Tras la catástrofe en el instituto fueron pocos los alumnos que sobrevivieron, Sandra, Lydia, Clara, Brunna y Helena se mantuvieron juntas durante un tiempo, pero la escasez de alimentos y agua fue cada vez más intensa, tras caminar durante horas decidieron que lo mejor sería separarse para cubrir mas terreno y así encontrar algo con lo que sustentarse.
-Bien ¿Qué hacemos? -Preguntó Helena-
-Está claro, nos tendremos que separar para tener alguna oportunidad -Propuso Sandra-
-No me gusta la idea de separarnos, pero creo que Sandra tiene razón -Dijo Brunna-
-¿Nos vamos a separar? ¿En serio? pff odio cuando nos separamos -Dijo Helena-
-Bueno, pues andando, haced grupos, yo no voy a hacer elegir a nadie -Dijo Sandra-
Tras unos momentos de indecisión se pusieron en marcha, Helena iría con Sandra, Brunna, Clara y Lydia irían por otro camino, acordaron encontrarse en un lugar concreto, en un centro comercial abandonado que se situaba en la cima de la ciudad.
Helena y Sandra fueron por un lado, Brunna, Clara y Lydia fueron por otro. Helena propuso mirar por una serie de calles en las cuales había negocios que podrían tener algo de valor, abrieron la puerta lentamente y la golpearon un par de veces:
-Oigo a uno, pero no sale, probablemente esté atrapado, si no ya habría salido -Dijo Sandra susurrando-
-No me da buena espina, si está atrapado será por algo, vayamos con cuidado -Respondió Helena mientras sostenía una palanca de metal entre sus manos-
Ambas avanzaron, revisaron cada cajón, cada papelera, pero no había nada de utilidad, quizá con el papel podrían hacer fuego, pero no iban a llenar la mochila de papeles.
Brunna y Lydia se posicionaban con sus rifles a los lados de la puerta, Clara tomó aire y abrió la puerta, montones de mordedores comenzaron a salir, Clara empujaba la puerta con todas sus fuerzas, consiguió crear un pequeño hueco para que solamente entrasen de uno de uno, Brunna y Lydia se dedicaban a golpear los cráneos de aquellos seres con la culata de las armas, poco a poco se deshicieron de la amenaza:
-Espero que lo que haya aquí merezca la pena -Dijo Brunna limpiándose el sudor de la frente-
-Te has manchado un poco la cara -Decía Lydia riéndose de Brunna que tenía la cara manchada de sangre-
-Eso ha estado cerca chicas, deberíamos registrar este sitio e irnos rápido al centro comercial -Sugirió Clara algo apresurada-
Mientras tanto Helena y Sandra en la oficina...
-He encontrado el problema, aquí está el tonto que hacía ruido -Dijo Sandra-
Helena se asomó y vio a un mordedor atrapado:
-Voy a intentar sacarlo de ahí -Dijo Sandra cortando los cables que le tenían atrapado-
-Mátalo sin más o déjalo estar, pero no hagas que esa cosa se quede andando por aquí -Respondió Helena bastante preocupada-
Sandra cortó los cables, pero en cuanto lo hizo un trozo del techo cayó, se levantó una estela de humo y montones de mordedores comenzaron a caer del techo, Helena entró en pánico y salió corriendo, por su camino se cruzaron varios mordedores, ella pegaba golpes, y en cuanto salió de la oficina cerró la puerta tras de sí y corrió rápidamente hacia el centro comercial.
Mientras registraban el almacén Clara vio una caja que contenía alimentos en lata, las tres se juntaron para resolver el problema, Clara comenzó a apilar cajas para poder alcanzar el premio gordo, pero la tranquilidad desapareció, en escasos segundos una alarma comenzó a sonar, y más mordedores salieron para cortar el paso al grupo, tenían poca munición y tenían que usarla bien, Clara seguía intentando alcanzar la caja:
-No tengas prisa, puedo estar así todo el día- Dijo Brunna mientras disparaba a los mordedores-
-Hago lo que puedo -Respondió Clara algo nerviosa-
-Estoy sin munición ¿Cómo vas Brunna? -Gritó Lydia-
-Tengo para dar y... -Brunna miró el cargador vacío- Y tomar... -Terminó la frase con menos ímpetu-
-La tengo, por fin -Dijo Clara-
Un mordedor pasó por detrás de las cajas y las tiró al suelo, Clara cayó y la caja chocó con fuerza contra su pierna, Clara soltó un grito fortísimo cuando la caja impactó, y el impacto fue tan fuerte que se abrió y montones de latas con comida rodaron hacia los mordedores que se acercaban hambrientos de carne humana.
Brunna y Lydia cogieron a Clara, la cargaron sobre sus hombros y salieron del lugar rápidamente, pero frenaron su huida en seco al golpearles un fogonazo de luz en el rostro...
Una voz firme pero cercana se hizo presente en el ambiente:
-Si queréis ser salvados acompañadnos en nuestro viaje, no temáis a estos seres, estamos bendecidos y protegidos por nuestro señor.
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Los mordedores
Science Fiction¿Cuántas horas al cabo del día pasas viendo la televisión? ¿Cuánto fue la última vez que cualquiera de nosotros DE VERDAD hizo algo para conseguir lo que quería? ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que cualquiera de nosotros NECESITÓ algo de lo que QUER...