XXIV

48.6K 4.2K 1.3K
                                    







XXIV. Siempre.






Shawn toma mis manos entre las suyas y comienza a sobar mis muñecas, si bien su toque es firme también es delicado sobre mi piel.

Luce tan concentrado sentado frente a mi, sobando mis muñecas como si se tratara de la actividad más importante requerida de su total atención. Sus cejas están ligeramente fruncidas, un mechón de cabello cae sobre su frente formando una perfecta "c", y mientras lo veía sólo imaginé a un niño con su mismo cabello, Dios, realmente quería que nuestro bebé fuera niño y que se pareciera a su padre.

—No es bueno que seas tan atractivo. —Digo captando su atención, Shawn me mira riéndose.

—¿A que viene eso? —Cuestiona dejando mis manos.

—Si nuestros hijos se parecen a ti voy a tener que soportar a todas las mujeres que traigan al castillo. —Menciono y Shawn vuelve a reír.

—Quizá sea así, pero de todas esas mujeres tú siempre serás la más importante en sus vidas, y eso lo van a aprender de su padre. —Sonrío antes de ponerme de pie para esta vez sentarme en las piernas de Shawn, quien se encontraba sentado en la mesita de centro que había acercado para quedar frente al mueble en el que me encontraba.

—¿Estás diciendo que soy la mujer más importante en tu vida? —Digo pasando mis brazos alrededor de su cuello.

—Por supuesto que lo eres, la única a decir verdad. —Responde introduciendo una de sus manos dentro de mi vestido, no buscaba tocarme con lujuria, en realidad sólo se abrió paso hasta llegar a mi vientre, el cual ya mostraba un poco de crecimiento. —Te quiero Thea, demasiado.

—Yo también te quiero Shawn. —Le digo antes de que él atrapara mis labios.

Al principio fue lento, disfrutando de cada sentimiento transmitido, me dejé envolver en el momento, no había prisa ni presión alguna, sólo eran nuestros labios fundiéndose al unísono.

Cuando se separa de mi lo hace depositando un beso en la punta de mi nariz, Shawn saca la mano de mi vestido y cuando lo hace me pongo de pie siendo imitada por él.

—Deberíamos ir a desayunar ya. —Me dice y yo asiento.

Lo más probable es que Nash nos acompañaría, por lo que no pude resistirme a formular mi pregunta. —¿Le has contado a Nash sobre mi embarazo? —Le pregunto y noto de inmediato el cambio en su rostro.

—Si, lo hice, ¿por qué? ¿Querías ocultárselo? —Expresa con molestia.

No le digo nada, lo ignoro pasando de largo de él, no necesitaba entrar en una absurda discusión con él.

—Thea... —Me advierte a lo que me detengo volviéndome a girar para encararlo.

—No quería ocultárselo, pero tampoco quería contárselo cuando su madre se está muriendo, quizá a ti no te importen sus sentimientos, pero a mi si.

—¿Cómo que su madre está muriendo? —Pregunta confuso, y sonrío sin gracia alguna.

—¿No lo sabías? Conociéndote llegaste a restregarle en la cara que vamos a tener un hijo sin molestarte a preguntar antes el motivo de su visita, no me sorprende que Nash no te haya contado, él vino buscando tu apoyo, es una lástima que no lo haya encontrado.

—No tienes ningún derecho a decir eso, he pasado la mayor parte de mi vida protegiéndolo, dando todo por él. —Menciona con dureza, pero sin llegar a exaltarse.

—Desde mi punto de vista es diferente, sólo le has quitado. —Digo y Shawn se pasa la mano por su cabello despeinándolo.

—Exacto, desde tu punto de vista. Si tan sólo no hubieras tratado de meterte en su cama te habrías dado cuenta de cómo es nuestra relación. No me vengas a decir que yo le "quité" refiriéndote a ti, que bien sabes que ese no fue el caso, yo no fui a arrancarte de los brazos de Nash, tú viniste y me abriste las piernas por voluntad propia, me escogiste a mi, dijiste ser mía sin importarte lo que mi primo sintiera por ti. Yo no le quité nada, en si, fuiste tú la que se metió entre nosotros jugando de día con él y de noche conmigo, no te queda venir y reclamarme, ¿o qué? ¿Me vas a decir que es mentira?

—No, no lo diré, porque tienes razón, supongo que tú puedes decir que me metí entre ustedes jugando con ambos, ¿pero sabes? Esa nunca fue mi intención, tú sabías que yo estaba interesada en Nash, y por eso te empeñaste en mantenernos separados, ¿o ya se te olvidó lo violento que te ponías cada vez que él y yo estábamos juntos? Si, yo también tuve la culpa por ceder siempre ante ti, no lo voy a negar, pero tú tampoco te hagas el indignado. Deberías admitir que tú "interés" por mí se originó cuando te diste cuenta que Nash lo estaba de mi, de otra manera hubieses continuado sin hacerme en tu mundo. No seas hipócrita Shawn, que desde el inicio quisiste lo que tu primo quería y no descansaste hasta que lo obtuviste, porque yo solo fui un objeto para ti, un maldito premio que querías obtener sin importar el precio. —Hago una pausa buscando por aire. —Tu y yo le hicimos daño a Nash, esa es la única verdad.

—Creo que después de todo debiste quedarte con él, claramente siempre te importarán más sus sentimientos. —Shawn suelta antes de girarse para marcharse, sin embargo lo sigo tomando su mano para que se detenga.

Suspiro resignada, no quería volver a dejarlo ir estando peleados, ya no quería pelearme con él.

—¿Te das cuenta que apenas unos minutos atrás estábamos bien diciéndonos que nos queríamos? Y ahora estamos discutiendo, contigo diciéndome que debería haberme quedado con otro hombre. —Shawn me mira en silencio por lo que continúo. —Quiero a Nash y siempre lo haré, pero no de la misma forma en la que te quiero a ti. Tú eres el fuego de mi vida, y hace tiempo decidí que no me importaría ser quemada por ti. —Shawn suspira.

—Lo siento Thea, no te dije todas esas cosas con la intención de lastimarme, pero debes de entender que me molesta que defiendas tanto a Nash, eres mía y no de él. —Dice volviendo a mostrar un poco de su lado posesivo.

—Tú lo has dicho, soy tuya Shawn, de nadie más. —Concuerdo con él, viendo cómo muerde su labio inferior antes de pasar su brazo por mi cintura atrayéndome a él.

—Y ahora que ya hemos terminado de discutir, ¿te parece si tenemos sexo de reconciliación para poder ir a desayunar? —Sugiere con una sonrisa lasciva.

—¿Siempre va a ser así? —Respondo enarcando una ceja.

Siempre.



Pero que masoquistas e ilusas somos algunas personas.

H E I R   |S.M.|   #2Where stories live. Discover now