Capítulo 31.

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Conforme subía se dio cuenta de el estado de los pasillos y algunas salas. Las paredes estaban agrietadas, habían pedazos de concreto en en suelo y también científicos, muertos.

¿Que habrá pasado aquí?

Las puertas estaban abiertas, por lo que dejaban ver lo destrozadas que estaban por dentro. Los estantes volteados, vidrios por el suelo, líquidos de distintos colores mezclándose. Era un caos.

Debieron evacuarlos, pero ¿Por qué?

Parecía que todos habían intentado salir por el mismo lugar, se amontonaron y se aplastaron unos a otros. Devolvió su vista al frente, luego de ver el cuerpo de un Científico que había sido disparado por detrás.

Ya casi se acercaba al primer piso. ¿Cuanto faltaría? Estaba empezando a cansarse.

Pero nada era comprado con la tristeza que sentía por haber dejado solo a William.

Sacudió la cabeza intentando alejarlo de su mente, no sería bueno si se distraía.

Y estaba algo más importante aún. ¿Cómo lograría encontrar el Quinto Elemento? Una vez, Alba le había mencionado algunas características sobre ello, pero en ese momento no podía recordarlas todas, salvo un par de cosas.

Es llamado "tú"

¿Pero, cómo, yo?

Era lo que había dicho la gemela tiempo atrás. Se repetía esa pregunta en su mente, varias veces hasta encontrarle algún significado.

En las paredes, antes de cada escalera, había un letrero que decía el piso en el que estaba. Cuando subió las siguientes, vio el número.

Piso 5

Suspiró una vez más y subió esas escaleras. Sabía a dónde tenía que ir, pero sólo pensaba en una cosa.

¿Quién soy?

Se supone que ella lo sabía, era los Cuatro Elementos. La chica que podía controlarlos. Por su mente, pasaron todas las experiencias que había tenido con los Elementos.

Aquella vez que estuvo con William, cuando lo conoció, le mostró los rayos, el día en que se encontró con Mike, vio el fuego a su alrededor, el coraje, la ira que sintió en ese instante. O cuando creó los muros de Tierra que encerraron a los Agentes, para detenerlos. Y le faltaba uno; el aire.

No había intentado usarlo fuera de ese laboratorio, más que aquella vez, en las pruebas de Angelina e hizo los vientos fuertes junto con los tornados, pero eso no contaba ¿O si?

Pensando en ello, sacó las cuatro piedras. Las miró mientras caminaba, también teniendo cuidado de no tropezar con nada.

Y fue ahí cuando se dio cuenta.

Cada piedra, tenía una esquina más transparente. No afectaba a la forma normal de la piedra, pero ahí estaba, claramente separado del resto, tuvo una idea. Lo quebró. Hizo lo mismo con las demás.

Esperó a que algo sucediera, como un temblor o que algo se iluminaría, pero no sucedió. Curiosamente, cada pedazo coincidía con otro, así que los unió. Buscó el lado que encajara con el siguiente hasta que lo logró.

Ahí, estaba. El Quinto Elemento.

No lo podía creer, tenía el Quinto Elemento en sus manos. Casi lo deja caer de la emoción. Lo miró con mucha atención, queriendo asegurarse de que no fuera un error. No tenía rastro alguno de haberse unido cada pieza. Alba tenía razón.

Ahí entendió porque lo llamaban "yo" ("tú") . En él, ella vio su reflejo y cada instante de su vida que la hacía la Chica de los Cuatro Elementos.

La Chica de los Cuatro Elementos Pt.1Where stories live. Discover now