Pandemia Parte II

Capítulo 39

- ¿Así que van al sur? -preguntó Amanda-. ¿Qué esperan encontrar allí? Si saben que México es un desastre, ¿no?

- Su gobierno no duró mucho, lo peor fue en la frontera, los cárteles tomaron el control -afirmó Cara-. Yo evitaría toda esa zona.

- Vamos hacia Texas -explicó Alex, quien caminaba detrás de mí, al final de la fila.

- ¿Texas? ¿Qué queda en Texas? -preguntó Cara confundida-. Esa es tierra de nadie, llena de bandoleros y pequeños grupos que luchan por el control.  Por no hablar de los zombis... es como el maldito viejo oeste.

- Es una historia complicada -expliqué.

- Tenemos tiempo.

- No los presiones, Cara -se quejó Amanda-. No quieren hablar de ello.

- No hay problema -respondió Vanessa-. Pero en serio es una historia complicada, vamos a nuestro viejo campamento, tenemos que llegar antes de Año Nuevo y avisarles que están en peligro, trataremos de evacuar y llegar a Cuba.

Me sentí nervioso, ¿era buena idea contar tanto a unas desconocidas?

- ¿A Cuba? Suerte con ello.

- ¿Qué quieres decir?

- Hay pocos países en el mundo que siguen funcionando: Finlandia, Rusia...pero Cuba...todos quieren ir allá, saben que es el que tiene mayores probabilidades de sobrevivir. Hay otras islas que se mantienen limpias, como Australia o Nueva Zelanda, pero incluso ellos se están desmoronando a su forma.

- Todo el mundo quiere ir a Cuba -replicó Amanda-. Desde hace semanas están evacuando a grandes cacas del gobierno a la isla, en secreto. Por ahora, es el refugio más prometedor...sus fronteras están cerradas, son muy selectivos con quienes dejan arribar...

- Digamos que tenemos una forma de entrar -afirmó Alex-. Pueden venir, si quieren.

Cara rio.

- Agradezco la oferta, pero tenemos cosas de las que ocuparnos por aquí. 

- ¿Qué está sucediendo en la ciudad? ¿Lo que dijeron del chico en los altavoces era cierto? -preguntó Alex.

- Es una historia complicada -replicó Cara con una sonrisa.

- Que graciosa – respondió Amanda con sarcasmo-. Desde hace semanas la ciudad está en caos. Al principio decretaron toque de queda durante semanas para contener los pequeños brotes en los hospitales, luego utilizó las lluvias ácidas como excusa. Cuando la ciudad estuvo amurallada y comenzaron a llegar personas de todo el país, las cosas se calmaron un poco...

- Hace tiempo que Harris dejó de seguir instrucciones desde Washington...

- No sabíamos...

- ¿Cómo saberlo? ¿Supieron del apagón?

- En Septiembre, las redes sociales solo...se cayeron...tampoco es que hubiera muchas publicaciones y lugares con internet -recordó Vanessa.

- Bueno, sucede que el ejército, bajo ordenes de Harris, se deshizo de todos los servidores en el estado...desde entonces es difícil saber lo que pasa allá afuera y que el resto sepa lo que ocurre aquí adentro.

- Bueno, pues ahora que Washington cayó, se proclamó presidente...

- ¿Y el problema está en...? -preguntó Vanessa.

- Harris es un idiota, un corrupto desde antes de la Pandemia. Y ahora está a cargo del país, o lo que queda... la ley marcial ya no es necesaria desde hace tiempo. Los zombis ahora están fuera de las ciudades, pero él se niega a decretar algo distinto. Hace unas semanas, Seamus, un chico de los barrios bajos salió de su casa para conseguir algo de alimento...