carpeta vacía.

siempre reinarás (paz)

Sin darnos cuenta llega el día del concierto benéfico. Muchos aún no tenemos la heridas sanadas pero, a fin de cuentas, ¿acaso alguien las tiene? 

En el camerino antes de salir a cantar todo son nervios y miedo. Este es el evento más importante que ha tenido lugar en el país desde la entrevista donde a Rafa casi se le escapó que Agoney y yo estábamos juntos, o desde el "Cepeda, sobras" de Nerea en los ensallos de nuestro primer concierto.

Es la hora. Tenemos que salir al escenario. No solo a honrar la memoria de nuestros amigos, sino la de cientos de personas más. Por mi cabeza pasan imágenes de Alfred y Amaia, mis amigos incondicionales, y me obligo a mí mismo a no llorar. Les quería tantísimo y eran personas tan buenas que duele. Porque las personas buenas merecen que les pasen cosas buenas.

También recuerdo a Javier Calvo forzándome a salir del armario y a Cepeda soltando comentarios homófobos, lo que me da la suficiente fuerza para no llorar, no echarles tanto de menos y salir con fuerzas al escenario para reivindicar por un futuro mejor.

Salimos. Estamos los trece de la mano. Faltan tres piezas esenciales de nuestro puzzle pero así es la vida. Efímera, complicada, inesperada, rota. En el momento más inesperado algo ocurre y todo tu mundo cambia. Las estrellas se apagan y el mundo parece pararse. Pero en realidad todo sigue su curso, sin pausa, y es una completa y absoluta mierda. Hay demasiado poco tiempo y demasiadas cosas que vivir. 

It doesn't matter if you love him.

Or capital h.i.m.

Comenzamos a cantar y el público estalla en gritos. Ricky, Mimi, Agoney y yo estamos encabezando el grupo. La plataforma en la que estamos se eleva hacia arriba, de forma que podemos observar con claridad la cantidad masiva de personas que se han reunido para luchas contra las injusticias, la discriminación y los asesinatos. Me emociono mientras canto, inevitablemente. El atentado el día del orgullo tuvo una repercusión internacional,se criticó ampliamente la frialdad de lo ocurrido y lo injusto y devastador que fue.

Las lágrimas se nos van escapando a todos a medida que vamos saliendo a cantar individualmente. Este evento no significa únicamente que las personas amen la música, ni que estén a favor de un mundo mejor. No. Todas y cada una de estas personas están aquí para gritar "NO TENEMOS MIEDO" y para mostrar a los asesinos que somos fuertes . Que estamos más unidos que nunca y que la música es el nexo que nos conecta y hace mejores. 

Llega la hora de dar el discurso antes de la canción final. Javier Ambrossi y Marina quisieron hacerlo desde un principio, pero literalmente nadie estaba de acuerdo en que dos liberales dieran un discurso de esta importancia, porque el liberalismo no sirve para nada y menos para cambiar el mundo.

Por esa razón fue Agoney quien acabó soltando el discurso. Y creo que nunca he estado tan orgulloso de él en toda mi vida. Y llevaré sus palabras caladas dentro de mí hasta el fin de mis días.

"Hoy estamos aquí porque las por todas aquellas personas que no tienen voz. Por cada mujer, persona de color y persona lgbt+ asesinada. No solo aquel día. Sino durante toda la historia.

Es triste que hagan falta tragedias para que nos demos de bruces con la realidad: La igualdad que nos venden no es real. Porque siguen discriminándonos, juzgándonos y matándonos. Y el sistema judicial sigue levantando barreras en contra de la justicia que merecemos. Porque todo son baches y problemas cuando se trata de igualdad.

Nos atacan porque tienen miedo. Porque estamos avanzando, estamos cerca de lograr un mundo mejor. Ellos, sin embargo, siguen ligados al pasado y están cómodos dentro de su patriarcal burbuja de privilegios.

Recoradad que no vale de nada que hoy todo sean gritos en unidad en contra de esto. No. El cambio ha de ser cada día. La lucha siempre continua. Y el apoyo entre nosotros tiene que ser total.

Hermanas, yo sí os creo. Personas de color y refugiados, bienvenidos. Y personas lgbt+, sois igual de válidos y normales que cualquiera. Esto es por todos nosotros. Y por el magnífico futuro de paz que merecemos construir entre todos."

Finalmente Agoney recibe la obación que merece, tras acabar cantando Imagine, no solo por la canción. Sino por la maravillosa persona que es. Es un ángel caído del cielo. Y le amo con toda partícula de mi ser.

Terminamos cantando Don't Stop Beliving versión Glee y creedme cuando os digo que no solo lloró Mónica Naranjo, sino que MiriGallego9, Incorrect Amigas, la Spichless, y la Comuna de Adeje entera también. Es decir, lo que biene siendo todo el país.

Este está siendo el mejor día de mi vida. Creo que por primera vez me siento completo.

Me siento infinito a pesar de todo el daño, de todos los papeles que hemos perdido de esta carpeta, que un día estuvo vacía, pero que hoy, más que nunca, brilla por sí sola.

Mi corazón se llena de orgullo, valentía y alegría, puesto que por un momento consigo olvidarme de cuál es la triste verdadera razón de que estemos aquí hoy.

Beso a Agoney mientras el público estalla en aplausos cuando terminamos de cantar. 

Pero, entonces, entre tanta alegría y jolgorio, empiezo a encontrarme mal. Exageradamente mal. Me mareo y empiezo a ver todo borroso.

Llevo toda mi vida esperando este momento.

Aunque nunca creí que todo se fuera a ir al garete el día más emocionante de toda mi vida.

Nunca pensé que me quedaría tan poco tiempo ahora que por fin estaba sintiéndome plenamente feliz. 

Me caigo al suelo.

La oscuridad me envuelve y pierdo el conocimiento.