Paz

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-¡Sean bienvenidos a!:

"El que sabe, sabe"

¡El único programa de televisión que le da a sus competidores la oportunidad de poder ganar cien mil dólares y que les garantizamos que si pasan nuestras pruebas podrán recibirlos!

Sinceramente me sentía tonta estando ahí, mi incomodidad y la pena estaban tan ligadas a mi vergüenza que solo podía desear que me tragara la tierra pero cada vez que quería salir corriendo de ese sitio volteaba hacia atrás, veía los días de dolor, de felicidad y de esperanzas, todo eso me daban la seguridad de seguir adelante y justamente el presentador lo acababa de decir: "si podía superar sus pruebas me iban a dar prácticamente el dinero" así que no podía perder, éramos seis participantes en total, un día antes les habíamos pedido a nuestras hermanas que alejaran a cualquiera de la familia de le televisión, Lana y Lola nos aseguraron que en casa habían escondido el televisor, Lori estaba con Linda en el restaurante de papá y había cortado la electricidad mientras que Bobby no dejaba que nadie entrara, todo estaba planeado, las cartas estaban sobre la mesa, habíamos ido a tantos centros comerciales que recordaba literalmente hasta el precio del más pequeño chicle que pudieran vender y lo mejor de todo es que tenía a Lincoln, estábamos juntos en esto y como yo no lo iba a dejar él también iba a hacer lo mismo.

-¡Bueno pero basta de escucharme, ahora vamos a presentar a nuestros competidores! Y recuerden queridos televidentes estamos en la sección de parejas así que la primera de todas, ellos vienen desde Nueva York reciban a Sack y a Doroty, ambos tienen la edad de veintinueve años y sueñan con la vida de ricos que todos queremos. La segunda pareja viene desde Ohio y que su apariencia no los engañe pues juran que su amor es el mejor así que denle la bienvenida a Lincoln y a Lisa. Por último la tercera pareja viene desde Texas y han venido aquí a cumplir sus anhelos así que denles una cálida bienvenida a Will y Kate!

El público que se encontraba en el lugar estaba eufórico, aún no creía que estaba en la televisión y aunque no era de la forma que yo quisiera ahora miles de personas me veían, esa presión derrotaría a cualquiera pero no a mí, no iba a perder contra simples mortales ya que Lincoln y yo teníamos cerebro de nuestro lado.

-¿Listos para comenzar? Primero a base de un juego de piedra papel o tijeras decidiremos el número de pareja que se les otorgará por el resto del concurso.

Así nos pusieron a jugar mujeres contra mujeres y hombres contra hombres, nosotros quedamos como segunda pareja y para mí eso significaba que no estaba en posición ni buena ni mala, al menos no seríamos ni los últimos ni los primeros y eso ya era muy relajante para mí, las otras mujeres me vieron y hasta se mofaron de mí pero pronto iba a demostrar que no era fácil de derrotar.

-Ahora que ya todos tienen su número ¡Pasemos al siguiente juego! También llamado:

¡Gira la ruleta!

Explicaré las reglas del juego, como pueden ver a vista de todos ésta rueda no es mecánica porque al parecer nos prohibieron hacerla así jajaja así que el azar y su fuerza dependerá de ustedes y del destino, en la ruleta están seleccionadas varias preguntas las cuales si contestan correctamente se les sumará el doble de su cantidad actual de dinero que justo ahora es de diez dólares, girarán cada quien seis veces y la pareja que tenga el menor puntaje quedará descalificada, además de que hay casillas que de igual manera les quitarán el dinero ganado así que cuidado con esas pero se me olvidó decirles que también una pregunta errónea les quitará el doble de puntos de los que tienen así que son simples sumas y restas, si esta primera pregunta la contestan mal quedarán en menos diez dólares y eso no es nada bueno así que ¡A jugar!

Y así la primera pareja pasó, primero iríamos las mujeres y después los hombres, sus giros me darían información sobre lo que sucedía con la rueda, las preguntas eran de conocimiento matemático del nivel de preparatoria, nada difícil para mí así que aunque diera lo mismo responder una ecuación a la suma de dos más dos prefería la sencilla además de evitar las casillas que me quitaban todo el dinero, la primera pareja obtuvo su doble de puntos y luego seguí yo, Lincoln me dió ánimos solo para engañar al presentador pues yo ya tenía la ecuación lista para jugar, solo el hecho de sacar la raíz cuadrada del radio de la ruleta por la fuerza centrípeta que yo ejercía entre la masa de cada panel que contenía cada pregunta me daría la velocidad del punto exacto y con ello podría calcular el momento de acción de la casilla que yo iba a elegir y todo se resumía en hacer el movimiento que yo quería, lo hice y fácilmente caí en la casilla que preguntaba:

Eres la C8H11NO2 que acelera mi corazónWhere stories live. Discover now