CAPÍTULO 19

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Lucienne

La semana había transcurrido como un pestañeo, y ya estábamos en jueves, me resultaba casi imposible creer que tan solo hace una semana estaba en el pueblo de Andrew disfrutando de las pequeñas cosas que veía. Ahora solo faltaba un día para que el volviera a la cuidad y de algún modo eso me ponía de buen humor.

Eso hasta que mi mente se vio abrumada por los recuerdos de los regalos de perdón de Drew.

Chocolates, algunas flores marchitas, joyas de fantasía, e incluso ese maldito anillo de bodas de vuelta en mi escritorio con una nota que suplicaba: "cásate conmigo de nuevo" .Sentí un nudo en el estómago, pero de desagrado al contemplar ese anillo tan horrible. No quería verlo nunca más, así que sin pensarlo dos veces lo arrojé a la basura junto con el resto de regalos que había acumulado durante la semana. 

Mientras observaba con desdén ese montón de obsequios insignificantes, el sonido de mi teléfono rompió el silencio en la oficina. Mire la pantalla y me sorprendí al ver el nombre que aparecía, era Cassia, parpadee para estar segura. ¿Por qué me estaba llamado Cassia? O más bien ¿de dónde me estaba llamando?

La última vez que nos vimos dijo que iba a un retiro espiritual con el único fin de encontrar inspiración para su colección; no permitían teléfonos. 

— ¿Cassia? — Respondí con algo de duda.

— ¡Lucy! — Exclamó a través de la línea —. Dios mío, lo siento lo siento, no debería decir eso en un lugar sagrado. Pero vamos, ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes? Voy a matar a ese maldito cuando llegue —. hablaba tan rápido que dudaba que le diera tiempo a respirar —. Traté de llamarte a tu apartamento pero no respondías y le llamé a Karl y me dijo que estabas viviendo en casa de tus padres de nuevo.

— Cielos, Cass, respira ¿sí? — hablé con preocupación por ella —. Antes de responderte ¿Cómo diablos estas llamándome si es prohibido?

— Shhh, Lucy, no digas esa palabra, al menos por ahora —. Susurraba — Te estoy llamando de forma clandestina en realidad, pero es una larga historia con un hombre guapo pero con mal humor.

Uhm, eso era nuevo.

— Mejor dime tú —. Volvió a hablar —. Me enteré de lo que pasó por Karl ¿Cómo estas con eso?

Suspiré, en un poco cansada por contar la historia. 

— Pues estoy bien realmente, quiero decir, al principio dolió pero supongo que he estado superándolo. En realidad creo que ya pasé la etapa de la negación, ira y esas cosas, ahora lo acepté y abrí mi mente a la realidad.

— Lucy, lamento no haber estado contigo en ese momento —. Se escuchaba su voz triste a través del teléfono —. Ahora me arrepiento de estar aquí, debí haber estado allí para clavar mi puño en la horrible cara de...

— Pero no todo fue tan malo —. Dije antes de que siguiera.

— ¿Cómo? — Se sorprendió.

— Sí, no todo fue tan malo. En realidad dentro de la tragedia —. Dije con burla —. Conocí mejor a un amigo de Drew, no te sorprendas, el padrino de boda.

Cassia, que estaba no sé dónde realmente, soltó un chillido tan agudo que pudo escucharse hasta en el lugar más recóndito del mundo. Tuve que alejarme del teléfono un segundo.

— ¡¿Estamos hablando de Andrew Westcote?! ¿El que vimos en la fotografía que te envió Drew para que lo inscribieras en las charlas de padrinos?

Sonreí involuntariamente al escuchar su nombre, era como un ventisco fresco a mi corazón.

— Ese mismo, en realidad las circunstancias lo llevaron a que ayudara, eso lo hablaremos cuando regreses, pero me tendió su ayuda y lo conocí mejor. Ahora somos amigos y socios. 

Hasta que el padrino ¿me rescate?Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang