𝐅𝐋𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐄𝐙𝐎 [Roier X Tú]✓

⁴⁶

Al día siguiente Roier salió temprano directo al hospital para recoger a Venecia mientras yo me arreglaba para ir con Spreen

Cuando estuve lista salí de casa, él ya me había pasado la dirección así que pedí un Uber que me llevara hasta allá, era un tanto lejos de mi casa.

Después de algunos minutos llegué, bajé de aquel auto y fuí hasta la casa. Toqué el timbre y segundos después salió Carre

—Spreen aun no se levanta.— avisó saludándome con un pequeño abrazo y me dejó entrar

—Me dijo que viniera temprano para el directo, le dije que no podía pasar muchas horas aquí.— dije riendo un poco

—Podés ir a levantarlo, te llevo a su habitación.— exclamó y asentí

Caminamos por aquella casa, sin duda era grandisima aunque no tanto como donde grababan "La casa Madrid".

—Por cierto.— habló mientras caminamos —Desde la última vez que spreen te vió creo que ha estado un poco triste.—

Sabía que la última vez había sido cuando se enteró de mi enfermedad, a pesar de todo ya nos habíamos tomado cariño

—¿Pasó algo entre ambos?.— cuestionó y negué rápidamente —¿Pensás que no puedo guardar un secreto?.—

Lo miré y él se detuvo, me caía bien Carre pero no quería ni podía decirle la verdad

—Es solo que...— intenté pensar en algo pero no encontraba alguna mentira —Yo estoy cuidando de una niña con Roier y eso quizás lo puso así.—

Quise confiar en que Carre habría notado la linda forma en que solía tratarme su amigo y que pudiera interpretar eso como un corazón rotó

—Su habitación es la siguiente puerta.— avisó aunque pude ver que no estaba del todo convencido

Asentí y él se marchó, caminé hasta la puerta y abrí. Spreen estaba ahí acostado entre todas esas cobijas

—Ey spreen.— empecé a moverlo un poco pero solo se quejaba

—Dale dejame cinco minutos más boluda.— dijo y después de unos segundos abrió los ojos de golpe —¿Que hacés acá?.—

—Mira la hora, dijimos que temprano.— reí un poco viendo como tallaba sus ojos

—Tengo que arreglarme.— avisó levantándose, pude ver que estaba en pijama —Podés salirte o querés ver como me cambio de ropa.—

—Tienes una forma muy rara de coquetear.— me burlé —Pero saldré porque tengo novio.—

—Osea ¿te sales porque tenés novio pero no porque no quisieras verme?.— cuestionó igual de burlón

Seguí riendo y salí de ahí, al menos ya estaba despierto.

Me quedé esperando fuera de su habitación, mientras tanto saqué mi celular, tenía varios mensajes de Roier

"¿Cuando vienes?
Nosotros te extrañamos
mucho"

Y seguido de eso habían fotos de él con Venecia.

"Dice Venecia que cuando
vengas para acá traigas
de mis chocolates
favoritos"

Reí un poco, Venecia no hablaba así que eso era más un pedido de él

"Acabando el directo
iré al hospital, ya te
lo había dicho"

"¿Y si mejor van
mañana al hospital?"

"Es que si nos haces
falta): nuestra familia
no está completa"

"Soy papá luchón de
dos criaturas"

"¿Cuales dos? Solo
te dejé con Venecia"

"¿Y Mushu?, madre
irresponsable y
olvidadiza, te voy a
funar"

"Noo, ¿otra vez?"

"Chistosita"

Ví qué Spreen abrió la puerta así que guardé mi celular

—¿Me veo fachero?.— cuestionó

—No.— respondí aunque siempre se veía bien

—Vos sos la única que cree que no me veo re bien.— dijo con aquel tono egocéntrico

—Soy la única que tiene buena vista.— discutí

Tomó mi brazo y me empezó a guiar por todos lados de la casa hasta que entramos a una habitación, era su setup de acá

—¿Cuál es el plan?.— cuestionó mientras ambos nos sentábamos en las sillas qué tenía ahí

—Prenderemos, jugaremos un rato y apagaremos temprano para ir al hospital.— conté y me miró dudoso —Ya te había contado sobre el chico del hospital qué quería conocerte.—

—Los hospitales me dan mala vibra.— dijo —No me gusta ir, solo fuí a verte a vos.—

—Haz esto por mi.— pedí y me miró no tan convencido —Haré lo que quieras, solo ve a verlo.—

Spreen pareció pensarlo un poco y después asintió un poco

—¿Harás lo que quiera?.— preguntó cómo si quisiera confirmarlo y asentí —Entonces lo haré.—

Sonreí contenta, al menos podría cumplir con la promesa que le hice a Ángel

—Antes de que prendamos directo quiero saber.— exclamó y lo miré atenta —¿Cómo inició realmente tu historia con Roier?.—

Me puse tensa de inmediato y recordé algo que me había dicho durante la fiesta después de los Esland...

—Podés apuntar a algo mejor.— exclamó y reí —Mantén tus ojos sobre mí.—

—Gracias pero no.— puse mi mano sobre su hombro —Merezco lo mejor y estoy con el mejor.—

Ahora él rió y me tomó de la cintura

—Ustedes traen algo y yo no pararé hasta descubrirlo.— se acercó de nuevo a mí

Era obvio que aun no lo olvidaba, simplemente me miraba como si esperara una respuesta

—Dijiste que harías lo que quisiera así que quiero respuestas.— exclamó

No sabía cuál sería su reacción al conocer toda mi historia con Roier