Gracias

321 34 35
                                    

Hoy 16 de septiembre de 2021 me despido de mi novela. (Aunque esto lo leáis tarde)

Aquella que empecé, como siempre digo, para desahogarme, para desaparecer un poco de la realidad, para ser más libre. Pero hubo algo de lo que no me di cuenta, y es que no supe que La habitación de enfrente se quedaría por siempre en mi vida. Nunca creí llegar tan lejos, pensaba que apenas lo leería mi hermana, sin embargo me equivocaba.

Nuevas personas han ido entrando, otras saliendo...Pero igualmente estoy agradecida por ambos lados. He conocido personas maravillosas que no hubiese llegado a descubrir en mi vida sino hubiera sido por la novela. 

He llorado, he reído, he sufrido, me he divertido...Pero ante todo he sentido cada fragmento de la historia como si la estuviese viviendo yo. Y es que por eso mismo, he descubierto que amo escribir.

Obviamente esto es una novela de drama, por lo cuál es normal emocionarse. Pero a parte de eso no quiero que os quedéis con lo malo, por favor. Quiero que hayáis aprendido de cada fragmento, que realmente esa era mi intención una vez empecé la novela. Espero que cada mensaje que he intentado trasmitir os haya llegado porque con eso ya soy más que feliz.

Quiero que luchéis por vuestros sueños.

Que no dejéis que los comentarios de los demás os hagan daño.

Demostrad lo que valéis al mundo.

No vale la pena esconderse del miedo. Hay que ser valientes y vivir cada día como si fuese el último. Y esta frase es muy típica, pero es que lleva toda la razón del mundo. Pues el miedo nos despierta, nos hace superarnos, ser nosotros mismos. Y no está mal vivir con ellos pues es difícil que desaparezcan (pero no imposible), lo que está mal es acostumbrarnos a creer que no podemos hacer algo por culpa de ese temor. Y por culpa de ello, no podamos hacer algo que queremos.

La sociedad de hoy en día nos martiriza diciendo que tenemos que hacer y que no. Como si de alguna manera todo lo que nos dicen que tenemos que hacer es lo único que está bien. Pero no es así. No nos enseñan a vivir en condiciones. Y lo peor de todo es que cuando ya estamos en una camilla esperando nuestra hora es cuando nos damos cuenta...

Por eso mismo, vivid.

Quiero dar principalmente las gracias (por dios esto parece los grammys) a vosotros. Que me habéis hecho crecer. Cada comentario o voto me ha sacado una sonrisa esté donde esté. (Casi me puse a bailar una vez en el mcdonald por un comentario) Y no sois conscientes del subidón que da saber que alguien nuevo le ha gustado mi novela y se la ha guardado.

Después a mi familia. En concreto a mi hermana. Que me ha ayudado a superarme, a confiar más en mi y en mis talentos. Y por supuesto, a mi madre y mi padre por recordarme que puedo luchar por mi misma y porque no paran de repetirme que soy su fuente de inspiración. Siempre me han apoyado en cada decisión que tomo en la vida y son dos pilares importantes para mí desde que tengo uso de razón.

Y por último y no menos importante. A mí. Por haber creído en mi misma, por quererme, por demostrarme lo que puedo valer, por no dejarme avasallar con los malos comentarios...Por demostrarme una vez más que he cumplido un sueño. He escrito mi primera novela yo sola. Me costó muchos derrumbes este año he aprendido más del amor propio y he descubierto que no hay persona que me quiera más que yo, y eso también es AMOR.

Hoy 16 de septiembre de 2021, me despido. De Amelia, David, Esther, Miguel (tonto), Tomás (el pequeño hiperactivo), la tía de Marina, Isabel, Jesús, Agustín, Marina y Damián.

Todos se han ganado mi corazón. Y los recordaré como los primeros personajes de mi gran aventura, que volvería a escribir mil veces más para vivir cada instante. Aún así tengo una espinita en el pecho por esta despedida.

Gracias por todo.

Y como dijo Damián una vez...

Que le jodan a los demás.





Mis redes sociales:

Instagram: soyundrama_

Tiktok: soyundrama.wattpad

Twitter: _soyundrama_

Spotify: soyundrama

Wallapop: No hombre, ¿os imagináis que me abro un wallapop de la novela?

Y SI, YA SÉ QUE SOY UN DRAMA JODER.

La habitación de enfrenteWhere stories live. Discover now