Capítulo 16

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- ¡Y bienvenidos a Radio-Apocalipsis! Transmitiendo en vivo desde la Universidad de... ¡auch!

- Una ubicación secreta, ¿no es así, Riley?

- Lo que tú digas, Jay...

- Como sea, esperamos que todos se encuentren sanos y a salvos. Recuerden mantenerse alejados de las lluvias ácidas, son muy peligrosas, de la misma forma traten de beber solo agua embotellada...

Jafet, el copiloto de Alex, subió el volumen del radio mientras salíamos de la ciudad. Los bajos edificios desaparecieron y comencé a admirar grandes llanuras amarillas, por la arena y la hierba seca.

- Y bueno, en las noticias de hoy... Estados Unidos se convierte oficialmente en el último país no insular de américa, luego de que él día de ayer el gobierno peruano declarara cese de funciones, luego de que casi todos los funcionarios hubieran desaparecido. Recordemos que hace un mes; México, Colombia, Ecuador y Uruguay, también se declararon como naciones inexistentes. Sin embargo, se espera que pronto se haga el anunció y el gobierno norteamericano también cese funciones –anunció Jay.

- Así es, pues como les hemos comentado la última semana, según reportes de Washington, esta está a punto de caer, luego de que las hordas de zombis comenzaran a inmigrar al sur a causa del frío a finales de noviembre. Sin embargo, el vocero del presidente...eh... ¿Quién es, Jay?

- Creo que era Milton, Riley.

- No, estoy muy seguro de que Milton fue el de Octubre.

- No esa fue Nielsen, la interina luego del suicidio de Ross.

- ¡Carson! ¿No?

- Sí, Carson.

- Bueno, el vocero del presidente Alex Carson, declaró en un comunicado de prensa su intención de mover la capital a California. Sin embargo, esto es algo que se viene arrastrando desde hace tiempo.

- Así, es amigo mío, es solo cuestión de tiempo antes de que hagan el anuncio...En otras noticias, Cuba dará asilo político a Miembros de la Corona Británica "hasta que las cosas se calmen en Inglaterra". Así lo hizo saber la presidenta, Mariela Castro, el día de ayer. Añadió que continuarán dando asilo político a todos los ciudadanos hispanoamericanos y que próximamente abrirán sus puertos a inmigrantes de toda américa, europeos y africanos. Además, en su comunicado, presumió que el programa de refugiados cubano venía siendo un éxito.

- Deberíamos huir a Cuba, ¿No, Jay?

- En algún momento, amigo mío. También, el gobierno ruso volvió a lanzar más misiles nucleares en sus fronteras, tanto para eliminar a los infectados como para llamar la atención de estos y alejarlos de las grandes ciudades...las que quedan. Con esta, ya son veintidós las bombas detonadas por los soviéticos desde que inició el apocalipsis. Cabe destacar que estas últimas seis, lanzadas la semana pasada, fueron de mayor fuerza que las anteriores.

- Un desastre...

- Los efectos de los ataques rusos han venido apareciendo desde las primeras explosiones en septiembre, como aquel devastador terremoto en Japón o ese gran huracán en el pacífico. Así que más nos vale estar atentos.

- ¿Y han funcionado sus ataques? –preguntó Riley.

- Los primeros definitivamente no lo hicieron, pero desde que comenzaron su nueva estrategia, si, han disminuido sus ataques en las grandes ciudades, aunque las condiciones ambientales en el país han estado deplorables.

- Se acerca el invierno ruso y parece que ni los zombis se salvan...ahora nuestro bloque musical.

- ¿Y...cómo vamos? –peguntó Derek tiempo después por la radio de la Caravana, interrumpiendo la canción de reggae que Jafet venía tarareando con mucho sentimiento.

- Amigo, no tiene mucho que salimos de Texas –le respondió Alex riendo- Aún no llegamos a Las Cruces...

- Ya sé, no soy idiota. Me refiero a que si salimos a buena hora. Tenían un itinerario, ¿no? ¿Vamos a tiempo?

Esta vez fue Jafet quien rio antes de responderle.

- ¿Itinerario? ¿Qué crees que es esto?

- Yo solo preguntaba, no es razón para que...

- Derek, calma –se escuchó a Alan de fondo.

- Olvídenlo –se rindió el chico.

- Si, olvídalo, este canal es solo para emergencias –le respondió Jafet con tono serio.

- ¡Chicos! –esta vez fue Ellen quién llamó por la radio.

- ¿Qué? –preguntó Jafet molesto.

- ¿Escucharon eso?

Al escuchar esas palabras, todos en la Caravana guardamos silencio en espera de poder oír alguna cosa fuera de lo común. Pero cuando lo único que pude escuchar fue el sonido de las llantas deslizándose por el asfalto de la carretera, decidí moverme en el sofá para poder mirar por la ventana detrás. Me esforcé por encontrar algo relevante, pero nada. Seguíamos cruzando por esas planas llanuras llenas de arena y campos de cultivo secos, a lo lejos algunos pequeños montes, riscos y mesetas. Nada preocupante.

- No escucho nada – respondió Alex.

Jafet se encogió de hombros y respondió por el radio.

- ¿Qué ocurre? ¿Todo bien?

Silencio.

- ¿Hola?

Miré por espejo retrovisor y pude notar que la van se había detenido algunos metros detrás de nosotros. Algo andaba mal.

- ¿Chicos? ¡Respondan, puta madre!

Todos comenzamos a preocuparnos. Alex frenó también.

- Quizás...

No terminó la frase, pues el ensordecedor sonido de un francotirador lo dejó sin habla. Todos nos arrojamos al suelo, mientras los disparos se multiplicaban y los cristales reforzados comenzaban a agrietarse.


Pandemia Parte IIWhere stories live. Discover now