A Shu Ning siempre le había preocupado que ninguna de sus familias fuera capaz de aceptar el hecho de que tenía una relación con Wei Mingzheng. Había estado luchando con esto durante más de un año, ocultándolo durante más de un año.
Una vez que se hizo adulto, Shu Ning pensó que ya no podría mantener esta relación en secreto. Después de todo, su relación con Wei Mingzheng no era un crimen. Ya estaban juntos, así que más les valía hacerlo público.
Así que Shu Ning compró muchas cosas para Cai Qin y pasó algún tiempo con ella. Una vez que la tuvo de buen humor, le dijo en voz baja: "Cai Cai, hay algo que quiero decirte".
"¿Qué pasa?" Preguntó Cai Qin.
Shu Ning metió un coche de juguete en la mano de Shu Yang y dijo: "Yang Yang, ve a jugar con la tía".
El ama de llaves se fue con Shu Yang.
Shu Ning y Cai Qin eran los únicos que quedaban en el salón. Shu Ning tragó saliva y dijo: "Mamá...".
Cai Qin notó su nerviosismo y poco a poco se puso más serio. "¿Qué tienes que decir exactamente?".
Shu Ning respiró hondo. Luego, escupió las palabras que había estado gestando durante mucho tiempo. "Estoy saliendo con Mingzheng".
Cai Qin se quedó paralizada.
Cuando ella no respondió, Shu Ning repitió en voz baja: "Estamos saliendo".
Cai Qin dejó escapar un "ah" y se frotó las cejas. "Los dos están juntos".
Shu Ning se había preparado para que ella le gritara, pero estaba sorprendentemente tranquila. Dijo: "Sí".
Cai Qin asintió. "Mn."
... ¿Mn?
¿Eso era todo?
Los ojos de Shu Ning se abrieron de par en par. "Mamá, Mingzheng y yo estamos saliendo".
"Lo sé", dijo Cai Qin.
Shu Ning se sorprendió aún más. "¿Lo sabías? ¿Cuándo te enteraste?".
Cai Qin respondió: "Lo adiviné".
"¿Lo adivinaste?"
"Ustedes dos siempre están merodeando delante de mis narices. No soy estúpida".
Shu Ning: "..."
Shu Ning se quedó en silencio por un momento. Estaba sentado frente a Cai Qin. Sus manos y pies estaban quietos y ordenados. "Mamá, ¿qué piensas?"
"¿Qué más puedo pensar?" Cai Qin se frotó el entrecejo. "Ambos son mis bebés, así que, ¿a quién puedo culpar?".
Shu Ning bajó la cabeza.
Cuando se dio cuenta de que estaba bajo de ánimo, Cai Qin sonrió y dijo: "No estés triste. No pretendo culparte. Cuando me enteré, no sabía qué hacer. Estaba conmocionado. Más tarde, intenté aprender un poco más sobre este tipo de cosas y, poco a poco, empecé a entender un poco más."
"Mientras mi hijo sea feliz, ¿qué importa? Yo también quiero que Mingzheng sea feliz. No ha sido fácil para él".
Shu Ning levantó la cabeza sorprendido, sus ojos se enrojecieron lentamente. "Mamá..."
No esperaba que Cai Qin ya lo supiera. Aunque estaba sorprendida, no les regañó ni les molestó. En lugar de eso, se desvivió por aprender y comprender. Realmente era raro tener unos padres tan abiertos.
Shu Ning no pudo evitar estirar la mano y abrazar a Cai Qin, con las lágrimas resbalando por sus mejillas.
Cai Qin le devolvió el abrazo y le dijo: "No llores. ¿Cuántos años crees que tienes?".
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Salvando al Trág1co Adon1s
Teen FictionShu Ning leyó una novela de CEO. En él, había un villano hermoso y trágico. Claramente era el verdadero joven maestro de una familia rica, pero fue cambiado al nacer y se convirtió en delincuente. No obtuvo lo que realmente era suyo desde el inició...
