Salvando al Trág1co Adon1s

Capítulo 20: Mingzheng ingresa en el hospital

En el apartamento 404, la pareja había llegado a un acuerdo.

Yin Qiang nunca esperó que le ocurriera algo tan bueno. Se frotó las manos, con la emoción claramente reflejada en su rostro. Se trataba de la familia Wei. Incluso un poco de las sobras de la familia Wei les bastaba para vivir cómodamente el resto de sus vidas.

El hijo debía cuidar de sus padres. Era algo natural. Además, pensaron en todos los métodos posibles para que su hijo pudiera vivir una buena vida. Razón de más para que su hijo les estuviera agradecido.

Yin Qiang empezó a imaginar lentamente la vida de lujo que le esperaba: una mansión espaciosa y lujosa, una cantidad inagotable de alcohol, mujeres jóvenes y hermosas...

"Yin Qiang..."

Una tímida voz interrumpió las fantasías de Yin Qiang. Frunció el ceño, insatisfecho, y entrecerró los ojos ante la mujer desaliñada que tenía delante. Quiso enfadarse, pero, después de pensarlo, contuvo su temperamento y dijo: "Juan'er".

Los ojos de Zhou Juan se abrieron de par en par al oír este cariñoso apodo. Casi no podía creerlo porque Yin Qiang nunca le había hablado con tanta suavidad. O la había llamado zorra o la había llamado por su nombre completo.

Su corazón se conmovió, pero Zhou Juan seguía expresando sus recelos. "Yin Qiang, ¿por qué de repente quieres hacer una prueba de paternidad?".

Yin Qiang gruñó: "Yo no la he hecho. Alguien dejó el certificado en nuestra puerta".

Al decir esto, de repente se dio cuenta del asunto que tenía entre manos. Salió corriendo de la cocina y empezó a mirar a su alrededor. Finalmente, encontró las hojas de papel esparcidas por el suelo y se apresuró a recogerlas. Le dijo a Zhou Juan: "¡Mierda, alguien sabe que Yin Mingzheng no es mi hijo!".

Zhou Juan no había esperado que la prueba de paternidad en realidad no la hubiera hecho Yin Qiang. Esto fue un gran shock para ella. También salió corriendo de la cocina y recogió la prueba de paternidad para echarle un vistazo. "¿Quién? ¿Quién es?"

Había enterrado este secreto durante casi quince años, y nadie la había descubierto en todo ese tiempo. Sin embargo, ahora alguien había enviado anónimamente una prueba de paternidad a su puerta.

¿Sabía esa persona que había cambiado a los niños? ¿Era alguien de la familia Wei?

Cuanto más pensaba Zhou Juan en ello, más se asustaba. Tenía la cara pálida como una sábana y las mejillas cubiertas de sangre seca. Toda su persona parecía un fantasma.

"¿Alguien se ha enterado?" Yin Qiang también pensó en esto. Preguntó con fiereza: "¿A quién se lo has dicho?".

Zhou Juan se apresuró a sacudir la cabeza. "¡No lo hice! No le he dicho nada a nadie".

Al ver que la cara de Yin Qiang se ensombrecía cada vez más, se apresuró a explicarse. "Probablemente no sabe la verdad. Si no, ¡no habría esperado quince años para revelarla! Definitivamente, tampoco es la familia Wei. Si fuera la familia Wei, harían un gran espectáculo y enviarían a mucha gente. Tal vez... tal vez esta persona sólo descubrió accidentalmente que ustedes dos no son padre e hijo... ¡mira!".

Zhou Juan hojeó la última página de la prueba de paternidad. "Sólo pone tu nombre, no el mío. Eso significa que esa persona no está segura de mi relación con Yin Mingzheng".

Yin Qiang frunció el ceño. Tomó los resultados de la prueba de paternidad y los hojeó. "Eso tiene un poco de sentido".

"Tal vez..." Zhou Juan volvió a ser la cobarde de siempre y habló con cautela. "Quizá esa persona piense lo mismo que el resto de la gente de la comunidad".