«Dos streamers, una fiesta y un beso que no debió existir». El caos juvenil hecho píxeles.
Seren es la calma y Asher el descontrol.
Ella parece jugar la vida en modo supervivencia cuando él solo tiene una suerte envidiable.
Ambos tienen una rivali...
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Asher y su directo extensible que duró seis días completos.
El primer día, luego de jugar con su nuevo grupo de amigos, jugó un juego de terror por la noche y probó un par de juegos más que le recomendaron sus seguidores.
Al día siguiente, los demás subieron videos de la primera vez que jugaron juntos, algunos avisaron que Asher estaba en directo en ese momento, por lo tanto, mucha más gente se unió.
También pidieron que jugaran más. Asher les dijo que tenía ciertas cosas que contarles, pero que no podía decir nada hasta que lo anunciara de forma oficial. Aquello logró que su comunidad creara distintas teorías que no tenían nada que ver con la realidad.
Ese mismo día, decidió pintar un cuadro, se puso una boina negra y se dibujó un bigote. Se hizo llamar Asher Ross.
—¿Les está gustando mi obra de arte, chat? —cuestionó de espaldas, concentrado en dibujar un dinosaurio que estaba tomando el sol. (En realidad era un meteorito).
Todos comentaban que sí hasta que una donación sonó.
—Dibujas horrendo. —Asher sonrió y giró a ver quién le había escrito eso. Se echó a reír al ver el nombre.
—Gracias por esos bits, Seren.
Segundos después, la alerta de las cien suscripciones regaladas sonó. Era Asher gritando «¡¡Ya no puedo más!!» cuando estaba jugando un juego de terror.
—Y estas subs para que tomes clases de arte, las necesitas —volvió a sonar el lector de texto.
—Gracias de nuevo, amiga, usaré ese dinero en alucinógenos, o algo así. Cosas productivas, ya sabes. —Guiñó el ojo a la cámara y luego aclaró la garganta para volver a ser la terrible imitación de Bob Ross que estaba haciendo. Según él, era el conocido pintor, pero francés. Así que hablaba con un mal acento francés mientras comentaba lo «artístico» que era.
Al terminar aquel engendro, colgó el cuadro sobre su pared, orgulloso de su creación.
Poco después de ello, se quitó el bigote y la boina y dejó pasar a Vader, porque se le ocurrió recrear fotos que encontró en Pinterest.
La primera era la sombra de ellos dos alzando un dedo medio. Simple. Tranquilo. Fácil.
La segunda foto eran dos tipos poniendo los pies en puntillas con las rodillas algo flexionadas y uniendo sus manos en forma de pistola.
La tercera, eran ellos vestidos con un conjunto negro con rayas blancas a los lados. Vader en cuclillas y Asher sobre él, con los pies sobre sus piernas, ambos uniendo las manos como si fuesen a rezar.
Para ese momento, Asher ya tenía configurada la cámara secundaria, porque sabía que la iba a necesitar. Entonces fueron al pasillo que daba hacia las habitaciones y los baños, ahí empezaron con la cuarta foto.
