⁵²

8.3K 1K 277
                                    

Pasó el tiempo rápidamente, después de dos semanas ya me habían quitado la mayoría de aquellas maquinas y me habían pasado a una habitación normal donde mis amigos podían visitarme

—¿Cuando me traes a mi niña?.— cuestioné a Roier y él rió —Es en serio, si no me traen a Venecia iré yo misma a buscarla.—

A pesar de que ya había terminado el tiempo en aquel programa de ayuda; Roier había hablado con la jefa de administración para que nos dejara seguir viendo a la pequeña y ella había aceptado al ver como Venecia se había encariñado con nosotros

—No puedes hacer mucho esfuerzo aún, recuerda que hay que ir paso a paso.— dijo y suspiré

Estaba un poco cansada de estar ahí, no podía hacer tantas cosas y por eso agradecía tener a Roier, me ayudaba hasta a comer aunque eso si pudiera hacerlo.

—Voy a preguntarle al doctor si puedo traer a Venecia.— avisó y sonreí —Voy rápido.—

—Espera.— pedí al ver como estaba a punto de salir, simplemente me miró —¿Me ayudas a levantarme? Quiero ir al baño.—

Asintió y se acercó para ayudarme. Cuando estuve parada me ayudó a caminar hasta el baño y me dejó en la puerta

—Vé con el doctor, yo estaré bien.— indiqué sabiendo que probablemente su preocupación lo haría quedarse aquí afuera

—Iré pero volveré lo más rápido posible.— dijo y asentí

Besó mi mejilla y salió corriendo de la habitación. Entré al baño y cerré, realmente lo único que quería hacer ahí era verme en el espejo.

Después de la cirugía me sentía un tanto demacrada y me daba hasta pena que me vieran así. Bajé lentamente la bata del hospital qué tenía que usar y como era de esperarse tenía una horrible herida en el pecho

Inmediatamente me cubrí de nuevo, eso dejaría una cicatriz enorme.

—Ya volví.— escuché la voz de Roier fuera —¿Estás bien?.—

Salí del baño y él se acercó para ayudarme a regresar hasta mi cama. Me recosté mientras él me cubría con mi manta

—Me dijeron que si puedo traer a Venecia pero solo un ratito.— dijo cuando ya estaba cómoda —Y te tengo otra sorpresa.—

Lo miré atenta esperando a que me dijera de que se trataba.

A la habitación de repente entraron Carre y Spreen, mi corazón se aceleró al ver a este último

—Después de tanto tiempo boluda.— exclamó Spreen acercándose a mi cama para abrazarme, yo me quedé inmóvil

—Pará, no seas tan brusco.— regañó Carre jalando a su amigo para quitármelo de encima —Aún debe estar sensible por la operación.—

Mi mirada solo se podía posar en aquel argentino que simplemente sonreía como si estuviera alegre de verme.

Mi cabeza sabía que estaba enamorada de mi novio pero era como si estuviera en un dilema con mi nuevo corazón

—¿Estás bien?.— cuestionó Roier sacándome de mis pensamientos

—Si, solo es la sorpresa de ver a mis amigos después de tanto.— mentí

Spreen despeinó un poco mi cabello y eso extrañamente me llenó de energía

—Necesito hablar con _____.— exclamó Spreen a los otros dos —A solas.—

Roier me miró y asentí, no podía negarme a esta platica ahora.

—Aprovecharé para intentar que Roier se distraiga un poco, estar todo el día pegado a su novia debe ser agotador.— dijo Carre y prácticamente se llevó arrastrando a mi novio

Ambos de fueron dejándonos solos

—Todo esto pasó muy rápido.— dijo mirándome —¿Cómo te sientes?.—

—Bien, es un proceso físicamente doloroso pero todo se calma con los medicamentos.— respondí —Aunque si te soy sincera hay algo que es muy extraño.—

—¿Quieres contarme?.— preguntó tomando mi mano y haciéndome sentir un ligero escalofrío

De inmediato moví mi mano para que me soltara y él simplemente rió

—¿Te pongo nerviosa?.— cuestionó y reí sarcásticamente

—Obviamente no.— murmuré

—Que decepción, pensé que quizás estaba a punto de lograr causar algún sentimiento en vos.— dijo y lo miré mal

A lo largo de este tiempo supe que se había estado llevando mejor con Roier, quizás era porque se unieron al verme tan mal.

—Me surgió una duda.— habló y lo miré atenta —Ahora que tenés un nuevo corazón y la esperanza de que vivirás más.. ¿seguirás con Roier?.—

Estaba un tanto confundida con esa pregunta

—Según recuerdo habían tenido un problema antes de que te diagnosticaran tu enfermedad y por eso decidiste quedarte con él.— dijo —¿Ahora que harás?.—

Había olvidado totalmente eso, sabía que Roier se había comportado terriblemente conmigo en algunas ocasiones pero aun así me gustaba y no lo dejaría.

—Realmente no había pensado en dejar a Roier.— respondí y pude ver como su sonrisa se transformó en una mueca, eso de inmediato apretó mi corazón

Cualquier acción o gesto de Spreen era suficiente para causarme una emoción nueva y eso me empezaba a aterrar bastante

—¿Qué pasa?.— cuestionó —Te quedaste mirándome fijamente.—

De inmediato desvié la mirada, ni siquiera yo sabía lo que estaba pasando pero sin duda no era yo.... ¿Podría ser el corazón? debía preguntar si eso era posible

𝐅𝐋𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐄𝐙𝐎 [Roier X Tú]✓Where stories live. Discover now