²²

13.7K 1.7K 966
                                    

Llegamos a España, justo era el día los Esland así que teníamos que llegar rápido al hotel donde nos quedaríamos para arreglarnos

—Le envié mensaje a Osvaldo, hace días ellos llegaron así que tienen alquilado un auto. — contó mientras caminamos para salir del aeropuerto —Esperemoslo, vendrá por nosotros.—

Durante la velada del año pasado habían hecho "la casa Madrid" y ahora lo habían repetido. Habían invitado a Roier a quedarnos en esa casa pero yo no había querido

—Si viene nos llevará con los demás.— dije obvia —Y ya habíamos hablado al respecto.—

—Vamos, no sería tan malo.— seguía tratando de convencerme —Además estaríamos solo dos días, no gastaríamos en lo del hotel.—

—Prefiero pagar las dos habitaciones antes que sentirme incomoda.— discutí cuando estuvimos afuera

Roier se puso frente a mí y levantó mis lentes oscuros, yo simplemente lo miré

—Me encantan tus ojos.— confesó poniéndome un tanto nerviosa

—Ni aunque me halagues iremos.— aún así discutí y él rió

—Haré lo que quieras si accedes.— poco le faltaba para suplicar

Sabía que muy pocas veces se veía personalmente con sus amigos y que por eso los eventos como este le hacían ilusión

—Quiero que le hagas un comercial a mi línea de maquillaje.— dije y me miró confundido —Claramente no necesito la publicidad pero sería interesante que alguien tan creativo como tú hiciera una especie de comercial aunque sea en sus historias de instagram.—

—Lo haré, dalo por hecho.— exclamó con una gran sonrisa

Esperamos ahí unos cuantos minutos hasta que vimos como un auto se detuvo frente a nosotros.

—Subanse perros que aquí me ponen multa.— exclamó bajando la ventana para que lo escucharamos

Me subí en la parte de atrás, Roier subió ahí las maletas y después se subió en la parte del copiloto

—Por fin estará el mctrio juntos de nuevo.— habló el Mariana mientras conducía —Que bonito men.—

—¿Aldo también se está quedando en esa casa?.— cuestionó Roier

—Hay un buen de habitaciones, hasta gimnasio tiene esa madre.— contó su amigo

Me distraje mirando a la ventana, Madrid era precioso y cuando venía me encantaba tomar fotos a la ciudad

—Por cierto ______.— llamó mi atención el Mariana, me estaba viendo desde el espejo retrovisor —Lamento lo de la última vez, no nos medimos, aveces estamos medio weyes.—

—No te preocupes, todo bien.— sonreí un poco

Escuché como Roier aguantaba la risa, él más que nadie sabía que no todo estaba bien

—¿Por qué te ríes cabrón? el perdón es muy bonito.— exclamó el otro

Yo saqué mi celular para distraerme mientras llegábamos a nuestro destino.

En unas horas teníamos el evento que tanto había estado esperado y después de toda la crisis con mis números estaba tan nerviosa

Ellos siguieron platicando y burlándose de algunas cosas mientras yo simplemente me sentía un tanto excluida de todo

Llegamos y ambos bajaron las maletas mientras yo grababa algunas historias para anunciar que habíamos llegado, grabé un poco de ambos chicos para que las redes enloquecieran

Entramos al lugar y Osvaldo nos dijo donde estaba la habitación donde nos quedaríamos. Al ser pareja no nos darían habitaciones separadas, alguien dormirá en el suelo y no seré yo.

—Spreen y Carre están en directo, iré con ellos.— contó cuando entramos a aquella habitación para dejar las maletas

—¿Directo antes de los Esland?.— pregunté confundida —¿Les dará tiempo de prepararse?.—

Aún era temprano pero yo siempre tardaba horas en mi arreglo

—Te aseguro que sí.— respondió Roier —La única bonita en este lugar eres tú, nosotros solo nos vestimos y estamos listos.—

Quizás yo me tardaba más por todo lo del maquillaje y el peinado, era la primera vez que no estaría sola al momento de arreglarme

—Si quieren pasarse por el directo estaremos en la habitación con la puerta más grande.— aviso y ambos asentimos —Los dejo acomodar todo.—

Salió de ahí dejándome sola con Roier, yo me senté en la cama

—¿Cuál es el plan ahora?.— cuestioné

—Vayamos con ellos, salir en un directo con ellos te ayudará para tu imagen.— dijo y tenía razón

Últimamente mis números iban en aumento, aún no llegaba a lo que tenía antes pero iba por buen camino para recuperar todo

—Vamos.— accedí

Estaba nerviosa por conocer a aquel par de argentinos, ellos probablemente también pensarían que yo era arrogante por lo que habrán escuchado de mí, no soportaría que me juzgarán también con tan solo verme

Roier me ofreció su mano y yo la tomé, salimos de aquella habitación sin soltarnos y cuando estuvimos frente aquella puerta simplemente suspiré

Entramos y las miradas se dirigieron a nosotros, inmediatamente solté a Roier por los nervios que me estaba causando todo, debía mostrarme segura

—No me la contés.— Carre se levantó de donde estaba para acercarse a nosotros y saludarnos

Sin siquiera conocerme me había abrazado, eso había sido bastante efusivo y me había dado un respiro, él almenos parecía amigable

—La parejita del año.— siguió cuando nos acercamos a los demás para saludarlos

Me senté donde antes estaba Carre, él ya estaba jugando con Roier y el Mariana.

Sentí la mirada de Spreen sobre mí así que lo miré de reojo

—¿Por qué te sentás tan lejos?.— habló por fin, como si nos conociéramos de toda la vida —Vení.—

Y así jaló mi silla para que quedara junto a la de él

—Eres extraño.— murmuré sabiendo que estába prendido el directo pero seguramente los fans estarían concentrados en los demás

—Y vos sos linda.— susurro cerca de mi oído, sentí mis mejillas arder

Era solo un halago más, no tenía por qué ponerme así

De nuevo alejé mi silla escuchando como soltaba unas carcajadas, al parecer Roier no había notado aquella interacción

𝐅𝐋𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐄𝐙𝐎 [Roier X Tú]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora