Vol. 1. Capítulo 111: Contraataque (1)

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La clase de entrenamiento de una Verdadera Estrella estaba llegando lentamente a su fin y las clases comenzaban a terminar. La mayoría de los alumnos decidieron usar el tiempo que les quedaba para practicar las habilidades que habían aprendido para que pudieran rendir bien los exámenes fina- les.

Dondequiera que las personas estuvieran presentes, habría competencia, incluso más en el círculo del entretenimiento. A los programas de reality  de televisión a menudo les gustaba aumentar los conflictos entre invitados o concursantes para obtener calificaciones más altas y despertar el interés del público. Era una estratagema que se usaba a menudo en los programas de reality de televisión estadounidense. Sin embargo, Tang Feng pensó que China utilizó la obvia estrategia de marketing de una manera mucho más agradable.

Debido a las circunstancias dentro del país y la estructura del comité de supervisión, los equipos de producción preferirían mostrar al público un lado conmovedor de alguien en lugar de su lado oscuro e intrigante. No im- porta cuántos problemas existan en privado, la mayoría de las personas ele- girían actuar con amabilidad y alegría en la superficie para asegurar el camino de su futura carrera.

Por supuesto, hubo unos pocos elegidos que no dudaron en mostrar su lado feo al público mientras buscaban mayor atención. Ese tipo de personas
siempre terminan siendo objeto de las maldiciones y críticas del público; Sin embargo, también tenían la mayoría de los ojos al final.

Un método imprudente como ese podría considerarse como una forma de escalar a la cima, pero sería difícil predecir si un método de este tipo terminaría en éxito o fracaso. Al menos, Tang Feng pensó que los riesgos superaban los beneficios. No todos fueron capaces de lavarse las manos del pasado y entregar una hoja nueva. Actuar no fue una carrera que duró solo un año o dos, fue algo que podría durar toda la vida.

Había gente a la que le gustaba Tang Feng en la clase de entrena- miento, pero también gente a la que no le gustaba. No sabía qué pensaban los demás aprendices de él en privado, pero todos lo trataban bastante bien en la superficie. Después de haber regresado de su viaje a los Estados Unidos con Lu Tian Chen, los más inteligentes incluso de vez en cuando venían y conversaban con él.

¿Qué estaban haciendo juntos un empleado y su jefe en los Estados Unidos?

No importaba si eran asuntos privados o públicos. Si el presidente del Grupo Tian Chen hizo un viaje personal con un empleado suyo, significaba que Lu Tian Chen veía a Tang Feng de manera diferente a todos los demás.

Recientemente, los rumores sobre Lu Tian Chen y Ge Chen se estaban extinguiendo. Después de que Ge Chen se cayó del caballo y tuvo que ser hospitalizado, Lu Tian Chen no había ido a verlo ni una vez.

Tal vez el Grupo Tian Chen estaba planeando promover un "Viejo Recién Llegado". Además, la mayoría de los alumnos terminarán firmando con el Grupo Tian Chen en el futuro. Solo un idiota iniciaría un conflicto con alguien

cercano al presidente de su futura agencia. En otras palabras, el círculo de entretenimiento funcionó como cualquier otro lugar de trabajo: tenían que confiar en su inteligencia emocional y navegar por las conexiones entre las personas para prosperar.

Por lo tanto... Como veterano, Tang Feng sintió que lo estaba haciendo bastante bien en la clase de entrenamiento.

¿Cuál fue su secreto? Sinceridad, amabilidad, y mantener un perfil bajo. Ninguno de esos era falso cuando se trataba de Tang Feng. Los otros aprendices tampoco eran idiotas. Mucha gente puede considerarse inteligente y disfrazar su arrogancia bajo capas de falsa amabilidad. Cuando se dirigen a ese tipo de personas, la mayoría del público elegiría quedarse callado, demasiado perezoso para exponer la falsedad. En cuanto a las personas que fueron verdaderamente amables y consideradas, pocos elegirían odiarlas.

Más importante aún, Tang Feng no trató la clase de entrenamiento como un campo de batalla lleno de competidores. Para él, la clase de entrenamiento no era más que un ejercicio de calentamiento antes de comenzar a filmar para su nueva película. Una vez que alguien perdió su competitividad, la gente los trataría naturalmente con menos animosidad ya que se percibía una falta de amenaza.

Por supuesto, la razón principal por la que Tang Feng estaba siendo bien tratado en la clase de entrenamiento era por Lu Tian Chen. No importaba lo amable o considerado que fuera, contar con el respaldo de un gran patrocinador supera todo eso.

Después de sudar en su clase de baile, Tang Feng se reunió con algunos otros aprendices y conversó mientras tragaba botellas de agua. En ese momento, un miembro del personal gritó repentinamente el nombre de Tang
Feng. Las cámaras se apagaron de inmediato y Lu Tian Chen salió de un rincón oculto.

—Ven conmigo. — Lu Tian Chen dijo mientras agarraba la mano de Tang Feng y lo arrastraba fuera de la sala de práctica bajo la mirada de curiosos.

Caminaron hasta la habitación de Tang Feng en el edificio de apartamentos. Lu Tian Chen cerró la puerta con fuerza detrás de ellos y se volvió para mirar al actor.

Tang Feng todavía sostenía una toalla en sus manos, su cabello empapado de sudor. Extendió una mano y se quitó el pelo de la frente. El peinado barrido hacia atrás mostró prominentemente sus rasgos refinados para que todos los vieran, convirtiéndolo en una imagen limpia y simple.

—¿Qué pasa? — Era raro que Lu Tian Chen viniera a buscarlo directamente. Al ver la agitación del otro, Tang Feng sintió que estaba a punto de escuchar algunas malas noticias.

—¿Qué está pasando entre tú y Chen Ming Xu? — Lu Tian Chen entregó su teléfono a Tang Feng, tenía el ceño fruncido arruinando su rostro.

Tang Feng aceptó el teléfono y fijó sus ojos en la pantalla. Fue un artículo periodístico con un título impactante: ¡Tang Feng se reunió en privado con el popular presentador de televisión Chen Ming Xu! ¡Detalles sobre su antiguo amor!

El Rey De La Pantalla De Cine (Vol 1)Where stories live. Discover now