Capítulo 26.

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El sonido de sus altos tacones resonaba por todo el salón. Caminaba de un lado a otro, tratando de buscar alguna solución al problema.

-¡Se escapó! -gritó, el agente que estaba por un lado de ella esperando a que su histeria disminuyera, se sobresaltó al sonido, pues hasta ese momento había permanecido murmurando para ella misma y hablando a la nada -¿Cómo dejaste que pasara?

El hombre tragó saliva, no era bueno cuando Angelina se enojaba.

-Señora, no nos dimos cuenta debido a la falta de electricidad pero..

-¡¿Pero qué?! -exclamó molesta.

-Ellos hicieron uso del fallo y aprovecharon para esconderse. Están el laboratorio, pero no sabemos en dónde, ya que no todas las cámaras funcionan.

-¡No es excusa! Tu deber era vigilarla, sin despegar la vista de todos ellos Y ... dejaste que se escapara -abrió los puños, como dejando ir algo que tenía un rato atrapado en sus manos. Los dedos estaban tensos del coraje, tenía un aspecto lunático, los ojos yendo de un lado a otro, inquietos y ¡Hasta el cabello tenía despeinado!

En cada paso que la rubia daba dejaba un rastro de escarcha, no debió de haber utilizado la cápsula.

Lo que le causaba más coraje era no saber dónde estaba Derek, justo cuando necesitaba de sus brillantes ideas, él ya no estaba.

Ese desgraciado debió escapar cuando mandé la alerta, pensó con furia y resopló, no debí dejarlo ser mi socio, era demasiado bueno para ser verdad.

El hecho de haberlo encontrado cuando más necesitaba ayuda le parecía raro, puesto que desde un principio se mostró de acuerdo en sus planes y jamás cuestionó sus malas decisiones, además de que el hombre no se involucraba demasiado en sus proyectos. Sólo estuvo presente cuando se trató de Sara, sabiendo que podía controlar los cuatro elementos.

Y sin contar que se desaparecía por varios días, y siempre que lo encontraba, parecía estar hablando con alguien.

-La encontraremos -aseguró.

-¡Lo harás! ¡Además lo sabe! ¡Sabe sobre el Quinto Elemento! -exclamó desesperada, debía concentrarse en lo más importante y era traer a Sara de vuelta.

¿Quién pudo haberle contado ése secreto tan bien guardado? ¡Debía haber alguien que abrió la boca!

Tengo que deshacerme de ella, pensó con decisión, es la única alternativa si no quiero que salga de estas paredes. ¡Pero tengo que encontrarla primero! ¡Tengo que...!

Al darse cuenta, empezó a reír, lo que asustó más al agente.

-Señora -habló en manera cautelosa -¿Se encuentra bien?

-¡Se escapó! -río de nuevo -Pero tenemos manera de saber dónde esta ¡No importa que se haya escondido!

-¿Señora?

-¿No lo entiendes, Alejandro? -fue hacia la mesa cercana y tomó una pantalla electrónica, se lo entregó, ya mas calmada -Podemos saber dónde está ¡Cómo pude olvidarlo!

El hombre no dijo nada, sólo la dejó hablar, no podía interrumpirla, pero tomó el dispositivo, enseguida lo reconoció, era uno de rastreo.

-Mi experimento, tiene insertado el localizador -dijo Angelina -Con este la rastrearemos...

-Y la encontraremos -concluyó Alejandro.

🔥💧🌪️🌱

Los tres avanzaron en silencio por los pasillos, teniendo cuidado de no ver a ningún agente que los estuviera esperando, para su sorpresa, no había nadie.

La Chica de los Cuatro Elementos Pt.1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora