Los mordedores

Capítulo 5: "Rescate"

Salieron de la azotea, y todos debatieron sobre que hacer con Philip:

    -No está bien, ya ha matado unas 5 o 6 veces, mentalmente estará destrozado, no sabemos en que puede acabar si seguimos así -Dijo Mª José-

Bruna corrió hacia ellos y anunció:

    -Veo a mi novio por ahí a lo lejos, creo que necesita ayuda, hay otras personas con él, por favor, id a por él.

Raúl dijo:

    -Alejandro y yo saldremos a la calle, Rubén se encargará de la puerta y Philip... Philip se quedará aquí, vigilad lo para que no haga ninguna tontería...

Todos estaban de acuerdo con el plan, Bruna les dio instrucciones sobre como debían ir para llegar hasta la posición en la que se encontraba su novio.

Ambos avanzaron con sumo cuidado para no toparse con nadie, los caníbales eran peligrosos y las personas eran demasiado imprevisibles, podían ser amistosos u por otra parte podían ser muy hostiles.

Se escondieron detrás de un coche, y a pocos metros vieron como un grupo de unos 4 individuos le daban una paliza a una persona desconocida, o tal vez era un enfermo, ya que no se distinguía con claridad.

Al poco tiempo de estar allí aquel grupo se percató de su presencia y fueron a por ellos, Alejandro se abalanzó dos de ellos, y Raúl sobre los dos restantes, el sujeto que estaba en el suelo se levantó, y con una patada en la cara tumbó a uno de los agresores.

Entonces la situación se puso seria, los maleantes sacaron cuchillos y navajas, obviamente tanto Raúl como Alejandro retrocedieron unos pasos.

Solamente aquel desconocido les hizo frente, eran tres y él uno solo, pero aún así se mantuvo firme ante la amenaza que se le plantaba delante de él. 

Los tres hombres se lanzaron hacia él, y al principio se defendía con soltura, pero al final le pusieron un cuchillo en la garganta, una ráfaga de disparos acabó con dos de ellos y otro cayó herido al suelo, Alejandro y Raúl miraron hacia el lugar de origen de aquellos proyectiles, y el causante no fue otro que Philip:

    -¿Cristian?

    -Socio ¿Estás bien?

    -Claro, pero eso debería preguntártelo yo hombre -Respondió Philip riéndose-

En ese momento uno de los maleantes se levantó y fue a clavarle un cuchillo a Philip, pero Cristian se puso delante, con el cuchillo clavado Cristian le propinó un puñetazo a su agresor, Philip le apuntó:

    -¡Hijo de puta, vas a morir cabrón! -Gritó Philip lleno de rabia-

    -Philip, tu colega se desangra, no tenemos tiempo para esto, deja que se vaya -Dijo Raúl preocupado-

    -Ya te has cargado a suficientes, vamos a llevarle al colegio ¿Vale? -Decía Alejandro tratando de tranquilizar a Philip-

Philip miró, y se percató de que a lo lejos había un caníbal, el cual avanzaba lentamente hacia ellos.

    -Si, tenéis razón, vamos a llevárnoslo al colegio, este lugar no es seguro, por cierto, tu de esta no te libras cabrón -Acto seguido le pegó un tiro en la pierna-

Mientras se retorcía de dolor Philip y el resto recogieron a Cristian, pero Philip observó que el caníbal aumentó su velocidad, hasta tal punto de que corría una barbaridad, Philip se preocupó y aceleraron el paso, pero el caníbal se detuvo ante el malhechor con la pierna herida, aquellos gritos de dolor y agonía se quedaron durante u tiempo en la cabeza de Philip...

A los pocos minutos llegaron a la puerta, Rubén la abrió para que el grupo pudiera entrar:

    -Quitad de ahí, necesitamos tumbarlo en algún sitio -Decía Alejandro mientras soplaba por cargar a Cristian en sus brazos-

Le tumbaron en una mesa, Philip se quedó un poco apartado de aquel lugar, Bruna, la novia de Cristian, era la que más cerca estaba, con lágrimas en los ojos pedía por favor que alguien hiciera algo para salvar la vida de su novio, Raúl estaba indeciso, no sabía que hacer, entonces se metió Maycol le quitó el cuchillo lentamente, Cristian se hacía el duro, pero era inevitable gritar, pidió una camiseta o algo para tapar la herida, Rubén se la quitó sin ningún problema, Maycol hizo un apaño y consiguió tapar la herida con éxito:

    -Alguien tiene que presionar la herida...

    -Lo haré el tiempo que haga falta- Dijo Bruna muy decidida-

Mientras tanto Mª José se acercó a Philip:

    -¿Estás bien? 

    -Si, no hay de que preocuparse -Dijo mientras regalaba la mejor de sus sonrisas-

    -Puede que engañes a todos, pero es conmigo no funciona, ahí lo dejo -Dijo mientras se marchaba-

    -Philip la cogió del brazo- ¿Y cómo quieres que esté? ¿Es esta la vida que nos espera? ¿Salir a por comida y matar a quien encontremos? Yo no estoy preparado para hacer algo así

    -Te necesitamos Philip, en el caso que tengamos que vivir así, confío en tí, has demostrado que harías cualquier cosa con tal de protegernos, pero no lo tienes que hacer tu solo, piénsalo

Acto seguido Mª José se fue al lado de Bruna. Rubén estaba temblando de frío:

    -Toma -Le dijo Lydia mientras le pasaba una chaqueta-

    -¿Por que me pasas esto? No tengo frío -Dijo Rubén algo orgulloso-

    -Lo que tu digas Rubén, yo la dejo aquí, cuando quieras la coges.

Entre todo el revuelo causado por la herida de Cristian se veía al fondo de la clase a Candela junto con Alejandro:

    -Dios, me alegro de que estés bien -Decía Candela algo aliviada-

    -Pues claro, si necesitan 500 caníbales para acabar conmigo ¿Qué te habías creído?

    -Escuché disparos y me asusté, me alegro muchísimo de que estés bien -Dijo mientras le daba un fuerte abrazo-

    -Contrólate, podría vernos alguien y pensar cosas que no son -Dijo medio apartándola- Pero... Ahora que lo pienso ¿Qué más da lo que piensen los demás? -Dijo mientras le daba un abrazo mucho más fuerte.

"No se que clase de vida es esta, pero haré lo que sea por protegerles, estas situaciones de alegría son las que nos diferencian de lo que hay ahí fuera, humanos y caníbales, son ambos igual de peligrosos"