En cuanto la vi caer al suelo supe que algo andaba mal. Traté de acercarme a ella pero mis pies no me lo permitieron. Forcé mis pies para que se movieran pero nada sucedió.
Y entonces comencé o a ventear fuerte, y caí al piso. La corriente de aire helado me mantenía en el suelo, pero cuando aminoró me puse de pie y me eche a correr hacia ella, pero no estaba allí. Ni ella, ni su madre, ni su abuela, ni Margo, ni Alexia.
-¡EVANGELINE! -grite tan fuerte que sentí mi garganta rasgare mientras lo hacia.
-¿¡Qué paso!? -grito alguien.
-¿¡Dónde están!? -alguien se le unió y así fueron surgiendo las preguntas al aire. Sentí a alguien acercarse a mi, era la reina roja.
-No. ¡NO! -grito. Y comenzó a caminar en círculos desesperadamente.
-¿Qué? ¿Qué pasa? -le pregunta su hermana.
-Hay algo mal, lo puedo... Sentir, ¿tu no?
-Si, es como si algo me fuese arrebatado y como si tuviera una herida por la cual están succionando todo lo que quedo dentro.
-Exacto. Pero siento que es algo mil veces peor... -y cuando termino de hablar el cielo se volvió a tornar gris y comenzó a llover. -Tenemos que hablar con Absolem, creo saber lo que pasa, pero debemos ir con él. Tu por igual chico... -dice y me señala.
Resulta ser que Absolem es una enorme oruga azul que usa lentes y fuma de una pequeña máquina con una manguera.
-Tiene razón, su majestad, Margo hizo algo allá fuera, destruyó las fronteras de las dimensiones... -dice con demasiada calma para las palabras tan horrorosas como aquellas.
-¿Qué mal puede hacer eso? -pregunta esta vez la reina blanca. La oruga exhala y sale humo espeso de su boca.
-La pregunta en este caso sería, ¿qué no puede hacer? -responde con la misma paz y paciencia. -Todas las fronteras están rotas, es como si las bestias o especies tuviesen libre albedrío...
-Suena peor de lo que pensé... -respondió la misma hermana en un susurro.
-¿Qué debemos hacer para detenerla, entonces? -volvió a preguntar la roja.
-No pueden. -responde y su calma me hace llenar de furia todo mi intestino.
-¿¡Cómo que no podemos!? -grita la roja.
-No pueden hacer nada, sólo una hija pura de Acareshida podrá enmendar lo que su hija desviada provoco... -¿Quien rayos se suponía que era Acareshida ahora?
-¿Evangeline? -salió más como una pregunta que como una afirmación.
-Es la única que queda del linaje... Al menos del puro.
-¿Pero y que hay de Margo? -inquiere la blanca.
-Ella no es pura desde su juventud cuando decidió volverse contra la luz... -explica la oruga. Todos nos adentramos en un silencio sepulcral, nuestras mentes a mil por hora, procesando toda la información.
-¿Cómo lo solucionamos ahora? -el Sombrerero pareció hablar por primera vez en la última hora.
-No va a ser fácil... -responde la oruga y le da otra calada a la manguera. -Tendrán que buscar a la chica y hacerla volver para que repare las frontera...
-Pero no podemos cruzar los límites, somos criaturas fantásticas... -intervino el Sombrerero incluso antes de que la oruga terminara de hablar.
-Para eso les tengo dos soluciones; una es que ustedes son medio humanos, pueden cruzar las fronteras con un tiempo limitado, y segundo, ya no hay fronteras... No límites.
-¿Entonces.... Nos estás diciendo que la solución sería salir a Underland a buscar a Evangeline para que venga a confeccionar nuestras fronteras para que los mundos vuelvan a estar en orden o de lo contrario habrá tanto desastre que todos acabaremos extintos? -resumió la reina roja todo aquel lío en una sola oración. -Será fácil...
-No lo creo, querida. -contrarresto la oruga. -La joven en cuestión tiene una pequeña dificultad... Sus recuerdos les han sido arrebatados y remplazados con otros de felicidad, igual que los de su madre... Tendrán que convencer a ambas de que vengan en nuestra ayuda o de lo contrario estaremos acabados... -termino diciendo y vuelve a dar una calada.
-Sólo conozco a una persona que será capaz de convencerla... -dice la blanca y sus ojos azules hielo están fijos en mi cuando lo dice.
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Perdida en Ninguna Parte (En edición)
Fantasy¿Qué harías si un día entrarás en otra dimensión, a otra perspectiva, donde la realidad y todo tu mundo, todo lo que creías real, es sólo un espejismo? Evangeline Mills es una chica rara, apartada; ve cosas donde no las hay, cree más en ella misma y...