Capítulo 3 | Fuerza

1.2K 62 17
                                    

Nix

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Nix

Ese idiota entrometido debe entender que no necesito seguridad, pero claro como siempre algo o en este caso alguien perturba mi tregua. Con la aparición de Theo sólo me esperan más dolores de cabeza y si Zorova sigue interponiéndose esto acabará mal.

Odio que Caius haga esto, no necesito que me cuide, no me gusta, me abruma y carajo...

Es un imbécil.

Ayer fue un día de mierda por dos motivos, uno Caius envió a sus gorilas a cuidarme y dos el muy inepto desapareció como a quien se lo traga la Tierra, aunque claro la razón es para nada desconocida, pero que mínimo me avise, si quería ir a ver de qué color eran las bragas de Rubí que me diga, tuve que cancelar una cena de negocios y reagendar la firma de un contrato porque a su majestad se le antojó.

Al menos ahora que estoy en mi oficina pue... No, olvídenlo. Mi paz parece nunca ser opción.

¿Será que si me mudo a las Maldivas tenga paz o sólo un bronceado de infarto? Aunque conociendo al gruñón optaría por desaparecer totalmente, es capaz de buscarme por todos lados.

No es como robar la capa de invisibilidad y evadir a mi enemigo como lo hizo Ignotus Peverell con la muerte, no existe tal capa y si lo hiciera necesitaría como cinco para ocultarme y aun así estoy segura de que Caius no dejaría de buscarme.

O eso me gusta creer...

— Nix —y hablando del rey de los gorilas, trae cara de idiota, pero eso ya es natural.

— Modales... por favor.

— Nix —soltó con cierta advertencia que pasé por alto.

— Modales Zorova, ahora salga y toque la puerta —me miró como si la misma medusa se lo hubiera dicho, pero como buen niño obediente lo hizo, luego de tres toques y como me gusta joderlo pregunté lo obvio— ¿Quién?

— Carajo, Kane déjate de juego pendejos —su cara de exasperación era tan bella que quise tomarle una foto, pero desistí.

— No son juegos, son modales, le haría bien aprenderlos.

— Conozco lo que son los modales, los recibí cuando niño.

— Pues no parece, señor —hizo una mueca de molestia.

— Eso es porque yo decido con quien ejercerlos y con quien no —bufé, me tiene chocada con sus intervenciones sorpresa—. Esta es la primera y última vez que entra a mi oficina como pedro por su casa. Halo en serio.

— Nix esta es mi empresa, no puedes decirme que hacer y que no por algo soy el jefe.

— Lo es sí, pero la jerarquía no está de primera cuando interfiere en mi paz y espacio, además ésta mi oficina —dije cruzándome de brazos moviendo mi cabello hacia atrás—, así como yo toco antes de entrar a su oficina por respeto a su privacidad e intimidad, usted hará lo mismo, se llama respeto mutuo ¿lo conoce?

Resiliencia [+18] ©Where stories live. Discover now