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Los primeros dos meses en Monterrey pasaron muy rápidos para mí; Roier no entrenaba diario pero los días donde tenia que hacerlo yo me la pasaba saliendo con Rivers, algunas veces incluso invitábamos a Ari y a Ama para armar un plan las cuatro

—Hoy me toca directo.— avisó Roier y asentí —Antes voy a comprar los boletos para España.—

Ya habían anunciado los combates así que pronto sería el "pesaje inicial" y la rueda de prensa así que tendríamos que estar en España.

—Yo puedo comprarlos.— propuse y él se negó

Desde que dejamos nuestra ciudad no había pagado nada, ni siquiera la comida y eso sin duda empezaba a molestarme. Aún seguía ganando un poco más que Roier pero él se aferraba a pagar el alquiler, las comidas, nuestras salidas y cualquier otro gasto que surgiera.

—Quiero comprarlos yo.— exclamé y me miró 

—Pero es un gasto por mi culpa, yo debo de pagarlo.— discutió 

Lo miré mal, desde que nos conocimos no habíamos tenido ninguna discusión por dinero, incluso sonaba a algo absurdo pero yo no estaba acostumbrada a que pagaran todo por mí y eso debía entenderlo él, me estaba haciendo sentir como una carga

—No te acompañaré si yo no los pago.— me aferré escuchando como suspiró

—¿A poco si?.— cuestionó y mantuve mi mirada firme —Es una pendejada.—

—Si es una pendejada déjame pagarlo.— seguí

Simplemente se dio vuelta y entró a su habitación para prender directo. Ahora si me sentía más que ofendida, ¿se había atrevido a dejarme en medio de una discusión?

—Que idiota.— murmuré para mi misma

Sabía que tardaría algunas horas así que para molestarlo empezaría a hacer ruido. Saqué mi laptop de mi habitación y desde ahí puse su directo, debía asegurarme el momento en que prendiera.

Pasaron algunos minutos y pude ver su hermosa cara en la pantalla así que era hora de iniciar mi plan. Fui a un pequeño armario que teníamos y saqué la aspiradora, la conecté para empezar a aspirar todo el lugar.

—No mamen chat, creo que Mulán está con la limpieza.— escuché desde su directo, dejé la maquina prendida pero me concentré en él —Creo que le pareció buen momento hacerlo cuando empecé directo.—

Con el ruido de la aspiradora fui directamente a mi habitación para sacar unas orejeras para protegerme del ruido que seguiría, cuando me las puse fui a la cocina para poner lo necesario para una malteada en la licuadora y la prendí.

Con ambos ruidos combinados decidí apagar mi laptop, no podría escuchar su directo por las orejeras así que no tendría sentido seguirlo viendo. Sin apagar ninguno de los aparatos decidí entrar ahora por mi bocina y puse mi canción favorita a todo volumen, el ruido era tanto que incluso podía escucharlo con mis orejeras.

Pocos segundos pasaron hasta que ví a Roier salir de su habitación para  apagar primero la licuadora y después la aspiradora

—¿Qué crees que haces?.— vi que ahora apagó la bocina así que me quité las orejeras 

—No te escuché.— me giré para otro lado

Él suspiró y tomó mi cara para que lo mirara

—¿Es algún tipo de berrinche?.— cuestionó y lo miré mal —Deje a mi chat viendo un video mientras venía a ver que te estaba pasando.—

Me crucé de brazos aún manteniendo mi peor mirada sobre él

—¿Sigues así por lo de los boletos?.— cuestionó entendiendo por fin 

—Me dejaste con el tema y te fuiste contento a prender directo.— recordé —Obviamente iba a buscar la manera de joderte al menos un poco el directo.—

—Tú sabes que es feo cuando te quieren joder los streams.— dijo y simplemente le saqué la lengua —Te dejaré pagar con una condición.—

Sonreí contenta, al menos había logrado convencerlo en algo

—Dame de la malteada que estabas preparando.— exclamó recordandome que había dejado eso en la licuadora, asentí besando su mejilla —Seguiré en mi stream.—

Se despidió con una sonrisa y entró de nuevo a su habitación. Cualquier persona estaría contenta de dejar que su novio le pagara un viaje a España pero yo no era así, amaba que compartiéramos las cargas económicas 

Fui a servirle un poco de malteada y después se la llevé a su habitación, él estaba hablando con su chat así que simplemente hice un pequeño ruido para llamar su atención. Al verme con aquel vaso me hizo una seña para que avanzara así que lo hice, me acerqué hasta salir en su directo, saludé a la cámara y dejé el vaso sobre su escritorio 

—Me voy.— exclamé pero Roier tomó mi mano para impedírmelo  

—Quédate.— pidió jalándome un poco para sentarme en sus piernas, yo reí —Todos extrañamos a  la tripona.—

Besó mi mejilla y yo miré el chat, todos estaban de acuerdo con eso

—Dije que no volvería a mis directos en un rato largo.— recordé con una pequeña sonrisa

—Muy bien dicho, no volverías a tus directos pero ahora estas en los míos.— discutió él con un punto totalmente valido 

Yo quería quedarme pero sabía que si lo hacía de una u otra manera terminaríamos contando que estaría como presentadora en la velada, nosotros somos unos chismosos y había acordado con Ibai que sería una sorpresa para el día del evento

—Tengo que seguir con la limpieza de nuestro nidito de amor.— reí haciendo que Roier también riera 

—Ni siquiera estabas limpiando.— susurró y le di un pequeño golpe por entrometido

Me levanté y salí corriendo de ahí, necesitaba alistar las cosas para el viaje que tomaríamos en algunos días. Quería que esta vez pudiéramos tener varias salidas recorriendo la ciudad y no solamente fuéramos por trabajo.

𝐅𝐋𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐄𝐙𝐎 [Roier X Tú]✓Where stories live. Discover now