XXV: Remordimientos

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¡Hola allí! Ya solo estamos a un capítulo de terminar esta historia

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¡Hola allí! Ya solo estamos a un capítulo de terminar esta historia.

Cualquiera que sea la razón por la que agregaron esta novela a sus bibliotecas y llegaron hasta aquí, muchísimas gracias. Espero haber por lo menos, cumplido con sus expectativas.
Hablando de eso, creo que es un buen momento para hacer sus teorías finales 👀✨
En fin. Esta actividad la tenía pensada desde hace un tiempo, y no sé si les agrade la idea y se entusiasmen pero allí voy: se trata de una pequeña búsqueda alrededor de toda la historia.
Quien pueda enumerar todos los sabores de té que bebió Annarieke alrededor de la trama, le regalaré un dibujo de lo que sea que pida (puede ser fanart o personajes propios). No es mucho, pero es trabajo honesto 🤠
Aviso justamente aquí, para que puedan empezar su búsqueda, PERO deben esperar hasta el último capítulo para al fin decir los resultados que encontraron.
¡Buena suerte! Espero que se animen 💞

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Cuando los policías y especialistas de la Primera Ciencia llegaron al palacio para tomar toda la evidencia posible, Benedikt, Heinrich y Mallory trataron de estar tan atentos como les era posible ante cada detalle de la investigación

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Cuando los policías y especialistas de la Primera Ciencia llegaron al palacio para tomar toda la evidencia posible, Benedikt, Heinrich y Mallory trataron de estar tan atentos como les era posible ante cada detalle de la investigación. Lo único cierto en aquel punto era que si de alguna forma Odyle Ruenom había ingresado al palacio Bellemónt, logró salir de allí entre los invitados sin levantar la menor sospecha o duda.

En la entrada del bosque de la isla, encontraron también los cuerpos de dos guardias reales que habían desaparecido desde la noche del baile, y según las marcas en los cadáveres, se determinaba que habían sido heridos de muerte debido a múltiples puñaladas. No obstante, aquel diagnóstico no parecía ser tan necesario, pues Heinrich y Mallory no dejaban de ver cómo el príncipe insistía a los investigadores que —además de su propia hermana—, la bestia no había cobrado ninguna otra víctima.

Si algo destacaba Mallory de su mejor amigo, era que podía ser muy discreto y mantener la seriedad ante cualquier asunto, pero incluso si Benedikt estaba de acuerdo con mantener el secreto de lo que había sucedido realmente con la pequeña princesa, sentía que aquello era más grande que él. La verdad era que el remordimiento y el dolor en el corazón del príncipe no habían disminuido ni un poquito, y tratar de encargarse de cada asunto técnico a su paso le ayudaba a mantenerse distraído porque más que nunca, lidiar con sus propios pensamientos era aterrador.

Voluntad de hierro (El juramento de los guardianes I)Where stories live. Discover now