toda mi ilusión.

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Abrazo fuerte a Agoney en la puerta de casa y le doy último beso acariciándole los mofletes. Estamos volviendo a pasar tiempo juntos. Poco a poco vamos retomando la confianza que perdimos y eso me hace muy feliz. 

Cuando entro a la cafetería donde hemos quedado mi hermano Álvaro y yo, él ya me está esperando, se levanta y nos fundimos en un cálido abrazo. Sin saber la razón, rompo a llorar.

-¿Qué pasa, hermanito? -me pregunta preocupado Álvaro cuando me relajo y nos sentamos en una mesa.

Me pongo muy nervioso. Siempre he llevado mi sexualidad en secreto, incluso cuando estábamos Agoney y yo pasando mucho tiempo juntos en casa. Nunca he sido capaz de confesar a mi familia que soy gay, por alguna razón, siempre ha sido algo que no he podido confesarles. 

-Ya sabes que murieron la hermana y el perro de Agoney.

-Sí... ¿qué tal está?

-Bueno, cada día va a mejor. 

Se hace un silencio incómodo.

-Quiero decirte algo importante para mí porque te quiero, soy... -me trabo y me pongo muy nervioso. Quiero decírselo por fin pero no soy capaz. Estoy rojo como un tomate. Y me llevo las manos a la cabeza. 

-Tete... Somos hermanos. No tienes por qué decirme que eres gay para que lo sepa.

Se me para el corazón. Aterrado. Levanto la cabeza tembloroso y me encuentro a mi hermano sonriendo muchísimo. Orgulloso de mí. Alegre por mí. 

-Siempre lo he sabido, incluso desde antes de tu relación con Agoney. ¿Recuerdas que veraneamos juntos en Ibiza? Los ruidos en tu cuarto y tus ojeras por la mañana eran por algo -me guiña un ojo sin parar de sonreír-. Eres mi hermano pequeño y te quiero, Raoul. 

Las lágrimas vuelven a inundar mis ojos. Lloro por el peso que me he quitado de encima. Lloro por lo libre que me siento. Lloro porque tener que salir del armario es una mierda, pero es necesario. Lloro porque a partir de ahora podré ser plenamente feliz y libre, siendo yo mismo.

Quiero muchísimo a mi hermano. Hoy más que nunca, tengo claro que si algún día tengo un hijo, le llamaré como él. Álvaro... Alvarito. 

carpeta vacía.Where stories live. Discover now