Aprendiendo a vivir

Capitulo 45

Elle -

Llego a casa de mi hermano después de salir huyendo del hospital, una vez entro veo a jeremias despeinado con el traje arrugado y con los ojos ojerosos. Mi vista recorre el lugar y va hacia el sofá donde está masón acostado en un profundo sueño y con el mismo aspecto que jeremias.

Los veo de reojo y subo a mi habitación, siento como el aire me falta, aprieto mis brazos. Veo una lámpara en mi mesita de noche, la levanto y la estrelló a la pared. Un grito abandona mi garganta, mi cuerpo se siente tan pesado. Solo quiero salir de el, caigo de rodillas.

Tiene una hija, una hija. Algo que yo nunca le podría dar yo.

Las horas se basan en eso; llorar y dormir. Siento el sonido de una puerta abrirse, volteo y veo a Mesón cruzado de brazos.

- Me acabo de enterar - me dice y camina hasta sentarse en la cama junto a mi, el sube sus piernas y queda recostado en la cabecera de madera de mi cama - No se que decir... esto es otro tipo de cosas, hay una persona de por medio y no es cualquier persona.. ustedes deberían hacerse una limpia he escuchado de ellas y...

- La decisión está más que tomada - le digo - Es ella o yo y obviamente la eligira a ella. Y yo nunca lo pondría en la posición de elegir pero..-me quedo callada y me levanto quedando de la misma forma de masón, ambos vemos hacia el frente de la habitación pensando, ambos nos quedamos en silencio hasta que el decide hablar

- Tendré una nieta - dice con una sonrisa - Aún que es de una loca pero al fin y al cabo...

Río

- Pues yo no estoy muy cuerda que digamos

- Nadie es lo suficientemente cuerdo en este mundo- dice y asiento, detallo un marco de mi pared, es una pintura que hice en mis días en el psiquiátrico.

-Cuéntame cuáles son tus miedos querida..

- No ser lo que ella necesita, a no estar lo suficientemente preparada para eso, no me siento preparada y... me acababa de pedir que fuera su novia y pasa esto.. - mis lágrimas salen y las limpio rápidamente.

La puerta se abre dándole paso a kilian que me ve con miedo y pesar, él ve a su padre y él entiende que debe irse, antes de levantarse aprieta mi mano y asiento con la cabeza. Mason se va y me deja a solas con kilian.

-Estas equivocada si piensas que renunciar a ti. Iré a estados unidos pero regresare, regresar por ti - él se acerca decidido - No te perdere, no de nuevo. Porqué aún estando a miles de kilómetros mi corazón seguirá latiendo por ti y solo por ti.

Mis lágrimas caen pesadas, quiero decirle que el mio igual pero esto va más allá de lo que pueda o no hacer.

- Solo vete - le digo y veo como su cara se transforma a decepción.

Vuelve al umbral de la puerta dispuesto a irse pero antes de cruzar él umbral voltea a verme.

- Te amo más que nada en el mundo -es lo último que dice antes de salir definitivamente de mi habitación.

Me recuesto dejando mi rostro sobre un brazo viendo hacia donde se fue. Mis lágrimas salen sin yo poder hacer algo para detenerlas, dejo que todo mi cuerpo se desahogue, no es malo, pero tampoco es bueno.

[.]

A la mañana siguiente cuando me despierto sigo en la misma posición, no se en que momento me quede dormida. Me incorporo y la puerta se vuelve abrir de nuevo, Maggie entra con una bandeja con comida, ella me da una sonrisa tierna.

- Buenos días - me dice y se sienta a mi lado dándome la bandeja que le resivo.

- Gracias - tomo un trozo de tocino - ¿Se a ido? - le pregunto y asiente - ¿Y andrew? - vuelve a asentir, me siento horrible por no haberlo despedido de una buena manera.