Capítulo 19.

1.1K 38 6
                                    

 

-¡Álex!

Ops! Esta imagem não segue as nossas directrizes de conteúdo. Para continuares a publicar, por favor, remova-a ou carrega uma imagem diferente.

-¡Álex!

Corro hacia mi mejor amigo y me engancho en su cuello, haciéndolo reír.

-¡Livie!

Él rodea mi cuerpo con sus brazos soltando la maleta que traía con él, aspiro su olor y sonrío.

-Jo, te echaba de menos, gordi.

Le doy un beso en la mejilla, él simplemente respira.

-¿Dia de hermanos?

-Cómo lo sabes.

Le guiño el ojo y camino agarrada a él hacia la salida del aeropuerto, ilusa, cómo no va a haber periodistas aquí si es lunes post carrera.

-Mierda.

Álex se quita rápido la sudadera y me la pone, uso la capucha para taparme lo máximo posible pero aún se puede vislumbrar parte de mi pelo rubio. Él camina a paso rápido con una mano en mi espalda, ninguno de los dos habla hasta llegar al coche y sentarnos.

-No me acordaba de esto, lo siento.

-No te preocupes, rubia, todo okay.

Me guiña el ojo y pone una sonrisa graciosa, arranca el coche, mi mano va casi por inercia hacia la radio, la enciendo y la primera emisora que pilla es Europa FM. en la cual suena una canción de un cantante que ha saltado a la fama este año.

-¿Conoces esta canción?

-No tengo tiempo de escuchar música, Liv, pero si te gusta dale.

Le doy más volumen a la radio y el ritmo suena por los altavoces del coche, haciéndolo vibrar. Yo canto sin vergüenza mientras que Álex sólo se rie de las acciones que hago.

Llega un momento de la vida en la que te das cuenta de quién esta ahí siempre lo está. Ahora mismo me doy cuenta de golpe de las cosas, nada es cómo antes. En un momento es el boom, todo es distinto, tu mejor amigo es de repente un gran piloto, con un campeonato y miles de lesiones a la espalda; pero cuando estoy con él así, nosotros dos sólos, somos esos niños de once años que corrían a diestro y siniestro por cada rincón de Cervera.

-Te quiero.

Hablo rápido, sin pensar, me sale sólo.

-¿Qué?

-Eso, que te quiero.

Él me mira por un momento y me sonríe, pone su mano sobre mi pierna y la aprieta cariñosamente. No sería nada sin Álex, todo el mundo lo sabe.

-No sé que sería de mi sin ti, rubia.

-Estarías bien, igual mejor. Pero luego dirías "oh necesito a una rubia que me ayude con mis ligues" blablabla.

Lavanda || Marc Márquez (Completa)Onde as histórias ganham vida. Descobre agora