H E I R |S.M.| #2

VII

VII. La Corona.

Niall aprieta mi mano en muestra de apoyo.

Debía reconocer que este asunto de la coronación me tenía nerviosa, y mis nervios sólo aumentaron en cuanto el vehículo se detuvo indicando que ya habíamos llegado.

La puerta es abierta por uno de los guardias, Niall me guiñe un ojo antes de ser el primero en salir del auto, respiro profundamente antes de salir aceptando la mano que el irlandés me ofrece.

Tenía entendido que el rey había pedido estrictamente que no hubiese tanta media, pues no era el tipo de persona al que le gustaba estar rodeado de cámaras. Dinamarca necesita de un rey que mantuviera en alto el reino, no de uno que sonriera mientras posaba para una fotografía. O al menos eso era lo que él decía.

Pero como era de esperarse, al ser un evento tan importante los flashes y el sonido de las capturas era lo primero que te recibía, me sentía incómoda en medio de todo eso, había otras personas importantes sonriendo y saludando, pero yo sólo agradecí que Niall no se detuviera en lo absoluto y se apresurara a recorrer la alfombra roja hasta llegar dentro de la seguridad de la capilla donde la ceremonia se llevaría a cabo.

Al entrar, esta ya se encontraba parcialmente llena, Niall me guía hasta la segunda fila de enfrente en la sección de la izquierda, trato de no hacer contacto visual con nadie y así lo mantengo hasta sentarme. La primera fila ya se encuentra llena, al igual que la de la fila al lado opuesto, puedo reconocer de inmediato a Nash, con su cabello largo peinado perfectamente en una coleta, y a su lado, se encuentra Sophia, trato de evitar rodar los ojos al percatarme de su presencia, pero era obvio que ella estaría aquí.

Mi atención entonces se enfoca en el trono, pensando en que en unos momentos Shawn lo ocupará. Él se haría oficialmente rey frente al mundo y frente a Dios.

Observo en silencio como todo ya se encuentra listo, la ansiedad comienza a carcomerme, ya no quería estar en este lugar, quería marcharme, pero la ceremonia inicia, ya era demasiado tarde.

Shawn entra y toda mi atención se consume a él. Viste con elegancia el traje de gala de Dinamarca, el mismo que los reyes antes de él habían utilizado. Camina con porte atravesando el salón, con su vista fija hacia el frente, centrado en todo lo que él más quería; la corona.

Llega ante la presencia del sacerdote que lo coronaría, deteniéndose frente al trono. Sé que están hablando, pero mi atención no está en las palabras por lo que ni siquiera llego a articularlas, mi atención está totalmente y únicamente en él. En cómo pasan la capa por sus hombros antes de que él proceda a sentarse, en su frente siendo ungida por aceite, en sus finas manos sosteniendo el cetro y el orbe.

Y finalmente la corona sobre su cabeza.

Y cuando lo veo portarla, me doy cuenta de algo;

Shawn no había nacido para portar una corona. La corona había sido creada para que Shawn la portara.

"¡DIOS SALVE AL REY!"

⚔️⚜️⚔️

El banquete procedente a la coronación se llevó a cabo en la misma propiedad en la que lo había sido la del bisabuelo de Shawn, el rey Zacarías II. O por lo menos eso es lo que Niall había mencionado.

Se trataba de una enorme propiedad en medio del campo a la cual nos tomó casi una hora llegar.

Al entrar al salón principal mis ojos inspeccionan el lugar en busca de Shawn, no es muy difícil hallarlo ya que la extravagante corona lo hace resaltar aún más.