Capítulo 32: Cuenta regresiva

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- ¡Caw! ¡De prisa, el pilar del agua, el pilar de la flama y Tanjiro se han encontrado con Muzan y están peleando contra él! ¡Caw!

Mientras corríamos por todos estos pasillos siguiendo al cuervo kasuagi de Kanae, esta nos informó que mi hermano, Kyojuro y Tanjiro ya se estaban enfrentando contra Muzan, en menos de un segundo mi estado de ánimo cambio considerablemente, de determinación a preocupación.

El rostro de Kanae también se desfiguró por unos segundos y después levantó el rostro para mirar a su ave guía.

- ¿Y Tamayo sensei? – Kanae de repente preguntó – ¿Tienes noticias de ella?

- ¡Caw! ¡Muzan la asesinó! ¡Caw!

- ¡¿Qué?!

Tanto Shinobu como Kanae preguntaron incrédulas ante la noticia, rolé un poco los ojos para observarlas a ambas y las dos se veían un poco decaídas, no las culpo, la señora Tamayo paso tiempo con ellas y crearon un vínculo de maestra-discípulas.

- Kanae, Shinobu.

Las llamé y pude ver como ambas levantaron el rostro para observarme.

- No podemos dejar que su sacrificio sea en vano – Les dije.

- Si.

Con eso todos nos quedamos en silencio y seguimos al cuervo kasugai en silencio, las palabras ya no eran necesarias porque todos sabíamos que es lo que debemos hacer.

Seguimos corriendo y al llegar a una esquina de este largo pasillo, algo chocó con nosotros.

- ¡Auch!

- ¿Pero qué...?

Me di cuenta de que uno de los individuos era Zenitsu, su cabello amarillo me era inconfundible.

- Zenitsu kun – Le llamé.

- ¡Hya! Tsutako san, qué bueno que aparece, yo... ¡Guh!

Zenitsu comenzaba a llorar y me abrazó, derramando sus lágrimas en mi ropa, pero fue interrumpido por Inosuke que le dio un golpe en la cabeza y lo separó de mí.

- ¡No llores Monitsu! ¡Solo los débiles lloran!

Pero si tu estabas llorando minutos antes... Bueno lo mejor será quedarme callada en estos momentos y ahorrarme mi comentario.

- ¡Tú no sabes por todo lo que pasé! Yo...

- Agatsuma san – Kanae le interrumpió – Lamento interrumpirte, pero este no es momento para hablar de esas cosas.

- Nee san tiene razón, debemos... ¿Eh?

Shinobu se calló de repente porque todo el lugar comenzó a temblar, todos nosotros perdimos el equilibrio y caímos al suelo, de repente, el suelo comenzó a elevarse hacia el techo y por un momento creía que íbamos a ser aplastados, pero del techo apareció una puerta y fuimos arrojados hacia el exterior.

- ¡Ahh!

El grito de Agatsuma me hizo girar un poco y ahora me di cuenta de cómo todos estábamos cayendo desde el cielo nocturno hacia el suelo. Como pude me recompuse en el aire y me preparé para ayudar a mis amigos.

- Arte de sangre demoniaca: Esfera rotatoria de agua.

Mi esfera de agua logró atraer a todos y nos protegió de la inminente caída, al estar nuevamente en el suelo y al disipar mi técnica, algunos de mis amigos empezaron a toser por tragar un poco de agua.

- *Cof, cof*

- ¡Hermana mitad haori! ¡¿Qué fue eso?! ¡Yo también quiero hacerlo! – Me dice emocionado Inosuke.

Lluvia tras la sequíaWhere stories live. Discover now