Capítulo 25

3.5K 363 7
                                    

Una semana, una hermosa y relajante semana en la villa, y fue lo más asombroso del mundo. Ver a mi novia ser ella misma ha sido una absoluta bendición en mi vida. La amo, necesito que lo sepa. Recuerdo esa conversación ahora. 

Nuestro grupo de amigos estaba en casa de Freen, teniendo una noche de películas y divirtiéndose. Las chicas estaban organizando los snacks, así que, cada vez que tardaban más tiempo del necesario, mis amigos me decían que fuera a buscarlas. Y lo hacía. Y aprendí una o dos cosas de mi novia. 

— Tee, en serio, no es la gran cosa. Puedo esperar, no es nada — escuché a mi novia decir. 

— Princesa, sabemos que la amas, pero ser sexualmente activa significa tener algo de acción —Tee dijo. 

— Hacemos algunas cosas, te dije lo que hizo la otra noche. Nunca había pasado, es como... Una genio — mi novia defendiendo mi honor. 

— Una genio virgen — Nam comentó. Las tres rieron. 

— Aunque es perfecta, no necesito más — Freen les aseguró. 

— Pero quieres — Tee volvió a hablar. 

— Como loca, la quiero todo el tiempo. Cada sesión de arrumacos que tenemos es lo mejor y peor que me pasa, puedo sentirla, me desea tanto como yo a ella. Me despierto excitada todos los días, pero no quiero que piense que es lo único que quiero, no importa lo frustrada que termine — volvieron a reír. No quería hacerla sentir incómoda, también la deseo, pero no estaba lista. 

— Bueno, me alegra que mi amiga sea una dama y quiera que su novia se sienta cómoda y amada, kudos para ti, pero agarra unos hielos, porque tu papaya estará en llamas por mucho tiempo — Nam dijo, y me escondí antes de que salieran. 

— Sería perfecto si pudiéramos hacerlo en mi cumpleaños, como algo simbólico. Cumplir dieciocho, estar enamorada y buscando una mejor vida. Como... Renacer o algo. Mi última primera vez, algo así de poético — todas se rieron. 

— Estás hasta el cuello, Sarocha — en ese momento entré. 

— Comenzamos a pensar que estaban teniendo su propia fiesta aquí — se rieron, yo abracé a Freen y todas volvimos al salón. Tengo un plan. 

Para mí, era un buen plan, pero todo se fue por la ventana esta semana, así que, esto debe ser suficiente. Aquí, las dos solas, ahora tengo otro plan. Uno mejor... Más o menos. 

¿Freen? Sé que tu cumpleaños es en tres meses, pero quisiera darte tu regalo ahora — estoy muy nerviosa, pero si algo he aprendido, es que no hay como el ahora. No puedo esperar a volvernos una sola, ahora que la anciana me dijo que las almas gemelas existen. 

¡Bebé! No tienes que darme nada, ya lo hablamos, solo te necesito a ti — sonreí, no tiene ni idea. 

Quiero darte eso — está mirando el atardecer, parece que este viaje es solo sobre Freen y atardeceres. 

¿Qué? — se sentó derecha. Parece confundida, las palabras no son lo mío. 

Eso. Quiero darte eso... A mí... Para ti — me quité la bata, de pie, desnuda frente a ella. 

¿Becky? — su voz es aguda, como si estuviera nerviosa. — Yo... Yo... Tú... Yo... — está mirando a todos lados, menos a mí. Quizás la malinterpreté. Tomé una bocanada de aire, volviendo a cubrir mi cuerpo. Qué vergüenza. — No... Espera... Yo... — se puso de pie, sacándose el bikini. Está desnuda, es una diosa. — Te amo, lo sabes. Estoy más que feliz con cómo se han dado las cosas entre nosotras, quiero que estés segura, porque una vez que tú... Una vez que tú... Que nosotras lo hagamos. Y, Dios, créeme que he muerto de ganas por hacerlo. No habrá vuelta atrás. Las cosas serán diferentes, un diferente bueno, espero — asentí. Estoy más que lista, quiero hacerlo, es la persona que más amo en el mundo, la chica que ha luchado por mí y bajado el ritmo por mí, que me ha enseñado a estar cómoda en mi propia piel y conmigo. Si alguien lo merece, esa es Freen. 

