Capítulo 16 Angels (Vicetone)

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Spectacular Lincoln Loud

Capítulo 16 Angels (Vicetone)

"Oh God I'm going insane. Chasing after you. Please don't leave me."

Roberto Alejandro Martínez Milán Luis Santiago. Aquel nombre resonaba una y otra vez como ecos de una memoria distante mientras intentaba procesar ese intenso sentimiento doloroso en su pecho. Escuchaba todos los gritos a su alrededor y aun así era incapaz de hacer nada, se sentía agotada. Como si hubiera usado todas sus energías para renacer.

Cerró los ojos esperando así calmar el dolor proveniente de su espalda, pero solo provocó que su conciencia se desvaneciera por quien sabe cuánto tiempo. Oscuridad total y mucho dolor era todo lo que esa nueva alma en pena sentía. Explorar los recuerdos de un pasado dividido por un translucido muro de cristal verde era lo único que podía hacer.

Cada nuevo recuerdo le permitía recordar con más detalle, pero al mismo tiempo incrementaba el dolor en su pecho.

—Ritmo cardíaco acelerado...—creyó escuchar antes de sentir cosquillas en su brazo derecho.

—D-d-d-octor, la-la aguja se-se-se r-rompió co-conntra su piel.—tartamudeó una enfermera joven.

Fue entonces que sintió una mano fuerte apretando su piel y creando la suficiente tensión como para que pudiera ser atravesada. No estaba del todo segura si la sensación era buena o mala, solo sabía que no podía moverse. Fue entonces que la inyección tuvo efecto y todo volvió a ser negro.

Bobby.

Sí, un nombre mucho más fácil de recordar y que despertaba pasiones en su interior, sentimientos conflictivos al menos, odio y amor, respeto e indignación, eran solo algunas de las amalgamas que sentía al recordar ese nombre, deseaba olvidarlo y al mismo tiempo quería preservarlo para siempre.

No era tonta, sabía que ya nunca volvería a verlo y aun así no podía evitar esos pinchazos en su cabeza mientras las máquinas industriales resonaban en sus oídos ahora más sensibles.

—La tomografía no revela nada preocupante señorita Santiago.—creía conocer esa voz como alguien amable.

—¡Es mi hija, dime la verdad McBride!—gritaba la mujer desesperada.

Todo volvió a oscurecer y esta vez decidió que a la próxima abriría los ojos. Cosa que hizo cuando finalmente llegó una nueva oportunidad. Su primera impresión fue como una ráfaga de memorias de su vida pasada llegaban en torrente a su cabeza y la iluminaban con mucho conocimiento, cerró los ojos y levantó su mano, o al menos lo intentó ya que no pudo moverla. Y esta vez no por falta de energías o voluntad, sino porque tenía sus manos atadas con cuero a los lados de la cama de hospital.

—¿Qué?—preguntó ella confundida.

Pudo girar su cabeza, solo para encontrarse en una habitación vacía de hospital, ya no era de día, sino de noche con la televisión encendida y ella atada de manos y pies en completa soledad. Al ver hacia abajo solo pudo encontrarse con sus pies y un extraño tubo que salía de su espalda y llegaba a un contenedor.

—¿Cuánto tiempo ha pasado?—preguntó sin respuesta alguna, solo la más absoluta oscuridad.

Ronnie había despertado de ese sueño, pero una vez de vuelta al mundo real, sabía perfectamente que se encontraría mejor de vuelta a la inconciencia.

Spectacular Lincoln LoudWhere stories live. Discover now