HYBRID I

Capítulo 20.

Dione.

Estábamos en vacaciones de pascuas, por lo tanto Bella y yo nos la pasábamos todo el tiempo en La Reserva ya fuera en la casa de Billy o en la de Sam y Emily, hace un mes le había regalado a Bella un anillo mágico, por lo tanto si tocaba la inscripción en el, yo sabría si estaba en peligro por lo tanto aparecería a su lado, sin importar que tan lejos estuviera.

Estábamos en casa de Billy, Charlie y él hablaban animadamente, Sam y Emily habían venido, Emily había traído un postre, el cual sin duda estaba delicioso, Jacob y Bella hablaban animadamente, mientras yo hablaba con Emily y Sam.

Cuando ambos se fueron, Bella y Jacob me arrastraron al garaje y nos sentamos en el Volkswagen, yo me senté atrás y me asomé por entre ambos asientos, mire a Jacob, se veía agotado, hecho su cabeza hacia atrás y cerró brevemente los ojos.

—Tienes que dormir un poco, Jake —murmure preocupada acariciando su mejilla.

—Estoy bien, veré lo que puedo hacer.

Nos sonrió un poco tomando mi mano entre las suyas.

—¿Esto tiene que ver con lo de ser lobo? —le pregunto Bella —Me refiero al calor.

—Sí, tenemos la temperatura más alta que la gente normal, entre 47 y 48 grados centígrados —Bella me miro, yo asentí confirmando que esa era mi temperatura corporal —Podría estar así en mitad de una nevada —dijo, señalándose el torso desnudo, mire a otro lado disimuladamente, era por mi salud mental —Y me daría igual, los copos se convertirían en gotas de lluvia al tocarme.

—Todos ustedes se curan muy rápido, ¿Es otra característica de los hombres lobo?

—Sí ¿Quieres verlo? Es genial —dijo, sonriendo y con los ojos muy abiertos, abrió la guantera y estuvo un rato rebuscando algo, entonces sacó de ella una navaja.

Abrí mis ojos sorprendida, mire a Bella y ella entendiendo mi mirada exclamó.

—¡No, no quiero verlo! ¡Deja eso!

Jacob soltó una carcajada, pero volvió a guardar la navaja en la guantera.

—Vale, de todos modos, lo de curarse viene muy bien, no puedes ir al médico cuando tienes una temperatura corporal con la que deberías estar muerto —explicó.

—No, supongo que no —dijo, antes de quedarse pensando —Y lo de ser tan grande, ¿también tiene que ver? ¿Por eso están tan preocupados por Quil?

—Por eso y porque su abuelo dice que se puede freír un huevo en su frente —dijo desanimado —Ya no tardará mucho en convertirse. No hay una edad exacta... Se va acumulando poco a poco, y de repente... —se interrumpió y pasó un rato hasta que fue capaz de hablar de nuevo —A veces, si te sientes alterado, cabreado o algo así, el proceso se puede disparar antes, pero yo no estaba cabreado por nada. Yo era feliz —Jacob se rio con amargura —Por la culpa de ambas,  por eso no me ocurrió antes y siguió acumulándose en mi interior, como una bomba de relojería ¿Saben lo que me hizo estallar? Billy comentó que me veía raro cuando volví de ver esa película. No me dijo nada más, pero el caso es que perdí los nervios. Y en ese mismo momento... exploté. Casi le arranqué la cara ¡A mi propio padre! —Jacob se estremeció y se puso pálido.

—¿Es tan malo, Jake? —le pregunté triste.

—No, no lo es —me respondió —ahora que lo saben, ya no. Antes sí que me resultaba duro —admitió tomando mi mano entre la suya nuevamente.

—¿Cuál es la parte más dura? —preguntó Bella.

—Lo peor es sentirse fuera de control —respondió pausadamente —Saber que no puedo estar seguro de mí mismo, que a lo mejor no deberían estar cerca de mí, que quizá nadie debería estar cerca de mí, es como si fuera un monstruo capaz de hacer daño a cualquiera, ya has visto a Emily. Sam perdió los estribos tan sólo un segundo... y resultó que ella estaba demasiado cerca, las cicatrices no se notan tanto gracias a Dya, pero aun así no hay nada que pueda hacer para arreglarlo. He oído sus pensamientos y sé cómo se siente. Y además, está la facilidad con la que me transformo, mucho mejor que los demás. ¿Me hace eso menos humano aún que Embry o que Sam? A veces, temo estar perdiéndome a mí mismo.

Apreté su mano, ¿así es como se sentía?, ¿se veía así mismo de esa manera?.

—¿Es difícil volver a transformarte en ti mismo?

—Al principio lo es —respondió —se requiere cierta práctica para entrar y salir de fase, pero a mí me resulta más sencillo que a los demás.

Suspire sintiendo mis ojos brillar llamando la atención de ambos los cuales me miraban asombrados, los ignore, abrí la puerta y salí del auto.

—¿Dya? —me llamo Bella confundida, más no respondí mi cuerpo estaba tenso y se movía por si solo.

Escuche los pasos de ambos detrás de mi, comencé adentrarme en el bosque, me agache poniendo una de mis manos en el suelo sintiendo una vibración en el, sin dudarlo me transforme y corrí detrás de esa vibración.

Seguí aquella vibración hasta el límite del tratado, exactamente a unos metros de mi casa, pero esta simplemente desapareció, mis ojos cambiaron y volví a mi forma humana, no había ningún olor en el ambiente lo cual hizo todo mucho más extraño.

Regrese en mi y lleve una mano a mi cabeza debido a una punzada, esto ya me había pasado antes, una vez cuando tenía cinco años y al cumplir doce años, era como si un extraño vacío en mi pecho se llenará cada vez que está presencia se hacía presenté.

Mire a mi alrededor pero no había nada, volví al bosque de regresó a casa de Billy, Bella y Jacob se veían muy preocupados, Jacob fue el primero en notar mi presencia así que rápidamente camino hasta mi y me abrazo levantándome del suelo, cuando me soltó Bella me abrazo.

—¿Qué pasó? —me pregunto preocupada.

—No lo se —murmure sincera.