𝐏𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭𝐚 [+𝟏𝟖]

Capítulo 27

Es nuestra última noche en Honolulu. Esta semana ha sido la más placentera de mi vida, no solo por el sexo, en el cual intento convertirme en experta, pero sigo sin lograrlo. Aunque estamos practicando... Mucho. Esta semana me ha enseñado algo, que todo puede cambiar, para bien o para mal. Sé que no es nada fuera de lo normal, la gente cambia todo el tiempo, solo que soy más lenta en eso. Creía que el hada madrina era real hasta que una noche Friend me dijo que no lo era, la sorpresa en mis ojos la hicieron sentir horrible. Lloré dos días seguidos. El cambio es difícil para mí, esa es la razón por la que soy buena en deportes, matemáticas y física. Siempre haces lo mismo ahí, enfocado, planeado y certero, ¡Pero hombre! Freen Sarocha había llegado a sacudir mi mundo como no me imaginaba. Fue un buen cambio, será un futuro asombroso, estoy segura. Hablando de cambios, no sabía que el sexo también podía cambiar. Sexo dulce, lento, cariñoso, hacer el amor o el divertido.

— Freen, joder, eres tan hermosa — está debajo de mí, sus mejillas sonrojadas y sudando. Quería experimentar una nueva posición. Freen sobre mí es asombroso, le gusta, a mí me encanta. Sus pechos quedan sobre mi rostro, pero nunca la veo mientras se corre. Esta vez, quiero verla. 

— ¿Estás segura de esto? — preguntó. Quiero hablar, pero estoy concentrada en hacerla sentir bien. — Mierda, sigue tocando mi clítoris, me correré pronto — sonreí, porque puedo hacer que una diosa como ella esté desesperada por mi toque, como yo por el suyo.

— ¿En serio? Y yo que pensaba que yo me estaba volviendo Flash. Corriéndome tan rápido y todo — ella se rio, una risa fuerte. Está temblando, no sé lo que hice, pero no puede detenerse.

— ¡Dios! Eres una nerd, te amo — tomó mi rostro, besándome con fuerza. — No pares, sigue jugando conmigo — me detuve, ¿Así no es como debería de ser hacer el amor, no?

— Te estás riendo — se sentó, mirándome con una sonrisa cariñosa en los labios.

— Eres linda, y divertida. Te amo. El sexo divertido es sexo increíble también, podemos reírnos —fruncí el ceño.

— No, esto no se parece a lo que hemos estado haciendo — me estoy poniendo blanda, esto no es divertido.

— Está bien, Becky. Me gusta, me gusta reírme contigo —tomó mi mano, así me calma cuando me siento mal.

— De mí, quieres decir — odio cuando la gente se burla de mí, por eso no soy tan sociable.

— No, contigo. Y, no, no eres Flash. Resistes bien, me corro dos veces siempre que lo hacemos. Tú eres la única que me hace eso, nadie más. Eres buena en la cama, el hecho de que podemos tener una risa sexy, es excitante — no le creo, es perfecta y tan hermosa. Es normal, no como yo. — Ya no me reiré, lo prometo.

— Quiero ser la amante perfecta, Freen. Lo mereces — me abrazó, puedo sentir nuestra piel tocarse. Se siente perfecto.

— Lo eres. Te amo, ¿Tú me amas? — asentí. — Quiero escucharte decirlo. 

— Te amo, hasta el fin de mis días y más allá de ellos — me besó, haciendo que me derritiera contra ella. El comandante también lo siente.

— Entonces muéstrame cuánto me amas — acarició mi miembro con gentileza, me está mirando con esa sonrisa dulce. No creo que hubiese podido perder mi virginidad con nadie más, todo lo que sé es que si ella no hubiera estado en mi vida, hubiera seguido así hasta los cuarenta. — Estás pensando mucho, ¿Quieres detenerte? — negué con la cabeza, besando su mejilla.