Capítulo 1

3.5K 154 7
                                    

La tormenta era muy fuerte, golpeaba ferozmente las paredes de piedra del lugar y el frío penetraba sus huesos, haciéndolo temblar igual que su propio corazón.

Estaba asustado no iba a mentir, pero tenia que ser fuerte, por su madre, por sus hermanos, por él, porque sabia que no siempre iba a estar al lado de alguien para que lo protegiera. Él tenia que hacerlo en algún momento como heredero de Driftmark, va a tener que dar la cara a todos esos lores que le disgustan. Así que respiro hondo y habló.

—Traigo un mensaje de la reina.

Claramente el hombre gordo sentado en frente suyo no iba a ceder tan fácil, además de hacerse la burla de su madre, él inepto no sabia leer, tuvieron que llamar a un maestre para que le diga lo que contenía el mensaje. Espero pacientemente, hasta que el desgraciado le dijo perra a la mujer que le dio la vida, quería contraatacar, decir que está equivocado, que su madre era la persona más maravillosa, y perfecta que haya existido y que será una gran reina, pero no lo hizo, en cambió se mordió la lengua.

Finalmente se dio la vuelta para irse por donde vino con el rechazó de lord Borros en su piel, decepcionaría a su madre, él no pudo ponerlo de su lado, él era un fracaso. no merecía nada, ni siquiera el apellido Targeryn. Nunca sería suficiente.

Fue cuando escucho su voz.

—Espera, mi señor Strong.

Desde que entro, no le había dirigido la palabra, ni para saludarlo. Sabía cuál era la ética de que cuando uno llegaba tenía que saludar a su familia y lores. Pero él pasó eso, y fue directo a su mandado, sin embargo desde que llegó, sentía la mirada de su tío en todo momento. Lucerys no pudo contenerse y se la devolvió, tal vez estaba siendo atrevido, pero esta asustado y no lo quería demostrar por eso se armó de valor y miró tanto como pudiera, así se mantuvierin hasta que el viejo gordo lo despacho. Tenía que ser sincero, amaba la voz de su tío, pero cuando lo llamó, todo los vellos de su cuerpo se levantaron. Eso no era bueno.

Fue cuestión de tiempo para que la bomba explotará, y él sabia que lo haría, siempre fue el punto de inclinación de su tío. Él hombre al que mutilo, él niño que sufrió de las bromas de su hermano, y de él. Él era solo niño en entonces pero ahora sabe que Aemond no merecía nada de eso, en su tiempo pensó que era divertido, que equivocado estaba. 

Esa noche cometió un terrible error, uno que jamás se perdonará nunca en su vida, ese día hirió a la persona que amaba, ese día creció el odio hacia su persona, ese día cambia algo en todos. La brecha que hubo antes se abriría más con esa noche oscura. Y con eso los llevaria a donde estan ahora.

En los cielos. 

Vhagar es increíblemente grande, tan grande que su dragón pareciera una simple mosca ante ella. Lucerys trata de comandar a su dragón lo máximo que podía, tiene miedo jamás pensó que moriría de ese modo, jamás pensó que su tío lo mataría. Fue un imbécil, si tan solo le hubiera dado su ojo en ese momento cuando se lo pidió nada de esto estuviera pasando, nada lo estuviera persiguiendo a él y su dragón.

El miedo se filtra por su piel, trata de calmarse, sabe que lo que siente su dragón tambien lo sentirá y eso no es bueno, si él sigue sintiendo ese miedo su dragón seria capaz de.....

-¡No, Arrax! ¡lykiri!, ¡dohaeras!

Fue muy tarde su dragon atacó, y eso enfurecio a la vieja dragona, asi que en último intento se impulso hacia delante para rebasar a Vaghar. No sabia donde lo estaba llevando Arrax hasta que vio el cielo en calma, estaba todo despejado, las nubes estaban tan blancas resplandeciendo por el dorado del atradecer, estaba todo en calma hasta que se dio la vuelta.

Renace El Dragón: Evitando La Danza De Dragones Where stories live. Discover now