Una vida con el autor

Capítulo 45: Marin es una Waifu.

{Entonces que comience la operación.}

"¿Conoces a alguien que pueda hacer ropa?" Marin preguntó mientras se acercaba a mí y echaba un vistazo a mi teléfono.

"Ah, eh". Asentí y me desplacé hacia abajo un poco más antes de encontrar el contacto que estaba buscando.

"Tenían una tienda de ropa y en ese momento estaban en quiebra. El dueño era un buen conocido de mi madre ya que era la tienda donde ella encargaba mi ropa. La hacían muy barata". Le conté la historia.

También estaba escribiendo un mensaje en mi teléfono mientras contaba la historia, preguntándole al dueño si podían hacer un cosplay y también adjuntando la foto del que Marin quiere.

"En pocas palabras, decidimos ayudar a la tienda invirtiendo en ella. Aunque no es muy rentable, les ayuda a cerrar la tienda y también nos hicieron ropa gratis". Dije que era principalmente el dinero que ganaba en las competiciones el que solíamos invertir.

Fue una de mis primeras inversiones en este mundo.

"Ya veo, eres muy amable de tu parte y de tu madre". Marin dijo y yo me encogí de hombros.

Ella se alejó de mí y se sentó en mi cama mientras se miraba los pies. Esperé un rato e inmediatamente recibí una respuesta del propietario.

Me sorprendió bastante ya que esperaba que estuvieran ocupados. Por eso no los llamé.

El propietario respondió que estarían más que felices de hacernos el cosplay. Aunque el propietario nos preguntó si podríamos ir a la tienda para tomar las medidas.

O

Dijo que también estaría bien si le enviara la medida requerida.

{¡¡Me gusta el segundo!! ¡¡Voto por el segundo!!} dijo el autor con entusiasmo.

'A mí también me gusta.' Dije mientras pensaba en medir a Marin como lo hizo Gojo en el original.

"¿Por qué sonríes así?" Marin preguntó y la miré. Ella estaba poniendo una cara extrañada mientras me miraba.

"Dijeron que podrían lograrlo". Dije y su rostro se iluminó de emoción y sus ojos rosados brillaron.

Mi sonrisa se hizo más amplia, "Pero..." dije.

La emoción de Marin disminuyó cuando vio mi sonrisa, "¿Pero?" preguntó, casi asustada.

"Tendríamos que tomar su medida y enviársela". Revelé. Abrió la boca en forma de 'O'.

"¿Eso es todo?" ella dijo. Tal vez estaba pensando que tendría que pagar o algo así.

"Eso es todo." Afirmé asintiendo.

Saltó de la cama y se acercó a mí: "Entonces tomémoslo de inmediato". dijo como una niña que no puede esperar para abrir su regalo de Navidad.

"UM, seguro." Le dije: "¿Te importaría quitarte tu-"

Ni siquiera terminé la frase y ella ya se estaba quitando la camisa negra. Esta vez no aparté la mirada sino que observé atentamente su atrevida acción.

"Ta-da." Dijo y su pecho, que solo estaba cubierto por su sostén, anunció su presencia al mundo con un rebote lascivo.

"Je je ~ Llevaba un bikini debajo". dijo descaradamente, como si eso hiciera alguna diferencia además de hacer que su pecho pareciera más atractivo.

Sus dos tetas tenían el tamaño perfecto para agarrar y acariciar. Me los imaginé encajando perfectamente en mi mano.

Su ropa interior era exactamente como en el anime: un sujetador de encaje negro con flores amarillas impresas y unas provocativas bragas negras.