¿Me concedes esta pieza?

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-¡NO! ¡GUARDA SILENCIO! Estoy con una paciente, a ella le llamé cariño ¡Siempre me haces enojar Carol!

-Es el trabajo de una hermana mayor jajajaja sólo quería molestarte un rato para aliviar nuestras penas.

-Si, si, eres una tonta.

-Oye tampoco es para que te enojes. Aunque realmente te llamaba por el asunto de esta noche.

-¿Qué pasa Carol?

-Se trata de mi bebé, no encontré niñera para cuidarlo toda la noche y mi esposo y yo queríamos disfrutar un poco de la fiesta, teníamos ganas de salir y divertirnos unas horas. Mamá y papá no irán y dudo que lo hagan después de que el último ciclón les arruinó la casa, Tim y su esposa no pueden porque también estarán con nosotros así que me preguntaba...

-No cuidaré a Annie de nuevo ¡Es tu hija, cuídala tú!

-¡Para tu información siempre cuido de mi bebé, Paige! Pero esta fiesta no se repetirá, tampoco será extraordinaria pero siendo mamá las oportunidades de salir son muy escasas, además seamos sinceras y de ir estarías en la esquina sola leyendo en tu teléfono mientras ignoras a los hombres que tratan de invitarte a bailar. Escucha hermana sé que no soy quién para decirte esto pero ya es tiempo de que sientes cabeza, tengas a alguien a tu lado y que en algún momento formes una familia, estoy consciente que no lo crees relevante pero si me dejas decirte algo y espero que no me lo tomes a mal no estoy segura de que estés ahí afuera sola sin nadie que te apoye incondicionalmente todo el tiempo...

-¡Ya lo sé!

-¡Entonces deberías hacer algo! Eres una mujer muy hermosa, tienes excelentes atributos, extraordinaria, inteligente, considerada y mereces una vida igual a ti, es más ¿Qué pasó con esa cita a ciegas que mamá te organizó? ¡De seguro lo mandaste al carajo! ¿Y esta vez por qué? ¿Acaso bebía extraño el vino? ¿O será que se golpeó el brazo y gritó como niña? ¿Tal vez su risa es extraña? ¡Sea como sea siempre terminas por sacarlos de tu vida por el más simple error! No tienes la obligación de cuidar a Annie pero tampoco tienes nada mejor que hacer Paige ¿O me equivoco?

-Si... Te equivocas... Porque yo... Yo sí iré con alguien hoy...

-¿De verdad? Por favor Paige sé que te molesta lo que te digo pero tampoco deberías mentir...

-¡No miento!... Al último patán lo dejé porque... Porque se la pasó toda la cita ovacionando a otra chica.

-¡Jajaja claro Paige!

-¡No, es en serio! Era una mujer hermosa de piel blanca, vestido oscuro, mirada amenazante, labios gruesos y voz angelical, tuve la oportunidad de saludarla... Y si era muy linda pero tampoco era para que se la pasara toda la cita hablando de cómo quitársela y cito "a ese lisiado idiota de su novio".

-Paige no tienes que inventar esa historia para encubrir que no quieres cuidar a mi hija.

-¡No es mentira!

-Bien, si no lo es espero conocerlo esta noche en la fiesta de Tim y más te vale que sea alguien agradable porque la "palanca" que hizo a Tim entrar en el bufete estará ahí ansiosa de conocer a nuestra intachable familia, más te vale que tu galán no sea inventado porque si no nuestro hermano lamentará tus mentiras, nos vemos.

-¡Nos vemos!- la llamada terminó con la plática y sobretodo con Paige -¡Ahhh! ¡Esa idiota!- sus ojos saltones se voltearon a un lado al descubrir que su pequeña amiguita estaba a un lado escuchando la plática y claro que también su reciente grosería -¡Perdón! Lulu olvida todo lo que dije.

-¿Olvidar qué?

-Lo que yo... Oh... Gracias...

-Señorita Paige ¿Está bien?- tal vez viniera en los genes o puede que su corazón supiera lo que pasaba a su alrededor pero algo le dijo a Lulu que alguien necesitaba un abrazo. Sin vacilar se sentó sobre sus piernas justo encima de la cama de su psicóloga, posó firmemente sus lindos ojos en vitrinas sobre la amiga de su padre esperando la historia.

Eres la C8H11NO2 que acelera mi corazónWhere stories live. Discover now