IX. De regreso a mi oficina

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Entro a mi oficina como un huracán. Ahí están sentados Morgan Fix, Ana Jonas a un lado, Murphy Warren y Dante Kozlov a otro. Saul va detrás de mí.

"Pues bien", digo sentándome detrás de mi escritorio. El lugar que le corresponde al gerente general del Grupo De la Cruz. "Necesito avances. ¿Tenemos noticias?"

"No exactamente. No tenemos noticias. Pero tenemos una nueva deducción", me dice insegura Murphy. Su pelo corto está perfectamente peinado. Ella le presta atención a esos pequeños detalles.

"¿Deducción?", pregunta Dante. "Vamos. Acaba de morir gente. Acaban de matar a una de nuestras empleadoras. Necesitamos más que una mera deducción"

"Sí, lo sé, lo sé", responde ella. "Pero por el momento es lo mejor que tenemos"

"¿Y qué hacen estos dos aun aquí?", pregunto señalando a Morgan y a Ana. "¿No deberían estar allá afuera, buscando pistas? ¿Fuera de la calle Abastos?"

"Sí, supongo", dice Murphy. "Morgan, explícales qué han estado haciendo aquí mientras tus compañeros estaban siendo eliminados por un francotirador en la calle"

Morgan Fix mira a Ana por medio segundo. Después a Murphy. Después separa. Su alta estatura hace que la inseguridad que siente brille en el cuarto.

"Hemos visto las fotos de las víctimas del francotirador", empieza.

"Momento", le interrumpe Saul, que está aun parado junto a la puerta de mi oficina. Sostiene su rifle como si en cualquier momento una amenaza fuese a entrar por la ventana. "¿Cómo puedes haber visto esas fotos? ¡Acaba de suceder!"

Morgan mete su mano a un bolsillo de su casaca. Saca su celular y se lo muestra a Saul. En la pantalla se pueden ver las fotos.

"Me las acaba de mandar uno de los agentes de seguridad que está evaluando la escena del crimen", responde Morgan. "¿Quién es este tipo? Nunca antes lo había visto"

La última pregunta está dirigida a mí. Yo busco con la mirada a Murphy, quien me está mirando. De inmediato ella se voltea hacia Saul.

"Disculpe, agente", dice ella. "¿Cuál dijo que era su nombre?"

Noto tensión en el aire. Murphy y Morgan también. Para cuando todos reaccionamos, Ana ya lo está apuntando con una pistola que ha desenfundado.

"¿Quién eres?", pregunto. No necesito voltearme a confirmarlo, pero sé que Murphy y Morgan también están desenfundando y apuntándolo.

Saul suelta su rifle y sonríe.

"Oh,vamos, Erwin", me dice mientras se saca el casco y lo deja caer junto a él. "¿Tan poco me conoces? Yo te he visto crecer. Desde que eras un niño"

Todos guardamos silencio. Recién entonces reconozco lo inteligente que fue disfrazarse de agente de seguridad con todo ese equipo encima. No lo había reconocido en lo más mínimo. Mientras se saca el chaleco a prueba de balas, comienzo a hacerme una idea. Morgan se me adelanta.

"Señor",me dice a mí en voz baja. "Es Francisco De la Cruz"

"Pero...", trato de esforzar mi vista. Trato de verlo mejor. Este supuesto agente de seguridad es un vampiro. "Pero, ¿cómo?"

Saul está riendo ahora. Se está quitando de encima todo. El cinturón, las botas, los guantes. Todos lo vemos con extremo cuidado. Con mucha atención.

Por supuesto que hay precedentes. Tenemos historias de vampiros que se hacen pasar por humanos como parte de algún plan. Es tan solo que nosotros estamos entrenados. Nosotros sabemos la diferencia entre un vampiro y un humano. Para engañarnos a nosotros hace falta tener mucho dominio, mucho control.

Los vampiros de la calle AbastosWhere stories live. Discover now