Quiero esto contigo — la besé con todo el amor que tengo por ella. Es lento, sin prisas. Quiero amarla, hacerla sentir a salvo y bien. Ya sé lo que follar se siente, una vez la hice desmayarse por un orgasmo, pero ahora quiero hacerla sentir amada. Lo haré tan lento como pueda, cuidaré de ella. La guie en la camilla de la playa, rompiendo el beso para sentarme. Ella se sentó en mi regazo, besándome. Estoy dura, tanto que cualquier movimiento haría que me corra. Freen comenzó a mover sus caderas, y el vaivén lento de sus caderas hace que su centro húmedo roce contra mi erección. No voy a lograrlo, y quiero que dure. 

No hagas eso, por favor — la tomé de las caderas, mirándola a los ojos. 

¿No quieres? ¿Cambiaste de opinión? — sus ojos lucen preocupados, es tan hermosa cuando cuida de mí.

No, no, bebé... Lo quiero, de verdad. Solo estoy nerviosa, quiero que te sientas bien y que dure para siempre, pero eres tan hermosa que tengo miedo de correrme en un segundo. Eso es vergonzoso y nada sexy — me besó, riendo contra mis labios. 

Eres tan honesta. Hagamos esto, disfruta del atardecer, yo hago el trabajo — levantó sus caderas, y puedo sentir el húmedo y cálido paraíso entre sus piernas. 

Eso no es justo para ti, quiero hacerlo solo... ¡Dios! Te amo — intentó mantener mi respiración tranquila, para hacer cualquier cosa menos correrme. 

Becky, no tienes que estar ansiosa, somos nosotras, tú y yo. Te he visto hacer pipí, vomitar, desmayarte, y usar una camiseta de Winnie Pooh, esto no cambiará lo que siento por ti. Si no quieres hacerlo, no lo hacemos, pero si quieres... Déjame ayudarte, estoy aquí para ti — y por eso la amo más que nada. 

Okay — tomé una bocanada profunda, poniendo mis manos en sus caderas una vez más. 

Sostenme, Becky. Abrázame. Bésame. Ámame — está nerviosa, lo veo en sus ojos, están cristalinos y está temblando, ¿Pero por qué? Ella es la que tiene experiencia. Yo... Bueno... Yo soy la que tiene miedo de su propia sombra. 

Te amo, Freen, con todo mi corazón. Para siempre, lo juro — movió sus caderas lentamente otra vez, puedo sentir cómo mi miembro se humedece, no solo por sus jugos. La abracé, quiero sentirla cerca. Quiero estar tan cerca que se vuelva abrumador. Ahora entiendo a Jeff, ¿Cómo puedo mostrarle todo el amor que le tengo? ¿Cómo puedo dejarlo claro? La necesito tanto. 

Te amo, Becky — me tomó con una mano, acariciando un poco. Estoy más dura que antes. Estos sentimientos son demasiado y muy poco a la vez. — ¿Puedo hacerlo? — asentí. Ella me besó una vez más y puedo sentir cómo me está guiando a su sexo. Se siente tan cálido, tan... Abrumador. 

Sí, sí, puedes — dije desesperada. Me besó una vez más. Se sentó de nuevo en mis muslos, mirándome. — ¿También estás nerviosa? — asintió. Besé su mejilla, poniendo un mechón de cabello detrás de su oreja. Es encantadora. — ¿Por qué? — me miró, sonriendo. Su mirada es tan intensa, que mi cuerpo entero tiembla. 

Es la primera vez que haré el amor con alguien que significa el mundo entero para mí, que tiene mi corazón en sus manos. Estoy nerviosa, ¿Y si no soy lo suficientemente buena? ¿Y si luego de esto decides que ya no valgo tu tiempo? ¿Y si...? — la silencié con un beso. Ahora entiendo lo estúpida que he sido, tiene los mismos miedos que yo. Necesito hacerle saber cómo me siento. 

Te amo, Freen Sarocha. Y por primera vez me siento afortunada de ser yo, porque créeme cuando te digo que, no importa lo que pase ahora, te amaré por siempre. Eres más que un cuerpo, eres inteligente, talentosa, hermosa y tan, pero tan cariñosa y comprensiva, que algunas veces siento que estoy soñando y no eres real. Pero aquí estamos, tú y yo, Freen, eres mi alma gemela. Ahora y siempre — siento las lágrimas cayendo por mis mejillas, y cuando levanto la mirada Freen está en la misma condición que yo. No son lágrimas de tristeza, son de felicidad. No puedo controlarlas y, por primera vez, no quiero hacerlo.

𝐏𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭𝐚 [+𝟏𝟖]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora