Vol. 1. Capítulo 24. Un Enfrentamiento

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El resultado de esa frase, fue algo de lo que Tang Feng rápidamente se lamentó. Ge Chen y Lu Tian claramente se reunieron en secreto y probablemente no había mucha gente que lo supiera. Aunque ahora, por un pequeño desliz, lo dejo escapar cuando estaba tratando de hacer que Ge Chen se vaya.

Si  Ge Chen le dijo algo a Lu Tian… ¿Lo pondría en su lista negra o se desharía de el para encubrirlo?

Cuando Tang Feng regreso a la fiesta, Ge Chen y Su Qi Cheng se estaban preparando para marcharse. La popular estrella ya se había cambiado de traje pero, ¿por qué todavía era blanco?. Mientras que Su Qi miraba a Tang Feng con reproche. Los dos se fueron sin despedirse de él.

Tang Feng suspiró interiormente.

Lu Tian ya estaba caminando hacia él con una fría expresión.

—Ven aquí—Sus palabras fueron breves pero con un tono frio y cortante.

Y con esas dos palabras, el gran presidente Lu Tian elegantemente se dio la vuelta y se fue caminando hacia arriba. La única opción que Tang Feng tenia, era seguirlo.

¿Quién es este mundo permitió que Lu Tian sea su Jefe?. Tang Feng le había pedio a Xiao Yu que lo buscara.

Su contrato era de 8 años y fue firmado por Lu Tian y “Tang Feng”, y ahora, solo 5 años habían pasado. El prefería no ser refrigerado y dejado a un lado por Lu Tian durante los 3 años que le quedaban.

Era hora de hablar con el presidente.

—Cierra la puerta—Lu Tian se lo ordeno fríamente mientras entraba en la espaciosa habitación de descanso.

Mientras Tang Feng entraba, cerró la puerta. Al mismo tiempo, él encendió las luces de la habitación. Lu Tian ya estaba sentado en el sofá y lo miraba como si lo estuviera examinando ligeramente.

—Los asuntos domésticos de otras personas no tienen nada que ver conmigo. No tiene de que preocuparse; No revelare ninguno de sus asuntos personales a los demás—Tang Feng hablo primero.

—¿Oh? ¿Y qué sabes de mis asuntos personales? ¿Por qué no me lo dijiste?—Lu Tian sonrió débilmente.

Sin embargo, ni siquiera un rastro de esa sonrisa, se podía ver en sus
ojos.

—No sé nada en absoluto. Sólo estaba diciendo

Tang Feng se encogió de hombros y sonrió mientras se sentaba enfrente de Lu Tian.

—Puede ser que hubieran algunos malentendidos entre nosotros antes, y ya que rara vez se tiene la oportunidad de estar a solas con el Presidente Lu, es mejor hablar de esto ahora.

—¿Oh? ¿Qué quieres decir?—Cruzando sus brazos y llevándolas a su pecho, Lu Tian cruzo sus piernas y se apoyó en contra del sofá. La fría sonrisa seguía en sus labios.

—Tener a un perseguidor demasiado obsesivo de un lado a otro, realmente es un cosa incomoda. Pero con respecto a eso, el Presidente Lu ya no tiene de que preocuparse. Yo era inmaduro en ese entonces y pude haberme ido por la borda en algunas cosas. Pero no lo hare ahora, ni nunca más.

En toda su vida, Tang Feng fue siempre la persona a quien perseguían, nunca ha perseguido a alguien.

No había ninguna expresión en la cara de Lu Tian, por lo que Tang Feng continuo hablando.

—No voy a traer los asuntos personales al trabajo, no importa lo que haya pasado en el pasado. En este momento, ni siquiera recuerdo nada.
Seguramente, alguien tan importante como el Presidente Lu, no seguiría discutiendo esto con alguien tan insignificante como yo, ¿verdad?.
Deberíamos olvidar el pasado, ¿está bien?

Tang Feng extendió su mano. Este acto debería contar como si estuviera mostrando una actitud humilde.

En cualquier caso, no esperaba que alguien como Lu Tian, quien era demasiado astuto y observador le respondiera. Sin embargo, casi todo lo que tenía que decir ya se había dicho. Lu Tian debería haberlo entendido más o menos.

Lu Tian se limitó a mirar a Tang Feng, quien seguía mirándolo con una suave y cortes sonrisa.

No podía bajar la mano que tenía en el aire, incluso si le estaba doliendo. Tang Feng maldijo a Lu Tian desde el fondo de su corazón. ¿Este hombre estaba deliberadamente jugando con él?. Por favor, di algo pronto.

—Es difícil creer que esas palabras están saliendo de tu boca—La mirada de Lu Tian cayó sobre la mano extendida de Tang Feng. Se inclinó hacia adelante y agarro fuertemente su mano, acercándolo hacia él.

El rostro de Lu Tian casi estaba tocando a Tang Feng. Se podía sentir su cálido aliento junto a las palabras que soltaba. Este hombre estaba pidiendo una paliza.

—Tang Feng, es mejor que seas inteligente. Las cosas que no se deben oír, no se deben hablar, es mejor que lo entiendas.

—Muchas gracias Presidente Lu por darme esta oportunidad Tang Feng dejó escapar un suspiro. Incluso para alguien experimentado como él, cuando se enfrentaba a Lu Tian, se podía sentir la opresiva atmosfera que lo rodeaba.

Sonriendo ligeramente, Lu Tian de repente retiró su mano y agarró la mandíbula de Tang Feng.

—No trates de planear una manera de salir de esta. Además, no creas que solo por haber entrado a la cama de Charles, has aumentado tu superioridad. Mantente dentro de tus límites. Aparte de ese rostro y cuerpo tuyo, eres inútil. Entre hombres y mujeres, no eres el único que está dispuesto a desnudarse y dormir con alguien.

Suprimiendo su la ira y la humillación en su corazón, Tang Feng se alegró de su útil costumbre que había obtenido cuando tenía una enfermedad cardiaca. No perdió su ira, pero se limitó a pretender que Lu Tian era un perro apestoso que estaba ladrando como loco cerca de él.

—Gracias por el consejo, Presidente Lu—Sonrió mientras hablaba

Lu Tian se fue y Tang Feng se sentó en el sofá. Usando una mano, se tocó suavemente su pecho.

El único en quien puede confiar, es en sí mismo.

El Rey De La Pantalla De Cine (Vol 1)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant