Lo hice por él [Venganza #2]

6° La fiesta

Dave me espera apoyado en el coche como esta mañana, es de noche y está empezando a refrescar.

—Hola. —Saluda en un tono neutro.

Le doy una sonrisa y me abre la puerta dejándome ver a Mikel sentado y fumando. Frunzo mis labios y de mala gana entro en el coche.

—¿Día duro? —Lo dice como si se riera de mí.

No le contesto, no pienso hablar con él.

—¿Le has dicho a Chloe donde debe ir? —Asiento, aunque en verdad no se lo he dicho, tengo que enviarle un mensaje. —Bien.

El resto del camino lo hacemos en silencio hasta llegar a casa.

—Mándale la dirección. —Dice en un suspiro mientras salimos del coche.

Le miro confusa, ¿cómo sabía que...?

—Cámaras. —Responde a mi pensamiento.

—¿Cámaras?

—Sí, Nina. Te tenemos vigilada las veinticuatro horas.

No sé porqué no me sorprende, ese psicópata se lo monta bien.

—Hazlo. —Ordena retomando la conversación inicial.

Desbloqueo mi móvil y le mando la dirección.

No tarda en responder.

—Quiere que vaya a buscarla. —Le informo después de leer el mensaje.

Sé que no le hace gracia, pero también sé que no le importa porque como él dice, me tendrá vigilada. 

—Está bien. —Me tira las llaves del coche y las cojo al vuelo. —Ve ya.

—Pero he quedado con ella a las—

—A las doce. —Me interrumpe. —Da igual, ve ya.

Me adentro en el coche bajo la atenta mirada de Mikel.

Y entonces lo recuerdo. No he invitado a nadie. Cojo mi móvil y empiezo a llamar a gente al azar.

Unos golpes en el cristal me hacen desviar mi atención. Mikel me mira con cara de pocos amigos. Le ignoro y llamo a Dylan, le dije a Chloe que él iba a estar. Me cuesta mucho convencerle, pero finalmente se acaba animando.

Un último contacto. Fred. Dudo si llamarle o no.

—¿Si? —Contesta.

—Hola Fred. Soy, soy Nina. —Vacilo.

—Si, lo sé. —Me siento tonta, pues claro que lo sabe, me tiene agregada.

—Quería decirte... Quería saber si quieres venir a una fiesta. —Me muerdo la uña del pulgar. Que diga que sí... —Va a estar Dylan. —Añado por si le anima. Pero sé que él no es quien le animará. —Y Chloe... —Escucho un suspiro de emoción y mi corazón se estruja.

—C-Claro, me apunto. ¿Dónde es?

Le digo la dirección y cuelgo.

Sin mucho ánimo comienzo a manejar hasta la dirección que Chloe me mandó. Subo hasta su pisoy toco el timbre, tarda bastante en abrir.

—Chloe. Sé que estas ahí. Te puedo oír. —Escucho más de una voz. —¿Chloe? ¿Quién está contigo? ¡Abre la puerta Chloe! —Entro en pánico, ¿no habrá sido capaz de venir hasta aquí? Imposible, le dejé atrás, en su casa, es imposible que Mikel esté aquí.

Sin esperar más, abre la puerta.

—Hasta que por fin... —Chloe no está sola, está con Devon. —¿Qué hace él...? —Me callo al verla en toalla.