Capitulo 14 La Tentación de Sophia

28.7K 793 52
                                    

No lo podía creer, estaba cara a cara con el tipo que me había hecho todo lo que quiso hace un mes. Mi mente se puso en blanco y lo único que podía pensar era en que me mataría.

- ¿Puedo saber por qué mierda estas tocando a mi mujer? -  le pregunto a mi acompañante.

-  Lo siento amigo, yo no sabía que tenía novio – contesto nerviosos mientras me apartaba.

- Pues ahora ya lo sabes, lárgate – le indico el camino por donde habíamos venido

 El tipo no demoro en hacerle caso, yo quede boquiabierta al ver como obedecía la orden de Eijin << por dios como tan cobarde>> pensé muy enfadada

- Espera, no te vayas – le grite, tratando de detenerlo, pero no pude ya que él aun me tenía agarrada fuertemente del pelo  - aahhh – me queje – duele maldición – me gire a mirarlo ferozmente – puedes soltarme. Me vas a dejar calva

-  Cállate – me gruño. agarrando más fuerte y tirando mi cabello asía riba dejando al descubierto mis oídos me volvió a gruñir – te dejare sin ropa si te sigues comportando como una quinceañera estúpida

 Me paralice al sentir su respiración en mi odio.  Lo mire de reojo entre rabia y frustración. Me había arruinado la oportunidad perfecta de satisfacer esta lujuria que me estaba matando. Y sin mencionar que otra vez había aparecido mi peor pesadilla.

- Vamos – ordeno

-  ¿a dónde? – le pregunte sorprendida – yo no voy a ninguna parte contigo, además yo vine sola, no recuerdo haber quedado con un pervertido – volví a alejarme, pero otra vez me detuvo el tirón del cabello – aahhh mierda, ya te dije que me sueltes – le réglame furica

- No me fastidies Shopia, así que camina callada antes que me desquite aquí mismo – me amenazo.

 No dije nada más. Me saco a rastras del bar sin que pudiera hacer nada más que quejarme, me lanzo dentro del auto y rápidamente comenzamos a recorrer las calles asía un rumbo que yo no conocía. No podía entender nada, él me había liberado y ahora de nuevo me había vuelto a secuestrar. Pero ahora no tenía miedo, más bien deseaba volver a encontrarme con él para poder decirle todo y dejarle claro cuanto lo odiaba.

- ¿Dónde me llevas? – le pregunte fríamente sin dejar de mirar hacia delante

- A un hotel – contesto igual que yo. Me gire rápidamente para ver la cara de indiferencia con la que hablaba.

-  Yo no voy, déjame aquí – dije tratando de abrir la puerta. al parecer el maldito le puso seguro y no pude abrirla.

 Me ignoro completamente y aunque le repitiera mil veces, no me contesto ni freno hasta que llegamos a un hotel muy grande que al parecer era muy lujoso típico de él.

- Vamos baja – volvió a ordenarme. Como odiaba que me ordenara y que hiciera cada cosa que él quisiera conmigo, no lo soportaba y quería aplastar ese ego tan grande que tenía.

- no pienso hacerlo  - dije indiferente hacia su orden. Al parecer a él no le gustó nada eso y rápidamente tomo mi rostro girándolo hasta quedar a centímetros de su boca.

- Parece que se te olvido rápidamente lo que soy capaz de hacerte si me cabreas  - me amenazo. Tengo que admitirlo, quede petrificada al escuchar tan clara advertencia. Se me vino a la mente todo lo que pase con él y un escalofrió que no sentía desde la última vez que estuvimos juntos, me recorrió el cuerpo haciendo evidente el miedo que me provocaba. Sonrió de gusto al ver mi reacción, le gustaba que le tuviese miedo y pronto todo el valor y la adrenalina que había obtenido en el bar se fue rápidamente por un tubo.

Mi secuestrador..Where stories live. Discover now