⁵³

8.2K 1K 327
                                    

Spreen seguía conmigo así que simplemente evadía su mirada

—¿Crees que el corazón pueda transferirme los sentimientos de Ángel?.— cuestioné y él rió

—No puedo creer que preguntes tremenda pelotudez.— exclamó mientras seguía riendo —Igual podés mirarme si me vas a preguntar algo así.—

Me giré un poco para verlo, tenía una sonrisa enorme y tan linda

—Olvidalo, traeme a mi novio.— pedí y paró de reír —Quiero salir a caminar un poco, el doctor dijo que podía hacerlo para recuperarme de la operación.—

—Pero podés caminar en tu habitación, es enorme.— dijo y negué

—Ve por Roier por favor.— volví a pedir, no quería seguir estando sola con él, no por ahora

—Voy a buscarlo, no te muevas de acá.— exclamó burlon, sabía que no tenía a donde moverme

Ví como salió de la habitación y me acomodé para intentar levantarme aunque sabía que no podía hacerlo sin ayuda.

Poco a poco estaba podiendo, siempre había sido muy independiente y esta no sería la excepción.

¿Qué haces?.— escuché la voz de Roier qué de inmediato se acercó para ayudarme a terminar de levantarme bien —No debes hacer mucho esfuerzo.—

—Tranquilo, no es como que se me vaya a salir el corazón por hacer esfuerzo al pararme.— reí un poco y me miró mal —¿O si?.—

Él tomó mi brazo para ayudarme a caminar un poco

—Spreen me dijo que querías salir a caminar un poco.— dijo y asentí —Ya sabes que yo no quiero que te pase algo ahorita.—

—Esto será como mi rehabilitación, ya quiero empezar a caminar para salir de este hospital rápido.— exclamé un tanto desesperada

Roier simplemente suspiró y después me sonrió un poco

—Por hoy solo caminaremos por el pasillo.— condiciono y sonreí también

—Es mejor eso que nada.— exclamé

Roier me agarraba e iba a paso lento para que no fuera complicado para mí, sin duda agradecía toda la paciencia que estaba teniendo conmigo

Salimos de la habitación y empezamos a caminar por aquel pasillo, afortunadamente para mí era larguísimo.

Empecé a ver a mi alrededor, habían bastantes personas que estaban en su propio mundo, era como si en un pasillo hubieran mil historias distintas

Tus ojitos brillan al ver a las personas.— exclamó Roier y lo miré, su mirada estaba fija en mí —Cómo si realmente amaras caminar por aquí.—

—Nunca le había prestado atención a lo bello que es caminar por el hospital.— murmuré

—La única persona que conocía que disfrutaba caminar por el hospital era...— contó pero lo interrumpí

—Ángel.— completé lo que estaba por decir, él asintió —Sobre eso hay algo que necesito contarte.—

Quería decirle mis dudas respecto a mis sentimientos nuevos

—¿Te sientes mal?.— cuestionó preocupado y negué rápidamente

Seguimos caminando hasta que al llegar a la esquina del pasillo pude ver a una pequeña corres hacia nosotros seguida por aquel par de argentinos

—¡Venecia!.— se escuchó que la llamó Carre y rápidamente la cargó antes de que llegara hacia nosotros

La acercó y la chiquita me extendió sus brazos, quería que la cargara

—No puedo.— le dijo pero ella aún insistía —También te extrañé.—

Venecia al ver que ni Roier ni yo la cargabamos empezó a llorar alarmando a Carre qué de inmediato la arrulló

—Che, tan grande y con esos berrinches.— murmuró Spreen y Roier lo miró mal

—Con la niña no.— dijo y reí —¿Por qué la trajeron?.—

—Cuando los fuí a buscar y estaban con ella.— le recordó Spreen —Carre quiso pasear con la nena y cuando los vió corrió para acá.—

Venecia aun lloraba y Carre seguía intentando que se detuviera.

—Mejor me la llevaré, si los sigue viendo así no se callará.— avisó Carre alejándose con la pequeña en sus brazos

Spreen solo nos sonrió un poco y por inercia también sonreí, después de eso corrió detrás de su amigo

—Debemos seguir caminando.— dije y Roier asintió haciéndome caso

—¿Qué fué esa sonrisita a Spreen?.— cuestionó

Me miró como si esperara una respuesta

—Es lo que intentaba decirte.— exclamé volviendo al tema que habíamos dejado pendiente —Siento que algo extraño me está pasando desde el trasplante.—

—¿Te sientes mal?.— cuestionó lo mismo de hace rato y negué de nuevo

—Creo que estoy teniendo algunos sentimientos que tenía Ángel.— conté y empezó a reír

—Es algo que no tiene sentido.— seguía riendo y lo miré mal —¿Estabas hablando en serio?.—

—Al principio creí que era una coincidencia pero estoy cada vez más segura.— murmuré —Quería hablar con el doctor para ver si era posible.—

—No creo que sea posible.— exclamó seguro de lo que estaba diciendo

—Eso es lo único que explicaría la emoción que me está dando caminar por el pasillo y sentirlo como si fuera lo único bueno de mi vida.— dije

—¿Tienes más pruebas que eso?.— cuestionó y lo pensé un poco

Sabía que lo que sentía por ver a Spreen podría ser algo relacionado pero no quería decirlo

—Tal vez estas confundida, recuerda que es algo nuevo en tu cuerpo.— exclamó y asentí no tan convencida de su respuesta —Si eso fuera cierto serias la fan número uno de spreen, así como lo era Ángel.—

Reí un tanto nerviosa, quizás todos mis sentimientos eran pasajeros.. Aún así no representarían algun riesgo para mi relación con mi tripón.

𝐅𝐋𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐄𝐙𝐎 [Roier X Tú]✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora